Capítulo cincuenta

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Un tiempo después de salir del gimnasio y luego de conducir sus coches a toda prisa, hasta la casa de Pavel, la nueva pareja entró en esta y sin dejar de besarse y mientras se sacaban la ropa, se dejaron caer en el sofá, donde continuaron con más besos y caricias.

...-¿Y si subimos?, la cama está arriba- susurró el fotógrafo bajo el veinteañero modelo- estaremos más cómodos.

-Vamos donde tú quieras

Dicho eso, ambos se levantaron y a trompicones subieron la escalera que les llevó hasta la habitación del mayor, dónde este se tumbó con una amplia sonrisa, a la par que movía su dedo índice, llamando al más joven.

-Oh joder, eres tan malditamente sexy. Voy a devorarte

El fotógrafo rió sonoramente tras ver el salto que Pooh hizo para subirse al colchón, cual salvaje felino y a continuación besaba y lamía su cuerpo desde sus piernas a su boca.

El fotógrafo rió sonoramente tras ver el salto que Pooh hizo para subirse al colchón, cual salvaje felino y a continuación besaba y lamía su cuerpo desde sus piernas a su boca

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-Te amo

-Y yo te amo a ti, precioso

Más besos, caricias y gemidos de placer fueron dados por los necesitados chicos, hasta que el más  joven cogió uno de los condones de la mesilla, junto a la cama y se lo puso pues llegó el momento de fusionarse, una vez más.

Pavel a cuatro patas, gimió y jadeó a cada estocada que el más joven le propinó, mientras le besaba la espalda.

...-Aaaaaahh... siiii.... siiii.... sigue ...sigue... más... más

Poco después, este se corrió, soltando un gran grito de satisfacción, haciendo sonreír orgulloso al veinteañero, el cual intensificó el ritmo, hasta lograr llegar al orgasmo también

Tras descansar un rato, exhaustos por el derroche de pasión, comieron algo y un tiempo después volvieron a tener sexo una tercera vez, quedándose finalmente dormidos.

A las ocho de la mañana en punto, el sonido del móvil del modelo universitario, les despertó.

...-¿Quién es?

-Probablemente sea Lyn- dijo Pooh incorporándose- duérmete de nuevo

Pavel asintió y volvió a cerrar los ojos.

-Buenos días, mamá- habló el más joven tras soltar un resoplido- ¿desayunar?, ¿bollos calientes?...no...no creo que llegue a tiempo... Si...si, probablemente lo sabrás muy pronto...ok...ok

Tras colgar, Pooh sonrió mirando al fotógrafo dormir y a continuación se acercó y le besó la frente.

-¿Cómo demonios puedes verte tan adorable?

9. Buen chico -PoohPavelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora