Después de unos días de haberlo estado pensando decidí ir este fin de semana a Memphis y volver, con Jack.
Hoy era Jueves, así que empecé a hacer mis maletas y a dejarlo todo preparado para cuando llegase el Domingo por la noche.
El viernes llegó bastante rápido, por fin estaba sentada en el avión, rumbo a ver a mi familia. Que ganas tenía de verlos, no me gustaba vivir tan lejos de ellos.
Una vez allí vi a mi hermana esperándome con una gran sonrisa en la cara.
-Hola, Mags.- Dije abrazándola.
-Soy yo o cada vez que vienes estás más bajita.- Ella me dijo riéndose.
-No creo que pueda empequeñecer más, serás tu que dentro de nada te chocas contra el techo.- Me reí.
-¿Qué tal las cosas por LA?- Ella me preguntó.
-Van... bien. Supongo.- Le dije.
-¿Qué ha pasado? ¿Es por el tema Ian?- Ella me preguntó.
-Si, el otro día me dijo que fuera con el una fiesta de Shay. Cuando me fue a recoger había llevado a Sophia y ella estaba muy celosa, me tuve que marchar yo sola de la fiesta, menos mal que Colton fue a recogerme y seguimos con la fiesta en otro lado.- Le dije.
-Me gustaría Colton como cuñado.- Ella me dijo sonriendo.
-La pena es que es gay.- Susurré en su oído. Las dos nos echamos a reír.
-¿Por qué los chicos guapos se hacen gays?- Ella me preguntó mirando al cielo.
-Mags, que estás casada.- Le contesté.
Las dos nos montamos en su coche riéndonos.
-¿Ya sabe mamá que estás aquí?- Preguntó.
-No, es una sorpresa así que más te vale no haber dicho dónde ibas.- Le dije,
-No, no he dicho nada. Tu secreto está a salvo conmigo.- Sonrió.
-¿Cómo está baby G?- Pregunté pensando en mi sobrina.
-A estas horas tiene que estar dormida, es hora de la siesta.- Ella me explicó.
Cuando llegamos a casa de mi madre eran las 6 de la tarde y ella estaría sentada en el sofá, medio dormida e intentando ver su serie favorita sin quedarse dormida.
Entramos en silencio y Jack empezó a ladrar. Lo cogí en brazos para que dejase de ladrar y me escondí en la cocina cuando vi que mi madre se levantaba.
-¿Dónde está Jack Maggie?- Mi madre preguntó.
-Hola, mamá.- Dije sonriendo saliendo de mi escondite.
-Lucy.- Ella me dijo dándome un abrazo.
-Hola, mami.- Dije devolviendo su abrazo.
-No sabía que ibas a venir, estaba limpiando tu habitación y no hay sábanas limpias puestas. Debería subir a ponerlas.- Ella dijo rápidamente.
-No, mamá. Puedo hacerlo cuando me vaya a la cama. Quiero pasar tiempo contigo hasta que tenga que volver.- Dije.
-¿Cuando vuelves?- Me preguntó.
-El Domingo por la noche, quería pasar el más tiempo posible con vosotros.- Le dije.
-Vamos, vamos a sentarnos.- Ella me dijo dándome otro abrazo.
Después de cenar, Maggie y Lewis volvieron a casa con la pequeña, que ya no era tan pequeña. Iba a cumplir 1 año ya, que rápido pasaba el tiempo.
-¿Hay algún novio?- Me preguntó Ryan.
-No, no lo hay. De momento.- Dije sonriendo.
-Eso es que ya le has echado el ojo a algun chico.- El se rió.
-Si, pero es más platónico.- Dije.
-¿Quién? ¿Le conozco?- El me preguntó.
-Ryan, ha estado en casa varias veces.- Mi madre le dijo guiñandole el ojo.
-Creo que se quien es. ¿Ian verdad?- El me preguntó.
-Si, pero como he dicho, no vamos a llegar a tener nada. El tiene novia.-Contesté.
-Pero seguramente, que esa chica, no sea tan guapa como tu.- El me dijo dándome un beso en la frente.
-¡Lucy!- Una voz chillona resonó por todo el salón. Me di la vuelta y vi a mi medio hermana Kirby.
-Kirby.- Dije levantándome del sofá y abrazándola.
-No sabía que venías.- Ella me dijo.
-Ha sido una sorpresa.- Me reí.
-Me alegro de verte. Te iba a llamar, me he encontrado con un grupo de tus fans. Sabían quién era yo y me han pedido autógrafos, fotos y tu teléfono. Casi me siento como una estrella.- Ella me dijo riéndose.
-Un día podrías venir conmigo a LA y salir juntas de fiesta.- Le dije.
-Yo se que salís de fiesta y tal. Pero qué tal si no hablamos de ellas, no me gusta ver como vais creciendo cada vez más hasta que dentro de poco vais a estar casadas y con dos hijos por lo menos.- Mi madre dijo con lágrimas en los ojos.
-Oh, vamos mami. Sabes que siempre voy a ser tu niña pequeña.- Dije abrazándola.- Además, aparento 13 años.- La susurré riéndome. Todos nos reímos y empezamos a hablar sobre la vida.
-Bueno, voy a ir subiendo a dormir. Estoy muerta de sueño.- Dije estirándome mientras me levantaba del sofá.
-Espera, te ayudaré con las sábanas.- Ella me dijo.
-No, quédate disfrutando con Ryan.- Dije dándola un beso en la mejilla.- Buenas noches, mamá.
-Buenas noches, Lu.- Ryan me dijo y yo me agaché a darle otro beso a él en la mejilla.
Cuando llegué a mi habitación, saqué mi teléfono y abrí mi cuenta de twitter.
@lucyhale: No hay nada mejor que estar de vuelta en casa.
Cogí a Jack y lo subí a la cama cuando hube puesto las sábanas y yo me puse mi pijama y me subí a la cama con Jack en mis brazos.
Por primera vez en años soñé con mi futuro, mis hijos, mi boda y alguien especial para mí.
