Troian POV
Iba caminando hacia la cafetería donde había quedado con unos amigos, iba a pasar por al lado de un montón de personas haciendo fotos a alguien cuando vi quien era. Era Lucy y estaba totalmente pálida.
-Dejarla en paz.- Grité haciéndome un hueco entre las personas y cuando llegué allí le pregunté a Lucy si estaba bien y de repente, si no fuera por mis reflejos, habría caído redonda al suelo.- ¡Lucy, Lucy!- Grité.
Me levanté del suelo y les dije que se marcharan si no querían que llamase a la policía y ellos rápidamente se marcharon. Lucy se despertó y se me quedó mirando.
-¿Qué ha pasado?- Me preguntó.
-Tranquila, solo ha sido un desmayo.- Dije ayudándola a levantarse del suelo.
-Gracias por quitarme a todas esas personas de encima.- Suspiró.
-De nada, vamos te llevaré a casa.- Dije.
-¿Qué haces aquí?- Me preguntó.
-He quedado con unos amigos, voy a llamarles y les voy a decir que voy a llegar un poco más tarde.- Dije sacando mi teléfono.
-No lo hagas, ve. Yo puedo ir sola, estoy mejor ahora.- Ella me contestó.
-¿Estás loca? Lo estás si crees que te voy a dejar volver a casa sola después de lo que ha pasado.- Dije.
Ambas caminamos por la calle y cuando llegamos a su casa ella me miró.
-Gracias de nuevo, Troi. No sé lo que hubiese podido pasar si no hubieses llegado.- Dije abrazándola.
-No hace falta que me des las gracias, Lucy. ¿Para qué están las amigas?- Pregunté sonriendo.
Lucy POV
Cuando subí a casa tenía miedo de mi padre... No porque me fuese a hacer nada, tenía miedo de contarle lo que había pasado. Querría ir a matar a todas esas personas.
-¿Qué tal el paseo?- Me preguntó cuándo cerré la puerta y entré en el salón.
-Bien, papá.- Le mentí sonriendo.
-¿Qué ha pasado?- Me preguntó preocupado ahora.
-Nada, no ha pasado nada, papá. ¿Por qué lo preguntas?- Pregunté.
-Lucy, eres mi hija, conozco cuando mientes y cuando no.- Él me contestó acercándose a mí.
-Estaba... Estaba dando un paseo cuando un montón de personas se me acercaron para preguntarme como estaba y que qué había pasado. No sé qué pasó pero me desmayé.- Dije.
-¿Qué? ¿Estás bien? ¿Quieres que vayamos al médico? Podemos ir a denunciarlo, Lucy.- El me dijo.
-No... estoy bien, no ha pasado nada, papá.- Dije.
-Estás bien, pero podía haber pasado algo más gordo, Karen.- Me respondió.
-Papá, estoy bien, pasemos de página. No quiero hablar más de ellos. Troian los apartó de mí y me trajo hasta aquí. Ya está, ya pasó.- Dije.
-Está bien, pero prométeme que si te vuelven a acosar de esa manera irás a denunciarlo.- El me suplicó.
-Papá, están haciendo su trabajo.- Dije.
-Su trabajo es una cosa, acosar a una persona hasta el punto de que esa persona se desmaye es otra.- El me contestó.
-Dejemos el tema, ¿sí?- Le pedí. Solo quería sentarme en el sofá con una manta y ver películas con mi padre y con Ian todo el día.
-Mi jefe me ha llamado.- Mi padre me dijo.
-¿Qué ha dicho?- Pregunté.
-Que necesitan me ayuda para hacer una cosa.- El suspiró.- Pero no quiero dejarte sola de momento, les llamaré y les diré que no, que tengo que cuidar de ti.- Terminó.
-Papá, puedo cuidar de mi misma. A demás, tengo a Ian y estoy segura de que mis amigas estarán encantadas de ayudarme si necesito algo.- Dije.- Vuelve, papá. Estaré bien lo prometo.- Dije.
-¿Estás segura?- Me preguntó.
-Claro que sí, papá. Tienes que volver a tu trabajo y yo debería de volver al mío también.- Dije.
-Recuerda que tienes que estar en reposo.- Dijo.
-Lo sé, pero necesito moverme... Me duele todo el cuerpo de estar tumbada boca abajo sin poder hacer nada.- Le expliqué.
-Sé que es difícil, mi amor. Pero es necesario.- Me dio un beso en la frente y fue a preparar su maleta.
Al día siguiente, Ian fue a llevarlo al aeropuerto mientras que yo me quedé en casa viendo la tele.
Me desperté con el sonido de la puerta abriéndose y cerrándose. Ian entró con un semblante enfadado.
-¿Qué pasa?- Le pregunté.
-¿Por qué no me has contado lo que te hicieron ayer?- Me preguntó.
-Ian...- Suspiré.
-¿No crees que debería de saberlo? Me he tenido que enterar por Troian que me ha preguntado cómo estabas después de lo que pasó ayer y yo me he quedado con una cara de bobo y la he tenido que preguntar que qué había pasado.- Él me dijo cabreado.
-Ian...- Intenté calmarlo.
-NO, IAN NO.- El me gritó.- ¿Y si te hubiese pasado al más gordo? ¿Me lo hubieses dicho?- Preguntó.
-No quería preocuparte ¿vale? Siempre estáis encima de mí.- Le grité de vuelta.
-Voy a volver a mi apartamento ahora.- Él dijo cogiendo sus cosas.
-¿Estamos bien?- Le pregunté.
-No lo sé.- Con esa respuesta se marchó de mi apartamento.
Aquí un nuevo capítulo de Never Give Up, no me matéis pls :) Subo ahora porque no se si me va a dar tiempo a subir este fin de semana. Un beso.- M