Cuando llegamos a casa él me llevó a mi habitación y me tumbó en la cama.
-Me siento inútil.- Le dije.
-No lo eres, hay veces que se necesita ayuda.- Él me contestó dándome un beso en la frente.
Nos pasamos el día viendo videos de YouTube y viendo películas. Para comer llamamos a un restaurante chino y nos trajeron la cena a casa.
No pude hacer nada por mí misma 2 semanas, por fin pude volver al trabajo
-BIENVENIDA, LUCY.- Gritaron todos cuando llegué el trabajo el primer día después de mi esguince. Ian había sido de mucha ayuda durante esos días, el sacaba a Jack de paseo, me hacía la comida los primeros días. Me ayudaba a ir a mi habitación o al baño o al salón.
-Hola, chicos. Que ganas tenía de volver.- Dije abrazándolos a todos.
-¿Está tu tobillo mejor?- Preguntó Troian.
-Ya no me duele, que es lo que importa.- Contesté sonriendo.
Todos fuimos a grabar nuestras escenas, hoy nos tocaba grabar a Ian y a mi unas escenas que teníamos atrasadas.
-¿Qué tal te sientes hoy, Lucy?- Me preguntó Ian.
-Estoy bien, tranquilo.- Dije abrazándolo.
-¿Necesitas que vaya a tu casa a hacer algo?-
-No, ya has hecho muchas cosas por mi. Ahora no se como pagártelo sin decirte que te rompas una pierna para poder cuidar de ti.- Dije riéndome.
-Espero que no me pase algo de eso, nunca.- El me contestó.
-Lucy, podías dar una fiesta en tu casa para celebrar que por fin vuelves al trabajo.- Me dijo Ashley sonriendo.
-Claro, cuando queráis. Solo no invitéis a mucha gente o Jack se asustará.- Dije.
Al final quedamos con que la fiesta sería el fin de semana siguiente, Ian me dijo que iría pronto para que me pudiese ayudar con ella y quizá, antes haríamos un ustream. Hacía mucho tiempo que no hacíamos uno así que acepté.
La semana pasó rápido y estaba esperando a que Ian viniese a casa. No sabía que ponerme así que me puse algo casual. Un top de encaje y una falda negra con unos zapatos de tacón con un collar, pendientes en formas de lazos que me regaló Annie hace unos años para mi cumpleaños.
Terminaba de ponerme los pendientes cuando el timbre sonó. Corrí hasta la puerta y abrí.
-Hola, Goose. ¿Deseosa de verme?- El me preguntó dándome un beso en la mejilla.
-A lo mejor, a lo mejor.- Le dije entrando en mi casa moviendo las caderas. Cogí mi teléfono y puse algo de música.- ¿Hacemos el ustream?- Le dije sonriendo.
-Vamos a ello.- El me contestó sentándose en el sofá y cogiendo el ordenador. Ya se sabía la contraseña de los días que había pasado en mi casa.
-Ves poniéndolo y yo voy a por algo de beber.- Dije yendo a la cocina. Saqué una botella de Vodka de la despensa de alcohol que tenía para la fiesta y volví con dos vasos y hielo.
-Estoy aquí.- Dije sonriendo. El me miró y dijo.
-Por fin ha llegado la anfitriona, ya era hora.- Dijo moviendo el ordenador para que saliese.
-Qué rápido has sido, Mr. Harding. Hace unos días no eras tan rápido con las tecnologías.- Me reí sentándome a su lado.
-Hola, chicos. Esta es la sorpresa que os tenía que dar. Un Ustream con el Sr. Harding. Sabemos que estábais deseando que lo hiciéramos y hoy hemos quedado en hacerlo. Hoy también tenemos una de las fiestas que damos los chicos del cast, así que no tardaremos mucho en irnos por que la fiesta no se prepara sola.- Dije riéndome.
-Si, fiesta. Habrá Strippers, bomberos para las chicas...- Bromeó Ian.
-¡IAN! Hay menores viéndonos.- Me reí.- Es todo mentira, solo es una reunión del cast con algo de música, nada de tías desnudándose ni de tios.- Terminé.
-Lucy, eres muy guapa.- Dijo Ian mirando a la pantalla.
-Lo se, Ian. No necesitas decírmelo.- Me reí sabiendo que lo había leído. Pero solo era una broma.
-No en serio, eres preciosa.- El me dijo mirándome. Entonces me di cuenta de que me lo estaba diciendo en serio. Yo me sonrojé y volví a mirar la pantalla.
El ustream duró como media hora después de eso. Creo que a Ian se le había subido el vodka un poco más rápido de lo normal por lo que había dicho en el.
Una vez que cerramos el ordenador, Ian se levantó.
-Necesito ir al baño.- El me dijo.
-Está bien, voy preparando algo.- Dije sonriendo. Cuando el se metió en el baño yo fui a la cocina. Aún no me podía creer que me había llamado preciosa. Mis manos estaban sobre la encimera y yo estaba sonriendo como una tonta repitiendo ese momento en mi mente.
-¿Lucy?- Ian me llamó desde el salón.
-Ya salgo.- Le grité. Cogí varias botellas y las saqué fuera para ponerlas en la mesa junto con vasos que ya había colocado allí.
-Necesito hacer esto.- El me dijo antes de agarrarme del brazo y aplastar sus labios contra los míos.
