Little bit of medicine, little bit of love. [Disponible en Físico]

Extra: Accidente

Algo en mi mente me estaba gritando que me levantara de la mesa y siguiera a Amy para poder ir con ella, no estaba cómodo con que condujera por las noches y no era por falta de confianza en su forma de conducir, la verdadera razón era que había muchos locos que se les olvidaba que tenían un volante en frente y causaban accidentes, no quería que ella se topara con uno de esos locos.

Me levanté de la mesa sin decir una palabra más y fui hasta la entrada principal de la casa, era bastante tarde cuando llegué al estacionamiento porque ella se había ido. De verdad tenía prisa. Suspiré y me pasé las manos por el cabello. No había más que hacer sólo regresar a la fiesta y esperar a que regresara.

Estaba tomando unas copas y escuchando una plática muy entretenida entre Michael y Dan, hablaban de música, y no es que no era muy conocedor de ese tema pero ellos eran apasionados de los instrumentos, ellos discutían cual era la mejor guitarra eléctrica que podían comprar. Nathan y Erick también presenciaban esa plática mientras las chicas estaban en la pista de baile, Nathan tenía la mirada perdida en algún punto detrás de mí y estaba casi seguro que no estaba poniendo atención. Tal vez la llegada de Gemma lo había espantado hasta dejarlo sin habla.

Ya estaba relajado, Amy había llamado para decir que iba en camino al hospital y sólo estaba a la espera que me llamara y dijera que estaba de regreso pero me sorprendió cuando no fue así.

—Estoy a punto de salir del hospital pero surgió algo— esas palabras no me gustaron así que fruncí el ceño y suspiré — Rich está mal, está llorando por mí y no quiere hacer nada más que tenerme ahí. Mamá no lo puede calmar y no quiere decir que pasa, estoy preocupada y voy a ir hacia allá.

Me avergoncé al escuchar que se trataba de su hermano, Amy tenía imprevistos casi siempre, no podía culparme por mi reacción.

—Oh, bueno sí debes ir — respondí apenado.

Me sugirió que tomara un aventón a casa ya que no sabía si iba a regresar a tiempo para el final de la velada, la escuchaba nerviosa y preocupada por esa razón la tranquilicé. Cuando Rich estaba metido en algo ella no podía pensar en nada más que en su bienestar.

Terminamos la llamada con la promesa de que iba a llamarme cuando estuviera en casa de sus padres. Puse el teléfono en el bolsillo de mi pantalón y en ese mismo instante Mia se acercó.

—¿Dónde está tu novia?

—Es Rich, está mal, dice que está haciendo berrinches y no lo pueden calmar.

Mia negó con la cabeza.

—Te envía una disculpa.

—No te preocupes, yo espero que puedan tranquilizarlo.

—Igual yo — suspiré y le sonreí.

—Vamos a bailar, estamos todos en la pista de baile — me invitó.

Me gire a mí alrededor para, efectivamente, encontrarme con que nadie estaba en sus asientos a excepción de Nathan.

—¿Él no viene?

Mia me guiñó un ojo y tomando mi brazo me guio hasta dónde estaba su amigo y lo tomó de la mano para llevarlo también a la pista de baile.

—No quiero bailar, Mia.

—Sólo un poco, quiero a todos mis amigos bailando conmigo y celebrando.

Me dejé llevar por la música cuando estuvimos en la pista, a pesar de no tener pareja de baile me divertí moviendo mis piernas y cantando las canciones populares del momento. Y de esa forma se nos fue la noche.