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-Dime que no está ebria.- mire a Khloe, ella suspiro, decidiendo ignorarme y tomar más de su coca-cola. Mire suplicante a Kylie, que también me ignoro y bufe, caminando hacia Kris.

-¿Mama, tu...- olisque el aire.-No, olvídalo.- me regrese y suspire, tomando mi celular e intentando prenderlo.

Maldije en mi mente cuando estaba sin carga, y tome otro iPhone de al lado. Lo encendí y al ver la foto de Kendall en algún desfile supe que era de ella.

Puse su fecha de nacimiento, sonriendo cuando se desbloqueó y salieron las aplicaciones. Abrí la aplicación de una revista cualquiera en la que toda la familia Jenner era la portada.

Abrí mis ojos sorprendida, ya que siempre que teníamos una portada Kris me lo decía. O la misma revista me lo decía por Twitter.

Página 5.

Pase las páginas rápidamente, y cuando llegue a la número cinco, mi boca cayo al piso. No literalmente, pero casi.

"¿Quién tiene más sexo?  Hola con la familia Jenner"

Seguí leyendo, cada vez más horrorizada.

"FA*": Todos se preguntan sobre las chicas Jenner, pero en realidad ellas no son muy interesantes. Todas son la misma diva mierda."
(FA*-fuente amiga)

"Kendall es demasiado puta, Kylie es la más estúpida y hace todo lo que sus hermanas hacen, Kirstie es una cualquiera. Hasta Kris lo ha dicho. Yo, lo he escuchado. Bruce no tiene nada de peso allí. El sólo presume sus medallas con cualquiera que entre al infierno de la casa Jenner.- declaro.
"¿Que creen? ¿Será esto cierto?"
Mierda.

-¡Mama!- grite, saltando de mi asiento y preparándome para pelear.

Aunque mi madre este ebria. Joder.

***

-¿Cómo te sientes?- pregunto Justin, mientras se acomodaba en un auto. Yo estaba boca abajo en mi cama, tapando con una manta mi pecho desnudo.

-Cansada como la puta madre. ¿Tu?- rodó los ojos y suspiro.

-Igual, aunque no esté de vacaciones en las Islas Canarias, aquí también hay trabajo, Jenner.

-Ja-ja. Que gracioso. ¿Dónde vas?- fruncí el ceño e hice una coleta desordenada en lo alto de mi cabeza.

-Al estudio.- abrí los ojos, negando con la cabeza.

-¿Tan tarde? Sabes que hora es, ¿No?- el asintió y movió su cabello Rubio.

-Me concentró más ahora. ¿Irás de invitada a los Teen choice Awards?- hice una mueca y asentí.

-Invitaron a Kim y ella nos llevara a nosotras. Y obvio tengo que ir para aplaudir cuando ganes.- guiñe un ojo y el río, negando.

-Hay muchos buenos.

-¿Estas insinuando que no ganarás?- abrí mi boca en forma de "O".-¿Quien eres y donde dejaste a mi amigo? ¡Eres Justin Bieber!- reí, el rodó los ojos y sonrió.

-¿Cuándo regresan? Nash las extraña.- Escuche un quejido de Nash y reí.-Bueno, yo también un poco.- miro con el ceño fruncido hacia delante y bufo.-Kie. Pero si yo estoy hablando con ella ahora, pedazo de idiota. No, ahora te jodes.- regreso su atención a mi y su sonrisa se agrando.-¿Sigues estando con ese tal Nathan?

-Jamás estuve con el. Y no. Tenías razón.

-Suelo tenerla. ¿En qué?

-Es un hijo de puta.- solté, el asintió y suspiro.

-¿Qué te hizo? ¿Es necesario que lo golpee? Espera un momento. ¿El esta allí?

-Eh...Viajo a las Islas Canarias.- sonreí levemente, no queriendo echar más leña al fuego.

-¿Contigo? ¿O te siguió?

-Fue casualidad. Ninguna de las dos.

-Casualidad mis...

-¡Hola Jaxon! ¡Amiguito!- Justin se calló de golpe y me guiñó un ojo.

-Mis...Jeans. Hablamos luego, Kie.

-¡Pero yo quiero hablar con Jaxon! ¿Lo llevaras contigo al estudio? ¡Justin!- FaceTime se cerró y yo bufe, tirando mi celular lejos y levantandome, buscando mi sujetador.

-¿Kie? No creerás esto...- grite de sorpresa, intentando tapar mi pecho con mis brazos.-uh, lo siento. Aunque no exagerares, Kirstie.- Kendall se tiró en mi cama y tomo mi top en sus manos.-Lindo.

Asenti y termine de abrocharme el sujetador. Tome mi top de sus manos y lo pase por mi cabeza, acomodandolo.

-¿Dónde irás? Te veo un poco apresurada.- asentí rápidamente, buscando mis botines. Me senté en mi cama y subí mi pie para ponérmelo.

-Iré a un centro comercial.- respondí, terminando de ponerme el otro zapato y corrí a mi tocador.

-¿Tan arreglada? Una sudadera, jeans y unos toms es suficiente.- comento, alzando una ceja.-Parece que fueras a un desfile.

-No lo entiendes. Debo ir a ese centro comercial.

-¿Debes? Explícame.- ella se sentó derecha en mi cama y frunció el ceño.

-¿Recuerdas la revista que salíamos todas? Estoy intentando arreglarlo. Y ellos quieren hablar conmigo.

-¿Cómo un trato?

Hice una mueca.-Algo así.

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«La Tercera Jenner»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora