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-¡Kirstie Jenner!- rodé los ojos, mirando con un puchero a Justin. Soltó una risa y tome la difícil decisión de abrir la puerta de mi casa. Es decir, esta loca sin siquiera yo entrar me esta gritando.

-¡Mama!- grite, tomando entre mis manos el brazo de Justin. Si veía algún objeto siendo lanzado hacia mi, me cubriría.

-¡Dios! ¿Que te pasa? ¿En que estabas pensando?- Sobo su sien y señaló la puerta -Gracias por hacer de chofer, Bieber. Te veo luego.

-Suerte- murmuro Justin antes de darse la vuelta con una mueca. Se despidió de Kendall que estaba tirada en el sofá y salio casi corriendo por la puerta.

-Bueno, estoy muy cansada, hablamos luego, ma...

-¡Escandalo en Dash! ¡Una Jenner sacando las garras! ¡El jodido Nathan Led! ¡Fiesta en casa de GiGi! ¡Vecinos denuncian casa de GiGi Hadid por creer que tenían droga! ¡También por música después de la hora permitida! ¡Desconocido el paradero de Kirstie Jenner! ¡Exactamente por seis horas! ¡Fotos ebria en Snapchat! ¡Se sospecha que Kirstie y Kendall Jenner estuvieron drogadas! ¡Aparece mágicamente despeinada en un edificio! ¡Que investigaron, y ¿adivina que? ¡En el edificio vive actualmente Nathan Led! ¡Bieber al rescate!- suspire fuertemente cuando supe que ya no había vuelta atrás. Esta seria la conversación.

-Mamá...

-Y podría seguir, Kirstie. Te aseguro que podría. ¡Hiciste todo eso en dos días! ¿Y te digo que es lo peor? Que yo estaba igual que las revistas de chismes! ¡No tenia una puta idea de donde estaba, y debo aclarar, mi hija!

-¡Kendall también estuvo!- grite, sintiendo mis ojos picar por las lágrimas.

-Oh, gracias hermana, pero es la segunda vez que escuchó la misma conversación- Kendall bufo desde la sala principal y mire con lágrimas en mis mejillas a Kris.

-¡Kendall estuvo! ¡Y ya hable con ella! ¡Ahora estoy hablando contigo!

-Mamá, no tengo una excusa, enserio- dije, sorbiendo mi nariz. Debí quedarme con los chicos en casa de GiGi. No debí tomar con el móvil encendido. No debí subir esas fotos a Snap. No debí irme con Nathan. Debí esperar y llamar a alguno de los guardias, antes de salir yo sola.

<<No tengo una excusa- repetí -Es mi culpa, fueron mis acciones y mis decisiones y las acepto. Soy mayor de edad, y se que eso no significa nada para ti, pero puedo responsabilizarme  y superar las consecuencias que esto trae. Solo puedo decir, de madre a hija, que lo siento por ignorar tus llamadas, por no avisarte donde iría o donde estaría. Pero, de mánager a famosa te quiero decir que te puedes ir a la mierda. Tal vez no estaba siendo muy consciente de lo que estaba haciendo, pero eso es mi problema. Mi vida es esta. Y no me estoy metiendo en la tuya. ¿Me has siquiera preguntado como me siento? ¿Al menos te interesa saber que paso con Nathan? ¿Porque estaba llorando cuando salí? No, claro que no.

Me di unas palmadas mentalmente cuando abrió la boca y volvió a cerrarla, sin saber que decir. Seque las lágrimas de mis mejillas, y camine con todo mi orgullo en alto hacia la entrada. Abrí la puerta y no me sorprendí al ver a Justin detrás de esta, abriendo sus brazos para mi.

Cerré la puerta detrás de mi, y me lanzo a sus brazos. Fui abrazada de vuelta, y mis sollozos se vieron interrumpidos por su pecho. Llore mas fuerte. Por el enojo. Por la sensación de que todos están decepcionados de mi.

-No llores, nena. Por favor.

-A pesar de todo, Justin- sorbi mi nariz de nuevo -Ella se lo merecía. No me arrepiento de decir lo que dije- Justin suspiro y tomo mi rostro en sus manos, limpiando mis mejillas con los pulgares.

-Sabes que no soy muy bueno subiendo el animo- reí levemente, asintiendo -Pero creo que no te arrepentirás. Por ahora- deje mi frente en su pecho y asentí, sabiendo que tenía razón.

-Pero no quiero que ese momento llegue- admití. Quería quedarme con mi corto momento de rebeldía.

-Lo se- dejo un beso en mi frente e hizo que lo mirara a los ojos -¿Un poco de Nicki Minaj y David Guetta?

-Demonios, eso suena perfecto- río y abrazo mis hombros con su brazo, protegiendo mi rostro de las pocas cámaras que se atrevían a fotografiarnos aun con los guardias al rededor. Subí de copiloto y el dio la vuelta, subiéndose a mi lado. Encendió el increíblemente caro auto y miro por el retrovisor.

-¿Sabes, Justin?- me miro brevemente, antes de regresar la vista a la calle -Todos se van decepcionando de mi en algún momento.

-Eso no es para nada cierto. No me has decepcionado a mi. Ni a los chicos. Y te conocemos hace... ¿Que, casi cuatro años?- Sonreí  -Además, es tu vida. No le tienes que rendir cuentas a nadie. Si tu estas contenta con tus decisiones, o al menos vas a tomarlo como una experiencia para no volverlo a hacer, significa que lo haces bien.

-Dices que no eres bueno con las palabras, pero en realidad no lo dices enserio.

-Vale, me descubriste- sonrió grande y giro el rostro para guiñar el ojo -Soy jodidamente bueno con las palabras.

-Claro que lo eres, lindo.

-Basta, harás que me sonroje- musitó en un tono muy agudo, haciéndome reír a carcajadas justo cuando la canción de Hardwell y Dj Tiësto "Zero 76" sonaba en la gran radio que Justin tenia en el auto.

Empecé a moverme al ritmo, haciendo reír a Justin.-¿Le puedo subir?

-Todo lo que quieras, nena- Sonreí grande, presionando varias veces el botón de "+" hasta que me aviso que era el máximo.

Reí fuerte al ver a Justin moverse conmigo e intentar seguir la mezcla de la canción haciendo sonidos extraños con la boca.

***

#TeamJustin? Idk
Amo la foto de multimedia😍
Me acabo de dar cuenta que estamos en puesto #541 -no estoy muy segura- y eso es genial.
Ósea, hay millones de novelas increíbles marcadas por novela juvenil, y es un buen puesto. Al menos para mi.
¿Le pican a la estrellita? Es gratis😉
Mucho lof para ustedes❤️

«La Tercera Jenner»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora