«La Tercera Jenner»

•10•

Los aviones públicos.

Tienen Ventajas y desventajas.

Más desventajas si lo comparas con un vuelo privado.

Pero, son agradables.
Pude verlo. Kendall me dio un codazo en las costillas y lo señalo. El se dio cuenta y sonrió.

Levaba unas gafas negras de pasta, sabía que no eran necesarias. Pero se veía más caliente así.

La sonrisa que le devolví no era para nada agradable. Era mi sonrisa nerviosa. Si lo veían aquí, pensarían lo peor.

Y lo peor, en este caso, es volver a vincularnos como novios o amigos con beneficios o algo parecido.

Pero, lo que más me intriga es, ¿el que hace aquí? Porque si, todos tienen derecho de viajar. Pero justo el. Justo mi avión. Justo la misma aerolínea. El mismo destino.

No era posible tanta coincidencia.

***

-¿Y si tu vienes mañana, cuando se vendrá Kourtney?- Mamá, a pesar de estar dos sillas más atrás, seguía mostrando su mal humor por el teléfono.

A mi lado estaba Kylie, que se había dormido hace unos minutos, detrás Kendall con Khloe, más atrás Kris con Bruce.
Rob estaba en la otra columna, a mi lado derecho.

Nathan estaba justo delante de el.

No lo había parado de mirar, esperando que el volteara y yo entrecerrara mis ojos hacia el.
Pero estaba muy concentrado en su móvil. Puedo asegurar que por segundos la comisura de sus labios se alzaba, en un intento de sonrisa.

Sentí un golpe en mi silla y gire mi cabeza, inclinándome un poco.

-¡Khloe!- gruñí, Kendall y ella sonreían. Algo se traían entre ma...

-Mira.- Khloe me señalo el pasillo que separaba las dos columnas de asientos. Mire hacia la alfombra de color blanco, con el ceño fruncido. Era consiente de las miradas en nosotras.-Se te cae la baba.- mire, con mis mejillas ardiendo, hacia atrás de nuevo.

Las dos se reían a carcajadas y yo rodé los ojos, sentando me bien en mi asiento. Tome mi iPhone y entré a Instagram.

-Oh vamos, ¿te molestarás por eso, Kie?- susurro Khloe, metiendo su cabeza entre el cabello de Kylie. Mordí mis labios para ocultar una sonrisa.-¿No me hablarás?

No me molesta tanto lo que dijo. Me molesta quien lo escucho. Porque además de los metidos que estaban a nuestro al rededor, El, escucho. La sonrisa en su rostro me lo demuestra.

Además, no puedo pasar por alto que estaba siendo demasiado evidente al mirarlo de esa de forma. ¡Pero era a propósito!

-Si te hablo, Kho. Deja de molestar.- susurre. Ella dejo otro golpe con su rodilla en mi asiento.

-Tenemos que hablar luego, enamorada.

***

-¿Dónde irás?- me pregunto Kylie, talló sus ojos y yo deje mi móvil en su pierna.

-Al baño. Quería esperar pero siento que explotare.

-Vale.- desbloqueo mi celular y entro a Instagram, sacando una selfie.

Nota mental: Cambiar el código de mi móvil. Y asegurarme que Kylie no lo vea.

Camine entre los asientos hacia atrás, donde creo que están los baños. Kris me frunció el ceño y yo articule un "baño" con mis labios. Ella asintió.

En la parte trasera del avión, se encontraba un pequeño cuarto, donde habían dos puertas en blanco: los baños.

Entré al de mujeres y cerré la puerta. Mire el retrete y fruncí los labios.
Esto de ir al baño en los aviones no me gusta.

Cada vez que estaba en estos baños, el movimiento se hacia más notorio y caía en cuenta que estábamos en un avión. Volando a muchos, muchos, muchísimos metros de tierra.

Suspire, hice mis necesidades y me mire en el espejo, arregle un poco mi cabello y decidí salir.

Me dieron arcadas y me apoye en una pequeña mesa blanca. Sentí un brazo en mi espalda y gire mi cabeza, encontrándome con los estupendos ojos azules de Nathan.

-Hey, ¿estas bien?- El frunció las cejas y yo asentí, no dándole importancia a mis arcadas. Sabía que eran por el movimiento.-Vale. ¿Que haces aquí?

-Los baños, genio.- señale con mi cabeza lo obvio.-¿Tu qué haces aquí?- El rasco la parte trasera de su cuello, dándome una gran vista de como la remera se pegaba a su torso y sus brazos.

Los ojos, Kie. Míralo a los ojos.

-Quería hablar contigo. Estaba demasiado aburrido sólo sintiendo tu mirada.

-Gran nombre para una canción, ¿no? "Sintiendo tu mirada"- musite.

-no cambies de tema, Bieber.

-Baja de la nube, Led. Sólo tengo curiosidad de saber que rayos haces aquí.

-Vacaciones.

-No- dije irónica.-¿Tu solo?- me cruce de brazos, y no pude evitar sonreír en mi mente como el gato de Alicia en el país de las maravillas, cuando su mirada cayo en mi mínimo escote.

-Si te cuento, ¿dejarás de mirarme como si me acosaras?

No.

-Si, Nathan. Te digo que sólo tengo curiosidad.

-Tengo la oportunidad todos los años de viajar a cualquier país por cuenta de mi padre. Junto con mi hermana, claro.

-¿Y justo escogiste Las Islas Canarias?

-Puede que tu tengas algo de culpa en eso.

-¿Yo?- me señale, y el asintió, riendo.-¿Porqué?

-Sabes que mi hermana es como tu fan #1 y poner a donde irías en Twitter de vacaciones no es lo más inteligente.

-¿No podían sólo decirle no?

-Oh, Kirstie Jenner, si conocieras de verdad a mi hermana no preguntarías eso.- el suspiro, y segundos después la sonrisa baja-bragas regreso.-Además, algo me dice que no estas totalmente enojada con el hecho de que yo este aquí.

-Estas imaginando cosas. Estoy cien por ciento segura que no quería que estuvieras aquí.

-¿Porqué?

El bajó un poco la cabeza, mirándome entre sus largas pestañas. Yo lo único que pude haré en ese momento, fue suspirar. Y no poder controlar mi gran bocota.

-¿Has pensado en ser modelo?

-¿Qué?

-Vamos.- Mi rostro tomo color y moví mis brazos, explicándome.-No es la primera vez que te dicen eso, no te sorprendas.

-En realidad, si.

-¿Si? Oh mierda. Entonces olvídalo.

-No has respondido mi pregunta, K. Pero te la dejare pasar. Creo que tu rostro explotara si sigue cambiando así de color.

Toqué mis mejillas y abrí mi boca, sorprendida.-Yo no estoy...

-Si, sí lo estas. Pareces un tomate.- el sonrió por última vez, antes de darse la vuelta y caminar fuera del cuarto, dejándome sola.

Apoye mis manos en la mesa y suspire, tratando de controlar los colores de mi rostro.

Camine, sentándome en mi asiento, sintiendo la mirada de mi familia en mi espalda. Porque estoy segura que vieron a Nathan salir del mismo lugar que yo. Todos vieron a Nathan salir del mismo lugar que yo.

Oh, Led, te has metido en la boca del lobo.

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