Cap 44: Muerte anunciada

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- Derek, ¿qué es lo que haces aquí?-susurró-.

-Soy quien vigila tus sueños ¿recuerdas? Incluso...

-No, en serio, necesito saber de que va esto ¿a qué estás jugando?-preguntó Amber incorporandose y haciendo que él se apartase un poco-¿que es lo que está pasando?

-Nada

-Derek-su voz había sonado rígida esta vez-.

-No es nada

-Por supuesto que no-suspiró rodando los ojos de forma molesta- Scott ha estado comportandose como si no me conociera durante las últimas semanas, tú has decidido desaparecer sin razón aparente pero sin embargo sigues vigilando cada uno de mis movimientos, ayer mismo te vi matar a un hombre delante de mi y ahora... has decidido volver de la misma forma en que te marchaste ¿y dices que no pasa nada?

Puedes intentar mentir todo lo que quieras pero ya estoy empezando a cansarme de que siempre me ocultes la verdad

-Lo hago para que estés a salvo, ¿entiendes?-replicó poniendose en pie a su lado- No tienes ni idea de la situación en la que te encuentras, todo lo que estamos haciendo Scott y yo es asegurar que respires un día más.

-Los cazadores me querían muerta desde el principio, nada ha cambiado.

-No me estoy refiriendo a eso.

-Entonces ¿cual es el problema? ¿Qué es lo que tan preocupados os tiene a ti y a Scott para mantenerme practicamente a metros de distancia de vosotros o si quiera levantar la mirada hacia mi?-soltó levantandose de golpe y dando un exagerado paso hacia él-.

Él suspiró.

-¿Recuerdas el sitio al que te llevé cuando te escapaste del hospital aquella noche? ¿Justo después de que los cazadores intentaran matarte?

-¿El claro donde sacrificaron a tu manada? ¿A que viene eso ahora?-se cruzó de brazos- No entiendo que es lo que quieres decir

-Oye, hagamos un trato, cuentame que es lo que recuerdas de aquel lugar y yo te contaré todo lo demás, todo lo que hemos estado haciendo, lo que hemos averiguado durante este tiempo, la razon por la que nos hemos alejado, te lo contaré todo. TODO.

Sólo necesito saber que es lo que recuerdas.

-Recuerdo haber tenido esta conversación contigo antes, Derek. Y sé que nunca acaba bien. Nunca puedo sacar nada en claro, nunca me dices lo que quiero saber y luego, siempre te marchas.

-Esta vez no voy a hacerlo. Vamos, confía en mí, solo cuéntame lo que recuerdes y yo te contaré todo lo que quieras saber.

Ella se quedó en silencio e intentó rememorar lo que ocurrió pero no podía acordarse de nada, era como si tuviese una laguna en su cabeza.

-Recuerdo... el momento en que me asustaste, llegar a ese lugar y luego, recuerdo encontrarme contigo en el suelo, nada más. Solo estuvimos allí un par de minutos, no hay mucho más que recordar

-Lo suponía-suspiró con cierta preocupacion en su cara-Amber, lo creas o no estuvimos allí más de una hora y en ese tiempo intentaste matarme. Más de una vez.

-¿¡Cómo!? ¿Por qué no me lo contaste?

-Porque lo inquitante es lo que decías, no lo que estabas haciendo.

-¿Y qué es lo que dije? Suéltalo de una vez ¿¡Qué es lo que pude haber dicho para hacer que todo cambie de esta forma!?

-No puedo decirtelo ¿vale?-Amber gruñó apartandose de él-Si lo hago es posible que todo vuelva a cambiar, eso sería como tirar por la borda todo lo que hemos conseguido y no voy a dejar que tú lo estropees todo, esta vez no.

-Entonces, ¿qué haces aqui? ¿¡por qué has venido en plena noche a verme!?

Ethan irrumpió en la habitación abriendo la puerta de golpe.

- ¡No sé lo que está pasando con vosotros dos pero quiero que esto se acabe, y quiero que se acabe ahora!

Os recuerdo que en esta casa vive el jefe de la policía y estoy seguro de que no le hará ninguna gracia encontrarse con Derek "el asesino en serie" en la misma habitación que su hijo y su invitada, así que, se acabó.
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No supo ni como consiguió mantener la endereza al decirle eso, pero en aquel momento se sentía orgulloso de él mismo al plantarle cara por primera vez.

-Ya me iba de todos modos-contestó dirigiendose hacia la ventana-.

-Bien, será mucho mejor para todos que lo hagas, déjame en paz de una vez-replicó cruzándose de brazos y dándole la espalda-.

-Amber-dijo subiendo al marco de la ventana y girandose hacia ella, pero le no contestó- con respecto a ese nuevo amigo tuyo... yo tendría cuidado, nunca se sabe con que intenciones se ha acercado a ti

-Descuida, estoy bastante segura de que tiene mejores intenciones que tú-susurró para sí misma sin siquiera girarse a mirarle a los ojos- ¡Vete de una vez! MÁRCHATE YA

Derek se volvió hacia la calle y después de un segundo saltó dejando solos a Ethan y Amber, ella no se movía, se había quedado de brazos cruzados de espaldas, incapaz de articular palabra, pero era obvio que aquella conversación le había sentado como una patada en el estómago.

-Amber, oye ¿estás bien?

Ella asintió un par de veces de forma nerviosa pero no se giró para evitar que viese las lágrimas que resbalaba por sus mejillas, no quería que le viese llorar, quería que todo volviese a ser como antes, volver a tener una vida normal, amigos normales y corrientes, que nadie los persiguiera o quisiese matarlos... quería volver a recuperar su antigua vida

Todo aquello empezaba a ser demasiado para ella, le hacía sentirse como si estuviera atrapada dentro de una jaula desde hacía mucho tiempo, como si algo le estuviese oprimiendo el pecho impidiéndole respirar, estaba ahogándose en aquel mundo lleno de problemas sobrenaturales.

-Nunca debímos empezar a investigar los asesinatos...-murmuró Ethan dirigiéndose hacia la puerta- fue un gran error

-Nosotros solo pretendiamos que dejase de morir gente inocente, Ethan. Nuestro único y gran error fue tropezarnos con Derek en el camino.

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El lugar estaba desolado, olía a polvo, a humedad, hacía frío, unos ojos de color rojo brillante observaban desde lo lejos, totalmente sumergidos en la oscuridad a la mujer que había entrado en el edificio, comenzó a moverse rápidamente, gruñó en silencio haciendo que ella se girase de forma brusca a su alrededor, pero no podía saber donde estaba su merodeador.

-El plan se está desmoronando, pronto lo sabrán todo si es que no lo saben ya: los asesinatos, quién eres. El final del camino está más cerca de lo que creíamos.

-Y aún queda un nombre por tachar de la lista... he pasado tanto tiempo esperando este momento que creo que no me importaría mucho volver a empezar -dijo colocándose detrás de ella, pasando sus garras alrededor de su cuello y empezando a apretar- ¿Recuerdas lo mucho que te divertías, Denise? Esa sensación de satisfacción al librarte de un amigo, el sonido de su corazón bombeando puro terror através de sus venas. ¿Recuerdas lo qué se siente?

-Nuestra colaboración no tiene porque terminar todavía-susurró empezando a respirar de forma entrecortada- aún puedo ayudarte

-¿Cómo? Solo queda un movimiento para terminar la partida, solo un nombre más que tachar de la lista.

-¿Qué me dices de tu Beta, Derek y la chica?

-Si Scott no mata conmigo en la próxima luna llena morirá como cualquiera que se interponga en mi camino-gruñó apretando con fuerza hasta hacer que de su cuello brotaran finos hilillos de sangre-Derek por el contario es mi sobrino y la familia debe mantenerse unida.

La verdad es que la chica es la única pieza que no encaja en mis planes.

-Entonces, déjame eliminarla por ti.

-¿A cambio de qué, Denise? Todo el mundo quiere algo a cambio.

-Sobrevivir, eso es de lo que siempre se ha tratado. Sobrevivir a pesar de todo.

La noche de la bestia (Libro 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora