*Narra Sam*
No podía creer lo que mi padre contaba. Jhon había llevado al chico traidor con unos guardias y se colocó al lado de Mei, quien estaba junto a mi padre con la cabeza agachada, al igual que Tomas y Diego, durante todo el relato. Cada palabra que decía mi padre hacia que una gran furia dirigida a la manada Maruna creciera. Me enfermaba lo crueles que eran solo por la busca de poder. Además de todo eso, no podía imaginarme el dolor que sufrieron Mei, Jhon, Tomas y Diego y que siguen sufriendo en silencio hasta ahora. El que su clan se allá ido, si me hubiese pasado lo mismo, no sé cómo habría reaccionado, tal vez me hubiera vuelto loco.
Cuando mi padre termino de contar lo que paso, de inmediato Sasha y Alice, quienes estaban con lágrimas en los ojos, fueron a abrazar a Diego y a Tomas. Dirigí mi vista a Mei y Jhon, quienes aún tenían la cabeza agachada, no podía imaginar el dolor que sentían. Con lentitud me encamine hacia ella, quería darle confort, quería que se sintiera segura, protegida, pero no sabía exactamente como.
- M... Mei, lo siento - dije, sin saber bien lo que debía hacer
- Po... por qué? - dijo levantando la cabeza para verme a la cara, mostrando una sonrisa muy forzada – T... tú n...no tienes la culpa - continuo con un tono de voz roto
No pude dejarla seguir forzándose, a aparentar que todo estaba bien. No lo dude más y la abrase con fuerza, pero con dulzura y cariño, casi igual al que le día cuando la vi por primera vez en el risco. No, este estaba cargado con mucho más sentimiento. Y como en aquella vez ella se acurrucó y rompió en llanto. En ese momento, pude ver a Jhon que avía levantado la cabeza y nos estaba mirando con una cálida sonrisa y lágrimas que caían de sus ojos. En toda la habitación solo se escuchaban pequeños sollozos, hasta que un celular sonó.
- Ah...lo siento es el mío - avisó Jhon limpiándose las lágrimas y sacando su celular del bolsillo
*****contesta*****
- Diga... Ah, paso algo?... entonces, que sucede?... Ah, entiendo. Voy para allá... Quieres hablar con ella?... De acuerdo, nos vemos mañana.
******cuelga******
- Sucedió algo? - pregunto Mei separándose un poco de mí y limpiándose las lágrimas
- Nada de qué preocuparse - le respondió Jhon - Ahha, será mejor regresar - dijo suspirando
- Tenemos que volver? - soltó Mei decepcionada
- No se tienen que ir! - afirme de inmediato, no quería que Mei vuelva a ese lugar en donde la maltratan - Pueden quedarse aquí, verdad papá? - le pregunte deprisa a mi padre
- Por supuesto - afirmo de inmediato mi padre
- Estarán seguros aquí!!! - dijo Tomas preocupado
- Lo ven, no tienen que volver a esa manada - solté un poco ansioso
- Calma - me dijo Jhon sacudiendo mi cabello como si fuera un niño "no me gusta que me traten como niño" - No me entendieron, Mei no tiene que volver, solo yo
- Que?! - gritó Mei un poco molesta - No te dejare solo con esos locos!!
- No está a discusión – la regaño con una sonrisa despreocupada - Sam tiene razón, no es necesario que vuelvas, confió en el Sr. Olsone y sé que estarás segura aquí, y los de la manada no les preocupara tu ausencia - afirmó para tranquilizarla "me alegra que Mei se quede con nosotros, pero..." - En cambio yo, al ser el futuro beta, todos están al tanto de lo que hago, y ahora que Michael está detrás de mí, es mejor no levantar sospechas si desaparezco - se quejó como niño pequeño, lo que me pareció gracioso
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Una rosa entre margaritas
FantasíaLos secretos pueden llegar a ser peligrosos, no solo para ti sino para otros. El guardarlos puede terminar provocando desastres y tragedias. Eso es algo que aprendí desde pequeña. Aun así, mírenme, guardando un secreto con recelo. Viviendo en un mun...