Narra Kimi
Tenía la boca seca y los ojos desbordando de lágrimas, que intentaba contener. Era la primera vez que le contaba a alguien de mis penas, de un pasado que ya se veía tan lejano, pero que aun así era doloroso. No saben lo mucho que agradecía a Mei por escuchar, y lo agradecida que sea ella la primera en escucharme. Nunca habría creído que la niña pequeña que una vez le tuve lastima, sería mi mayor confidente.
- La razón por la que la Srita. Linda volvió no fue por un chantaje, y el que no hubo comunicación de parte de ella y su padre también era mentira. Desde el principio ella enviaba cartas al viejo contándole de lo bien que estaba, pero eso también era falso! Ella era torturada tanto física como psicológicamente para ser una adecuada Luna de esta manada! Esta manada era dirigida por un monstro que no tenía piedad ni con su propio hermano o su mate! Siempre imponiéndose a una mujer tan dulce como lo es la Srita. Linda! Ella misma me contó todo suplicándome con lágrimas en los ojos que cuidara a este estúpido!! Pero no aguante!! Venir a este lugar fue un tormento para mí! viví a carne propia lo que sufrió la mujer que decidió cuidarme! Y este egoísta nunca se enteró de nada! Riendo y jugando como si nada al lado de su primo! No sabes el alivio que sentí al enterarme del fallecimiento de su padre hace 8 años! Mientras Cristian lloraba, yo no podía evitar esbozar una sonrisa al saber que ese maldito estaba siendo cremado en esos momentos! - grité por primera vez lo que me había tragado por tanto tiempo, sintiendo como si un gran peso en mis hombros desapareciera - El día del funeral yo y Cristian asistimos, fue cuando ustedes aparecieron. Me sorprendió el saber que el Sr. Max había adoptado a un par de niños, aun después de perder también a su esposa. Yo pensé que sería un nuevo comienzo para Cris, que todo cambiaría para bien, que estaríamos bien, pero no pude estar más equivocada. El continúo empeorando su actitud, aun venia de visita aquí solo con la idea de poder escapar de los del consejo, mientras yo solo lo acompañaba sin decirle una sola palabra. Fue entonces que decidí usarte de apoyo Mei - Solté con pesar - En cada visita te veía y no podía evitar reflejarme en ti. Siempre les mostrabas a los que te trataban mal una mirada vacía y de sumisión, pero yo pude notar esos gestos de desafío que los otros no veían o si quiera se molestaban en tratar de ver. Al igual que yo, simplemente te mantenías al margen de todo y hacías lo que tenías que hacer. Fue cuando uno de esos días te vi llorando, estabas en medio del bosque llorando en total silencio, lo recuerdas?
- Si, esa fue la primera vez que me hablaste - me respondió Mei feliz - Luego de ese día empezaste a jugar conmigo cada vez que venias y me ensañaste un sin fin de travesuras
- Si, la verdad quería ser al menos la ayuda de alguien, más bien necesitaba ser tu ayuda. Era como si me estuviera ayudando a mí misma. Sentía que si tú llegabas a quebrarte algún día, yo terminaría igual, aumentando más esa necesidad cuando me contaste lo que te ocurrió a ti y a tu clan. Tanto fue mi egoísmo que tan solo enterarme que Cristian era mi mate, hui dejándote atrás! - solté con vergüenza en cada palabra aun sin atreverme de alzar la mirada, recibiendo silencio en respuesta - Sé que fui egoísta! Incluso ahora soy muy egoísta! Mirame! Aun sabiendo lo que hizo, no puedo separarme de él! Soy la única razón por la que estés aquí curando a la última persona que debes querer ver! - terminé de decir todo lo que siempre he querido decir, esperando ser odiada
- La verdad me sorprende todo lo que me has dicho - oí a Mei con una voz neutral - Siempre te veía como alguien fuerte, sin preocupaciones, alguien muy alegre e hiperactiva. Pero ahora que se la verdad.... Estoy feliz - soltó con una voz tan amable y comprensiva que, por el asombro, me obligo a alzar mi vista para verla directamente con una sonrisa tan gentil - Siempre creí que tú eras mi apoyo incondicional, fue esa la razón por la que te ayudé a irte en primer lugar. Quería retribuirte, pero ahora que sé que también me veías como tu apoyo, me hace feliz. Ambas fuimos el soporte de la otra - sentenció con una gran sonrisa provocándome aún más ganas de llorar

ESTÁS LEYENDO
Una rosa entre margaritas
FantasiaLos secretos pueden llegar a ser peligrosos, no solo para ti sino para otros. El guardarlos puede terminar provocando desastres y tragedias. Eso es algo que aprendí desde pequeña. Aun así, mírenme, guardando un secreto con recelo. Viviendo en un mun...