Capitulo 22

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*Narra Mei*

Estaba dolida, no, más bien estaba furiosa. Después de ver que Michael quería golpear a Sofí no dude ni un segundo en ponerme en su lugar. No quería que nadie sufriera, ni Sofí, ni Jhon, ni Sam, ni nadie. No podía resistir la idea de que alguno de ellos salga herido por mi culpa y tampoco quería buscar venganza, quería mantener la promesa que hice.

Cuando el acertó el golpe a mi mejilla solo pude mirarlo fijamente y preguntarle si ya estaba satisfecho, si ya estaba satisfecho del daño que causaba, de las heridas que abría, del dolor que me provocaba. Me alegró un poco el que Sam se estuviera acercando, pero no quería que se preocupara. Ya tubo suficiente con que allá desaparecido por tres días y que su padre por poco allá muerto, lo menos que quería en ese momento era angustiarlo.

*Narra Sofí*

Estaba estupefacta, no podía creer lo que presencie. Solo con ver a ese chico tratando de golpearme y luego que Mei lo recibiera para protegerme, me molestaba y me sorprendía. Me molestaba porque ese chico me dijo débil "tal vez sea cierto que mi fuerza no sea mucha, pero lo compensa mi agilidad y velocidad. Gracias a mi arduo entrenamiento puedo defenderme y contraatacar en una batalla", y me sorprendió el gran autocontrol de Mei, yo hubiese atacado a ese chico a la primera que abrió su bocota, pero pude notar como Mei reprimía esos impulsos.

- MEIIII! - escuchamos otra vez a Sam, quien venía detrás de nosotras

- SAAAM! – lo llamé, volteándome hacia él. Pude ver que Alice, Sasha, Tomas y Diego venían tras él - Sam! Mei está... - no pude terminar la oración porque Mei me tomó de la mano y me la apretó y pude notar como esta temblaba

- Chicas al fin las encuentro - dijo Sam, cansado, mientras que Mei seguía de espaldas a ellos - Bueno al verlas juntas creo que debo suponer que todo está bien - soltó alegre

- La verdad.....

- Si, ahora somos amigas - dijo Mei volteándose sonriente con los brazos atrás. Yo me quedé boquiabierta al ver que no tenía ni un solo rasguño en la cara, ya que el golpe que había recibido hace un rato le debió haber dejado al menos una marca

- Bueno, en ese caso volvamos a la cafetería, el almuerzo terminara pronto así que hay que tratar de sentarnos en una mesa y charlar aunque sea un momento todos juntos - dijo animado el pelirrojo, a lo que yo no pude responder, estaba petrificada

- La verdad es que en este momento Sofí y yo nos dirigíamos al baño - avisó Mei aún sonriente

- Y no puede esperar?! - dijo Sam quejándose como niño chiquito

- Lo siento – se excusó sonriente acercándosele para darle un beso en la mejilla - Es una emergencia, nos veremos en la salida - dijo con la misma sonrisa y tomándome del brazo para ir corriendo a el baño más cercano

- Emergencia? - pude escuchar a Alice decir confusa

- ESPEREN CHICAS NOSOTRAS TAMBIEN VAMOS! - avisó Sasha yendo tras nosotras junto con Alice muy animada

Mei no dijo ni una sola palabra mientras nos dirigíamos al baño, pero aun notaba que estaba temblando, cuando llegamos al baño no esperé ni un solo segundo y decidí confrontarla.

- Por qué no le dijiste nada a Sam?! - le pregunté molesta

- Decirle que? - preguntó Alice confundida entrando detrás de nosotras junto a Sasha

- Acaso pasó algo...MEI!! - gritó Sasha asustada, y no era para menos, ya que Mei callo de rodillas al piso mientras se abrazaba a si misma con una expresión de dolor en el rostro

Una rosa entre margaritasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora