Capítulo 36
Sin saber exactamente de qué se trataba ello, abrí la caja en su totalidad comprobando que el hermoso vestido estaba ahí, tal como lo había dejado hace un par de días en su local. Lo saqué de la caja, estirándolo a todo lo largo que daba, enamorándome por segunda vez de su simplicidad y belleza. Me convencí de que el vestido no era mío, Sin embargo, me prometí no usarlo si no en una ocasión verdaderamente especial. Pobre hombre se metería en graves problemas cuando su jefe se enterara de que le dio el vestido a la primera chica que vio; aún pienso que se habrá equivocado.
Pero la idea no duró mucho más tiempo, cuando miré una vez más la caja comprobé que había un papel, no estaba doblado ni siquiera en un sobre, era simple y para ser la carta que era, incluso algo grosero. Pero su contenido me dolió a fondo; no decía el nombre del remitente pero de sobra sabía yo de quién venía el regalo.
"____________,
Haberte visto aquí me conmociona y molesta en exceso, te pido de favor que no regreses más; según escuché me buscabas porque no sabías si me encontraba vivo o muerto, como ya viste estoy vivo y estoy muy bien, reitero que no quiero que vuelvas a buscarme. Hablo en serio, no me interesa nuestro insignificante amor infantil. He madurado bastante en poco tiempo, y a la final no te debo ninguna clase de explicación Vive bien tu vida, trata de seguir mi ejemplo.
Con respecto al vestido, alguno de mis empleados lo encontró y lo compró para Gemma, pero no le quedó bien, así que te lo envío sin ninguna intención de crear esperanzas o expectativas en ti, tan solo es algo que sobra."
Eso era todo, no decía más; la arrogancia con la que escribió la nota, las palabras que eligió y la rudeza de sus expresiones me hicieron ver lo mucho que había cambiado. Hice tanto y todo por él, lo amaba con todas mis fuerzas, lo busqué hasta bajo las piedras y todo para recibir un vestido que sobró y una nota que reflejaba que si alguna vez pensé que Harry cambió en algo estaba equivocada.
Me sentía terrible, no solo eso, me sentía nada; fui usada, engañada, y decepcionada; todo eso en tan poco tiempo que no pude entender la magnitud de mi estupidez, ¿cómo permití que me enamorara yo sola de alguien? Lo que es peor, ¿cómo, creyendo en ese amor, le di todo? Y pensaba claramente que así era, se lo di todo, física como emocionalmente y nada fue suficiente para él; me dolía en exceso, necesitaba de alguien y estaba claro que ese alguien era mi mejor amigo, sin pensarlo, como la mayoría de cosas que hago, llamé a Zayn aún con lágrimas pasando por mis mejillas, no contestó y me mandó directamente a la operadora, supuse que estaría con Louis, o quizá Liam ya que se habían vuelto muy cercanos, pero ninguno contestaba. Pensando que en algo se habrían metido esos tres juntos llamé a Alison, esperando que ella sí me contestara y así fue. Le comenté ligeramente la situación y ella prometió llegar en una hora, tenía tiempo de sobra así que me levanté de mi cama y vi la hora en el reloj, eran las nueve y cuarenta y cinco de la noche, decidí salir un momento y así lo hice. Caminaba a paso lento y completamente perdida hasta que vi una pequeña cafetería y entré en ella, un mesero se acercó preguntándome qué deseaba y pedí un café simple, aún pensando en todo me lo tomé y pedí la cuenta, me la trajo poco después y le agradecí, bajé la mirada para ver que debía pagar tres libras y debajo de la cuenta había un número de teléfono; no tenía energía para ello así que dejé el dinero y el número por igual sobre la mesa y me fui de allí. Llegué a mi casa y Ali estaba sentada en la sala, nos abrazamos y subimos lentamente a mi habitación; cuando llegué las chicas estaban ahí sonriéndome y con diferentes cosas en sus manos.
-¡Hey! Hoy es noche de chicas así que ponte tu pijama, y alístate para la diversión.- dijo Antonela, lanzándome a su vez mi pijama , cuando me fijé que todas ya estaban puestas uno, me cambié rápido y me regresé a ellas, me recibieron con almohadazos y golpes, comimos muchos dulces y nos pintamos las uñas, también hicimos mascarillas y nos las pusimos. Entendí una vez más que por el rato que estaba pasando con ellas había olvidado todos mis problemas, y es que esas chicas eran demasiado especiales. Juntas lograríamos cualquier cosa, sin importar qué; de eso estaba segura. Eran un poco más de las dos de la mañana, y desperté porque mi teléfono estaba sonando perdido en algún lugar de mi desordenada habitación, medio dormida lo busqué a tientas y cuando por fin di con él lo tomé y contesté la llamada que era del teléfono de Niall, me alegré mucho de hablar con él así que le respondí eufórica.
-¡Niall, amigo! ¡Qué hermoso escucharte, no hemos hablado en tanto tiempo!-
-________, discúlpame por haberme desaparecido, pero tenía muchas cosas que hacer, ¿cómo estás?
-Bien ahora que te escucho, pero ¿por qué diablos me llamas a las dos de la mañana, Niall?
-Acabo de enterarme de que viajaste, ¿a dónde fuiste, amiga? Por mi parte, acabo de llegar desde Irlanda, por eso te llamo ahorita, quería ver si es que nos encontrábamos mañana,- rió un poco- más bien dicho, hoy.-
-Estuve en Grecia, me parece perfecto ven mañana a las cuatro de la tarde a mi casa, te estaré esperando.-
-¿Grecia? ¿Por qué allá?- dijo curioso como era.
-Te cuento todo mañana, ¿bien? Nos vemos pronto.- dije a modo de despedida. Escuché una afirmación de su parte y colgó la llamada antes.
Pensaba en que Niall se había perdido mucho tiempo, y también en que lo había extrañado mucho, sin embargo, el tono en el que me preguntó por qué había ido a Grecia me dejó pensando, a la final, había variado un poco de su tono normal.
QQFS
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They Don't Know About Us.
FanfictionNormalmente, nuestras vidas se ven perfectas; tenemos dinero, amigos, viajes, todo lo que queremos en sí. Es fácil para nosotros, los adinerados. Todo es tan fácil. Pero hay cosas que por más buena vida que lleves, no puedes solucionar con dinero...