They Don't Know About Us.

Capítulo 15. Maratón 3/3

La mañana llego y era sábado, me levante porque el timbre había sonado, bajé hasta la puerta y la abrí no podía creer lo que mis ojos veían, era mi mamá,

-Mamá- fue lo único que atine a decir.

-Hija mía- respondió ella e inmediatamente entro en la casa.

Mis palabras no salían, y todo lo que quería decir se reflejaba en mi rostro, las lágrimas empezaron a caer y yo, quedando como una tonta sin poder pararlas, se me acerco y estiro los brazos pero enseguida, como acto reflejo me quité, mi madre me miro desilusionada y yo continuaba llorando, pensaba en que tenía a una criminal en fuga dentro de mi casa, para ser peor esa criminal era mi madre ella me dio la vida y ahora era perseguida por la policía.

-Sé que te debo muchas explicaciones, hija- me dijo mirándome.

Yo por mi parte continuaba en estado de shock, no podía hablar no podía pensar, no podía detener las lágrimas. Mi madre se sentó y lo primero que dijo fue

-No tengo más de un día para estar aquí, sé que debo explicarte muchas cosas, sé que te lo debo, sé que te sientes abandonada, lo se hija mía, lo sé, pero necesito que me entiendas, tu padre me dijo que sería un buen negocio, que nunca te faltaría nada, y nunca nada te falto hija, nada- dijo mi madre al borde de las lágrimas, entonces se me fue todo y llegó a mí la ira.

-Abandono!- grité sin poder contenerme –Dejar a su hija de 16 años sola, en una casa, contra el mundo sola, abandono, que poco después de que se hayan largado me llame a la policía diciendo que son un par de asquerosos criminales desde antes de que yo naciera, y para colmo vienes a mi casa como si nada, madre esto es peor que cualquier cosa, dime es el que yo conocí tu verdadero nombre?-

-No me hables así, después de todo si no fuera por mí no estarías aquí- dijo ya llorando.

-Y crees que me gusta estar aquí?, Crees que soy feliz? Mamá mi padre está en la cárcel, tú en fuga, tengo muchos problemas a parte y quieres que sea feliz?, Es enserio?- dije, estaba demasiado molesta y para el momento mi madre ya lloraba a mares.

-Basta, ________, basta te lo pido, tengo suficiente con mi vida, no me des más problemas- imploró.

-Bien a que viniste?- dije cortante.

-A explicarte todo, a decirte la verdad y a despedirme de tu vida.- respondió.

-Bien, entonces empieza-

-Bueno hace más o menos 17 años, tu padre me dijo que tenía el trabajo perfecto, que iba a ayudarnos mucho, y que tendríamos todo el dinero que deseáramos, yo por mi parte y pensando en que estaba embarazada de ti, que debería mantenerte y que éramos pobres, decidí hacerlo- relató mi madre.

-Aun nadie me ha dicho cual es el maldito crimen- dije más molesta que antes. Sentí un fuerte golpe en mi mejilla y mi cabeza se viró.

-Te he dicho que a pesar de todo soy tu madre, respétame-  dijo mi madre mirándose las manos como con temor, mierda, me viene a decir que es una criminal y encima me golpea, esto ya ha llegado muy lejos.

-Me iré a bañar, esta tarde saldré con los chicos y las chicas, al menos ellos no son criminales y me tratan bien, ven cuando me vayas a decir cuál es exactamente el crimen por el que la policía te busca y por el que mi padre estará el resto de la vida en la cárcel.- diciendo esto me di la vuelta y empecé a subir. La oí suspirar pero no me intereso en lo absoluto. Poco después la puerta de calle se abrió y se volvió a cerrar, se había ido, dejé ir a la mujer que me dio a luz…

Me regresé a mi habitación y entré al cuarto de baño, prendí la ducha que era lo que en ese momento necesitaba, una relajante ducha, vi que la temperatura era ideal y entré, después de cómo media hora volví a salir, con una toalla enrollada a mi cuerpo y otra a mi cabello, miré entre mis cosas para ver que me ponía, me vestí, bajé a la cocina y bebí un vaso de jugo, llamé a Zayn para saber cómo íbamos a hacer para la salida y esperé a que el me contestara.

-Hola hermosa- la voz de mi mejor amigo sonó a través del parlante.

-Zayn, como estas? Nada mas quería saber cómo íbamos a hacer para la salida de hoy- dije.

-Bueno, pasaré por ti en una media hora, te parece?- dijo él.

-Si claro-

-Entonces espérame, ya voy para allá- dijo

-Adiós Zayn-

-Chao ______- y colgué, para después de esto me encontraba leyendo una hermosa novela, se llamaba “La mujer y sus gatos” me divirtió el nombre pero la novela era excelente, sin darme ni cuenta ya había pasado la media hora y mi timbre estaba sonando. Bajé feliz pero al abrir la puerta no me encontré con quien yo quería.

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Y bueno, los capítulos se van haciendo más largos, no? En fin, se terminó el maratón, gracias por leer hasta la próxima!

xx