¿Por obra del destino? (Julian Jordan, Martin Garrix)

Capítulo 23

- ¿Creo que interrumpo? - dijo el otro chico asomando solo la cabeza 

  Martijn salió rápidamente de encima mío.

- No..., no bro, no te preocupes - respondió Martijn.

- Emmm... necesito pantalones - ese chico se me hacía conocido, mmm... claro es... ¡JULIAN! ¡El mejor amigo de Martijn! ¡Claro! ¿Cómo no lo pensé antes?

- Pasa...

  Julian entró, estaba solo en calzoncillos, no pude evitar ver el tamaño de su... ¡ROSA! ¡Mira hacia otro lado, mira hacia otro lado!, sentí que alguien me tapaba los ojos, era Martijn. ¿Qué? ¿Tan evidente soy?

- ¡MARTIJN! - grité riendome.

- Esta bien, esta bien, ¡Te suelto! - gritó - pero no mires, me pongo celoso - susurró en mi oído, ¿Qué? ¿Celoso?

- Esta bien no miraré - estaba sonrojada, mire a Julian, estaba rojo y se disponía a buscar su ropa. Se puso unos pantalones negros, polo azul claro, zapatillas negras y casaca negra, se vestía bastante bien, salió de la habitación dejándome a solas con Martijn quien se encontraba de pie a un costado de la cama.

- ¿Quieres desayunar pequeña? 

- No gracias, iré a buscar el hotel donde debo estar hospedada.

- Pequeña..., no te dejaré sola, menos con esos moretones - ¡Es cierto me había olvidado de ellos! - primero tomaremos desayuno y de ahí iremos ¡LOS DOS! a buscar el hotel.

- Gracias - sonreí, me puse de pie y... Ay no, no, no puede ser...

- Auch... ¡Qué torpe que soy! - ¿Cuantas veces voy cayéndome? súmenle una mas.

  Martijn que ya estaba por abrir la puerta volteó y sonrió, claro a quien no le daría risa, ya me había caído no se cuantas veces durante el día, recuerden que el día comienza a partir de las 12 de la noche del día anterior. Se tiró encima mio al igual que en la cama, pero esta vez ¡En el piso! - No eres torpe - me dijo acariciándome.

- Martijn, tengo hambre - lo besé en la mejilla, el se sonrojó, no niego que yo también. Me hizo cosquillas en el piso y luego me cargó, salimos de la habitación, yo aún seguía cargada riéndome de todo, ¡Estaba feliz!

- Emm... les recuerdo que estoy solo - Julian estaba sirviendo ¿Hamburguesas? mmm... ¡QUE LICO!, no soy de esas chicas que cuenten calorías para eso tengo una rutina de ejercicios. Bajé de los brazos de Martijn.

- ¡Ven Julian! - lo abrasé y le dí un beso en la mejilla.

- ¡Vamos a desayunar! ¡Tengo hambrita chicos! - dije, Martijn estaba atrás mio - Martijn, ¿Qué haces?

- Cuidándote de que no te caigas.

- ¡No me caeré tonto! - ¡Estaba tan feliz!

- Sin cebolla ni tomate ¿Verdad? - preguntó Julian.

- Si - respondió Martijn.

- ¿Comes? - preguntó Julian dirijiéndose a mi. 

- ¡Por supuesto que sí! - respondí agarrando la hamburguesa sentándome en la mesa. (rimo :3)

- ¿Esa no es mi polera? - me preguntó Julian mientras desayunábamos los tres, abrí los ojos grandes como platos.

- ¿¡QUÉ!?, pensé que era la de Martjin, discúlpame - estaba roja.

- No te preocupes princesa, te la presto - sonrió, el también era super lindo.

-  Gracias - le agarré uno de sus cachetes y lo pellizcaba como una plastilina.

- Auch, lele lele - decía Julian.

- ¡ROSITA! - gritó Matijn.

- ¿QUÉ? - le respondí igual.

- ¡Me pongo celoso! - los tres comenzamos a reír.

  Tomé un largo baño, me puse la ropa que use ayer, felizmente que secó y salí.

- Princesa ¿Martijn te acompañara a buscar tu hotel? - Julian me hacia conversación mientras Martijn se bañaba.

- Si - sonreí.

- Llévate mi polera, te la regalo, hace frío.

- Oh..., gracias, eres muy lindo - le dije mientras me ponía su polera y lo abrazaba, el me cargó y yo le di un beso en la mejilla.

- Soy Julian Dobbenberg , este es mi número - me dió una tarjeta - cuenta conmigo siempre.

- ¿Vamos? - preguntó Martijn poniendo su brazo en curva, tomé mi cartera y su brazo.

- ¡Vamos pequeño! tu también lo eres he... ¡Adiós Julian! ¡Estaremos en contacto! - dije mientras agitaba mi mano.

- ¡Adiós princesa! - respondió Julian con una sonrisa.

  Subí al auto de Martijn.

- ¿Recuerdas por donde era?

- Vamos al Omnia, de allí me guiaré.

- Esta bien pequeña.

  El camino fue muy divertido, ¡Martijn es muy divertido!

- ¡Llegamos!

- Ya ahora entra por esa calle... - le di indicaciones - ¡ESE ES! - grité asustando a Martijn.

- Vamos pequeña, no quiero que te caigas en el camino - yo solo le di un pequeño golpesito en el brazo.

CAPÍTULO LARGO!!! ^-^ Bueno tengo la sensación de que mi novela esta recibiendo un poco mas de apoyo y eso me pone  super feliz y me anima a seguir escribiendo ^-^ muchas muchas gracias por sus estrellitas :') 

Los quiero!!! ♥