Capítulo 20: Número Equivocado.

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Lee Chae Rin se ha perdido en la profundidad de los grandes ojos castaños del latino y en la cautivadora sonrisa que se ha trazado en los labios de éste. Nuevamente, el gallardo muchacho la hace vacilar. Él no parece ser consciente de la maraña de sentimientos que despierta en el interior de la bella jovencita, pero se empeña en inquietarla siempre que encuentra una oportunidad.

Ella cree que Víc es molesto. Expresa fastidio cuando él se comporta travieso, sin embargo, en el fondo la agrada su seductor jugueteo. Pero detesta imaginar que él hace lo mismo con otras chicas; la llena de rabia.

Mientras la afamada cantante intenta descifrar sus desconcertantes sensaciones, Víctor observa curioso la portada del libro. Lo abre, lee un par de líneas y vuelve a sonreír.

--¿Es éste el que quieres? --pregunta él, mostrando la obra.

--¿E-eh? --titubea ella, saliendo bruscamente de su enajenación--. Sí –responde con un hilo de voz.

--No pensé que te gustase la novela rosa. –Él emite una burlesca risita--. Creí que una chica con una personalidad como la tuya preferiría cualquier otro género literario, menos el romance. Así que en el fondo eres cursi –se burla.

--¡Eish! --Ella gruñe y le arrebata el libro--. Quise tomarlo sólo porque me llamó la atención la tapa.

Para no hacer evidente su sonrojo y desasosiego, la atolondrada señorita empuja con suavidad a su interlocutor. Ella pretende volver a la mesa para leer la obra que ha elegido. No obstante, él se aproxima un poco más y la detiene, posando la mano sobre el curvilíneo talle femenino.

--Espera. –El mordaz agente murmura a su oído.

El inexperto corazón de la señorita vuelve a acelerarse, y su piel se eriza debido al estremecedor escalofrío que ha recorrido su cuerpo desde la cabeza hasta la punta de los pies. Ella agranda los ojos con asombro y lo mira fijamente. Incluso percibe con mayor intensidad la varonil loción del occidental, quien ahora la envuelve con sus esculpidos brazos.

--¿Qué... qué haces? --Ella finge molestia y masculla--: Suéltame, torpe.

--Cálmate y escucha –suplica amablemente--. Sé discreta y mira a tu izquierda. ¿Ves a aquella chica de rasgos europeos que está a un par de mesas de la nuestra? --CL asiente. Él continúa--. No ha dejado de mirarme desde que llegamos a este lugar. Incluso en este instante nos está mirando. ¿Te das cuenta? Sinceramente, me siento muy incómodo –añade con desagrado.

--¿Por qué? --Ella frunce el ceño, visiblemente enfadada--. ¿No es eso lo que te encanta?, ¿estar rodeado de mujeres? --cuestiona con tono de reproche--. ¿No es eso lo que esperas siempre?, ¿que te miren, te sonrían e intenten seducirte?

--¿De qué hablas? --El ríe, travieso--. Por supuesto que no. ¿A quién en este mundo lo agrada el acoso? En cuanto viniste hacia acá, ella se acercó a mí y empezó a atosigarme con preguntas.

--Y tú feliz, ¿cierto? --recrimina, con la mirada llena de hastío.

El encantador muchacho niega de manera no verbal y deja escapar una juguetona risita. Sujeta con las yemas de los dedos el delicado mentón de la rapera y lo alza suavemente para conseguir que ella centre su atención en él.

--Me preguntó si tengo novia... y si ella eres tú –dice, con semblante serio.

Presa de la curiosidad, la líder de 2NE1 entorna los ojos y clava la mirada en su joven representante, como si quisiera penetrar en la mente de éste para descubrir sus pensamientos.

--¿Y? ¿Qué le dijiste? --Ella quiere saber.

--Tuve que mentir –revela él, con una pícara expresión en el rostro.

The Baddest Female (K-Pop) [2NE1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora