Capítulo 9: Encuentros.

234 12 3
                                    

Después de lo que pasó el miércoles llamé a Victoria quien no me respondía las llamadas ni los mensajes. Estaba algo extraña.

Toda la semana la pasé junto con los chicos. Me sentía bien con ellos, no había señales de Vic, además ella no podía escoger lo que yo tenía que hacer. Aun seguía en comunicación con la otra parte de mi familia.

Cada vez iba conociendo más a los chicos, conocimos a la chica de Tony quien era igual a él en su forma de ser. Era bajita y pecosa, su cabello era negro y liso. Algo de lo que a ella le gustaba de Anthony físicamente era su cabello rojizo ondulado y sus ojos miel. Eso si que Tony era más alto que los chicos asi que Camila (así se llama) se veían tiernitos juntos.

Jhonny y Jessy seguían siendo los mismos, aunque a Jhonny le dio un ataque de celos cuando supo que Jessy tenía que hacer un trabajo con un compañero, llamado Raymundo.

Hacen tan bonita pareja... el amore.

Lo que ignoró a Jessy por dos semanas, cuando nos solíamos juntar respondía todas las conversaciones de nosotros, menos las de Jessy. Creo que ha Jessy le afectó un poco. Ya que se había acostumbrado a sus bromas tontas.

Chris. También seguía igual, aunque creo que solo se comportaba así conmigo para jugar. Era un chico tranquilo, por lo que me dí cuenta que siempre donde andaba comía gomitas. No solía juntarse con nosotros mucho ya que salía con su familia para sus lugares hogareños campestres, ama pasar tiempo al aire libre por lo que nos contaba.

Estaba sentada en el sillón viendo una película con papá cuando su teléfono sonó. Lo tomó y contestó, se detuvo un momento, estaba pálido. De repente una risa salió de su garganta subiendo rápidamente las escaleras.

Que extraño.

Seguí viendo la película que ya estaba por terminar, cuando un mensaje llegó a mi celular.

Jessy: que hay?   -20:29.

Yop: no mucho...    -20:29.

Chris: mucho sí...   -20:30

Jhonny: tengo fiebre.  -20:34.

Jessy: pobrecito xD   -20:34.

Dejé el celular en el sillón y fui a por un vaso con jugo, estaba sedienta. Papá bajó los escalones contento.

-¿Algo que no sepa?

-Bueno... en un día mas saldré, Jamie.

-¿Trabajo? -dejé el vaso reposando en el mesón.

-Mmm... no exactamente.

-Entonces... -papá se acercó dándome un beso en la mejilla.

-Te quedarás donde la abue... por... -hizo una pausa, luego se pasó una mano por el cabello -aproximadamente un mes.

Abrí tanto los ojos que creí que se me saldrían de órbita.

-¿Dónde iras?

-No sé como contarte hija... pronto te lo diré ¿Vale?

-Vale. -lo abracé dejando mi cabeza en su pecho.

-Iré a descansar. -dijo dando un paso hacia atrás -descansa.

Asentí levemente. Busqué mi celular y subí a mi habitación, pero antes apagando la televisión.

Me adentré a mi cuarto cerrando la puerta tras de mí. Me senté en mi cama con las manos en mis piernas. Un mes... donde la abuela.

-Jamie.

Creo que oigo cantar a los angelitos.

-Jamie.

Creo que están en la ventana.

-Rapunzel... deja tu cabeza caer. ¡Au! -y se las dan de príncipes -digo... deja tu cabello caer.

Es broma verdad.

Me asomé por la ventana, la abrí rápidamente colocando la cámara de mi celular lista para grabar cualquier cosa.

-Eu... no son angelitos. -no eran si realmente a un Chris se le podía decir eso -¿Qué haces a esta hora por estos lados?

-Como buen mensajero de la princesa tengo que tenerle las noticias al tanto ¿no? -exclamó sonriendo desde abajo.

-Eres un idiota. -moví la cabeza negando y sonriendo al mismo tiempo.

-El idiota quiere pasar a verte.

No pude evitar sonrojarme.

-Estas no son horas querido mensajero.

-Las horas no valen nada cuando se trata de verte.

-Basta. -ahora creo que estaba roja pero roja. Gracias noche.

-Cariño... te conozco tan bien que hasta puedo apostarte cualquier cosa a que estás sonrojada. -se cruzó se brazos haciendo una mueca orgullosa.

Si Anthony es marciano, este es brujo.

Mi pulso se aceleró colocandome nerviosa.

-Creo que Jhonny te contagió con lo de venir después de las ocho a ver a Jessy. -me crucé de brazos.

Rodó los ojos.

-Ven a abrirme... -negué con la cabeza -entonces baja tú.

Papá estaba durmiendo. Se supone que... al carajo, bajé rápidamente las escaleras sin hacer ruido. Pero por desgracia choqué con un mueble golpeandome en la rodilla.

Entre saltitos llegué a la puerta, aún no giraba el picaporte cuando Chris me tomó en brazos dándome vueltas.

-¿Me extrañaste? -sonrió entre las vueltas.

-¡Estás loco!. -grité riéndome.

-Me alegra que te haga reír. -me miró fijamente cuando me bajó.

-Basta con los cumplidos. -le dije volteando la cara sonrojada.

-¿Te incomodo? -preguntó dándome vuelta la cara con su mano para que lo mirara -o te avergüenza.

-Las dos cosas. -me perdí entre sus ojos azules -tienes lindos ojos ¿Te los podría sacar con una cuchara?

-Solo si intercambiamos ojos.

-Estos ojos. -apunté mis ojos con voz superior.

-Pero sin esa voz... devuélveme a la Jamie. -me volvió a tomar en brazos -o te doy muchas vueltas.

-Está bien. -dije entre las vueltas -está bien. Para. Para por favor.

Me bajó de un golpe haciendo que me callera de trasero. Bien. ¡Chinguen a su mami que este territorio es mío!

-Estúpido. -dije tratando de pararme, pero fue todo al revés. Ahora estaba tirada en el suelo.

-¿Está cómodo? -esta vez su sonrisa era divertida.

-Oh si. -dije sarcástica -¿Sabes? Podrías traerme unas almohadas y me quedo a dormir aquí, está bastante rico el suelo.

-No. Claro que no. -añadió levantándome del suelo -sin antes compartir conmigo el suelo. Eso si no te molesta compartir. -se rió entre dientes.

Le di un puñetazo juguetona en su brazo. Siempre con sus bromas pesadas, hacía que me recorrieran escalofríos por mi cuerpo. Cuando escucho un celular vibrar en una de mis carteras. Mi celular, claro. Que estúpida.

Lo busqué en las carteras de mi casaca, no, estaba en mi pantalón en las carteras traseras. Tomé el celular y respondí la llamada.

-¿Hola? -dije, sintiendo la respiración de la otra persona tras el auricular.

Cree en ti.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora