Cree en ti.

Capítulo 30: No... es solo un nuevo comienzo...

Hoy me había levantado muy temprano para poder ir a buscar a Victoria al hospital. Estaba por entrar a su habitación cuando una llamada de Chris me sacó de mis intenciones.

-¿Hola?

-¿Señorita Ainswort?

-Disculpe pero está hablando con Winsley. -dije.

-Oh... ¿le tengo que avisar ahora de que tiene propietario? -dijo burlón.

-Mmm... no. -dije riéndome.

-¿Dónde estás? -exclamó.

-En el hospital ¿está lista la sorpresa? -todos esperaban a Victoria, así que habíamos decidido darle una sorpresa.

-Claro, cariño. Las estamos esperando afuera.

-Okay. -dije para luego cortar.

Abrí la puerta y luego me introduje en ella. Victoria estaba en frente de la ventana mirando.

Su bolso estaba encima de su cama así que decidí tomarla por ella.

-Vamos Vick. -dije tomándola con suavidad en su brazo. Estaba mirando fijamente unos niños jugar con un perrito. -Vamos Vick, no estés desanimada.

-Tal vez el día de ayer fue pésimo y todo me salió mal. Pero eso no es razón para que te desanimes y pienses que el día de hoy será igual. -se dio la vuelta dándome una sonrisa amorosa.

-Eso es. -dije sonriéndole, se enganchó de mi brazo decidiendo salir de la habitación.

La pequeña Sami se la había llevado la mamá de Vick hace poco. Estaba encantada con lo hermosa de su hija y lo valiente que era. Estaba orgullosa de ella.

-Te quiero. -dijo mientras seguíamos caminando.

-Y yo igual... yo igual. -estábamos por salir cuando un auto se estacionó frente a nosotras.

Chris se bajó de este acercándose a nosotras. Me saludó dando un beso en mi frente para luego abrazar a Vick. Le colocó una venda en sus ojos.

-¡Ey! Que haces... ¿¡Me están secuestrando!? -gritó Vick.

Ambos nos pusimos a reír.

-Vamos Vick, voy contigo. -dije mientras la guiaba hacia el auto.

La subí con cuidado para luego cerrar la puerta, subí de copiloto. Aun no empezaba la fiesta. Chris encendió el auto y empezó a manejar al lugar indicado y propuesto.

-Ojalá no se les ocurra dejarme botada por ahí. ¡Ni se les ocurra! -dijo Vick refunfuñando.

-Ya cálmate. -dijo Chris riendo -te empiezas a parecer a una persona que conozco.

Creo que eso fue para mí. Lo fulminé con la mirada y el hizo una mueca.

Seguimos charlando y riéndonos de tonteras, recordando los viejos tiempos. Me encantaría repetir las mismas felicidades, los recuerdos...

-Ya casi llegamos. -dijo Chris mientras doblaba una esquina de la calle.

-Que bien. -dijo Vick soplando frustrada.

-No seas impaciente. -dije mientras miraba por la ventana.

Chris frenó el auto estacionándolo. Luego ambos bajamos y nos dirigimos donde estaba Victoria tiesa.

Tratamos de bajarla con cuidado lo que fue casi imposible "casi". Contamos hasta tres para luego soltarle la venda a Victoria.

Esta se la sacó de inmediato quedando pasmada.