29.Tercer error

46 14 1
                                    

Terminando el otoño rompí tus pantuflas azules, yo sólo quería jugar pero tú te enfadaste mucho.

Tenías que usar las antiguas zapatillas de dinosaurio de Daniel.

Me dolió más tu cara de decepción que tus gritos.

Aunque me abrazaste y me confesaste que te era casi inposible enojarte conmigo.

Yo me prometí no volver a hacerte daño.

Un trozo de tu felicidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora