KELLIN
Sé que hice mal, sé que no debí comportarme así.
Cuando la vi llorar algo en mi interior se conmovió, pero ya no podía parar, el daño ya estaba hecho.
Lo merecía.
Estaba hermosa, quiero decir... no era nada a comparación del primer día en que la vi y me sorprendió bastante el hecho de haberla visto esta noche aquí.
Cuando Justin las presentó estaba tan anonadado por el escote que Aisha había traído que nisiquiera le tomé importancia, hasta que vi su sonrisa y la forma incómoda en la que miraba a todos y no era para menos si los susurros sobre ella y su amiga de parte de las amigas de Aisha, se escuchaban a kilómetros.
Justin había cometido un grave error y yo tenía que sacarla a ella de todo esto.
No sé porqué, pero sentía la necesidad de hacerlo.
Aisha siguió hablándome, pero francamente dejé de escucharla cuando perdí de vista a esa tonta chica, su amiga estaba a un lado de nosotros con Mike y Claudia, al parecer habían congeniado bien, me paré excusándome de que iba al baño y fui en busca de ella.
Encontrarla después de todo no había sido tan difícil ya que era la única que estaba sola en la barra.
Yo había tomado desde que llegué y tenía los cables un poco chiflados y aunque sé que no es excusa, me reconforta saber que no estaba del todo en si.
¡Justin había cometido un jodido error y no se había dado cuenta!
Realmente estaba aburrido de las mismas cosas que hacíamos es por eso que me sentía con las ganas de querer salvar a alguien. Y puedo admitir que tengo las peores maneras de hacerlo, jamás he intentado ser bueno y agradable con una chica, no si antes me acostaba con ella.
Pero esta chica tenía algo, en su mirada, su rostro ¡no sé!
Pero algo la hacía diferente y tenia el presentimiento de que no es igual a las chicas que conozco.
Con esto no digo que quiero ser su amigo o algo, porqué no es el tipo de chica con el que me gustaría hacer hora o algo, se ve tan anticuada, tan.. Rara.
-¿A ti quién te invitó?- dije jalando de su brazo.
Ya sé que no fue el mejor inicio pero el alcohol me tenía alborotado.
Jaló su brazo rápidamente.-¡¿A ti que te importa?! ¡Déjame en paz!
-A mi no me grites-agarré su brazo tratando de acercarla hacía mi.-¿No sabes que acá todos somos grandecitos?
Me miró pestañeando varias veces y me empujó con ambas manos, -¿Qué quieres idiota? ¡¿Acaso crees que eres mejor que yo?!
¡Argh! Si supiera que no se trataba de eso...
Tenía que buscar la forma, la manera para alejarla de todo esto, habiendo tantas personas en la universidad, se topaba con el peor grupo.Se bajó con dificultad de la silla, algo qué me causó mucha gracia.
-¿Porqué mejor no te llevas a tu amiguita? ¿No ves lo borracha que está?. Tiene la suerte de haber venido con una monja como tú.- Una vez una amiga me dijo qué si querías alejar a alguien tenías que tratarla mal.-Oh, pero que yo sepa las monjas no usan ropa tan chiquita e intentan ser sexys como tú - continué.¡Mierda!
Me miró asombrada y unas cuantas lágrimas empezaron a caer por su mejilla.
Me empujó denuevo y ya que estaba medio borracho tambalee, menos mal y no caí, ella agarró un vaso que no sé de donde salió y me lo tiró en la cara volviendo a escapar de mi.
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POLES APART [Kellin Quinn]
أدب الهواةY llegas al punto en el que piensas que así de raro puede ser todo, que al conocerlo tu mundo cambió por completo dando un giro de 360 grados. Entonces él se encargó de variar mi vida, Kellin llegó inesperadamente cambiando totalmente el rumbo de m...