No sin ti cap 16

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Rezick me puso la mano en la espalda en lo que yo pensé que era una ayuda pero no fue así, me empujo con brusquedad para que cruzase antes que el, tropecé pero con un par de pasos me estabilicé, Rezick me tomó del brazo para que me volviese mas rápido y en un segundo estaba tomándome la cara entre sus manos, sin darme tiempo a quejarme por su brusquedad inesperada.

Por culpa del miedo a que nos atrapasen no tuve tiempo a reaccionar.

- Te encontraré -dijo hablando muy rápido con una sonrisa tensa en la cara- te lo prometo.

- ¿Qué? -dije empezando a alarmarme, empezaba a comprender lo que Rezick pretendía.

Un policía lo agarró del hombro.

El tirón le hizo alejar una mano de mi cara y aún con la otra en mi mejilla me acercó a el y en un segundo me besó, un beso corto que me aceleró el pulso, me dejo aturdida y me transmitió todo lo que el no me dijo nunca antes, el simple roce que le permitieron, se alejó y acariciando mi mejilla me sonrió, con prisas tomo mi mano para colocar en ella la llave, intenté en vano atrapar su mano.

- ¡REZICK! - la garganta me ardió como si se desgarrase por dentro cuando grité con desesperación al ver que no cruzaría, y justo en ese momento cerró la puerta, alejándome de los problemas pero también de él.

En ese momento pensando con claridad de nuevo hice el esfuerzo de dejar de pensar en que Rezick acababa de besarme, y lo que eso conllevaba, y me concentre me di cuenta de todo, Rezick nunca tuvo la intención de que escapásemos los dos, me pidió con tanta insistencia que confiase en el porque si no podíamos escapar los dos el ya tenía planeado como sacarme del sueño.Sin pensarlo me llevé la mano y me tape la boca sin saber que hacer noté unas lágrimas empezar a caer.Ese idiota mentiroso, como pudo hacerme esto se suponía que eramos un equipo.

"¿Cómo voy a continuar con la culpabilidad de que Rezick se a dejado atrapar para que escapase?"

Esa duda, además del miedo de no saber lo que le ocurría a Rezick en ese momento, no salían de mi cabeza. El miedo se apoderó de mí y caí de rodillas al suelo llorando, con las manos en los ojos no me preocupé por mirar donde me había dejado la puerta, solo quería volver al otro lado de la misma. No sé cuanto tiempo necesité para calmarme pero cuando lo conseguí terminé de secarme las lágrimas que aún quedaban en mis mejillas con el cuello de la camisa, mientras respiraba hondo escuché un golpe a mi lado que me hizo girarme asustada apoyando las manos en el suelo, lo que provocó el golpe fue un objeto que cayó a mi lado, una maleta de un color morado muy claro.

- ¿Pero qué significa esto ahora? -me pregunté enfadada, no estaba de humor.

Como siempre, me encontraba rodeada de blanco aunque a lo lejos, se divisaba el comienzo de un camino, de losetas amarillas lisas, por un momento tuve la sutil sensación de que la puerta me había mandado al cuento del mago de Oz, aunque si era así no entendía el por qué de la maleta.

Actué con inteligencia y me levanté, tomé la maleta que sabía que necesitaría y comencé a caminar en dirección al principio del camino, la maleta se deslizaba sobre las losetas con suavidad lo que me permitía pensar, pero en ese momento no era lo mejor que podía hacer, así que intentaba distraerme a mi misma mirando alrededor alerta a cualquier movimiento o ser extraño. Tengo que admitirlo realmente creía estar encerrada en Oz y me preparaba para atacar a cualquier robot o león extraño que se acercase.

Continué el trayecto sin pensar en nada en concreto solo en el sonido seco de mis sandalias planas, sandalias que compré estando con Rezick, a este paso no pararía de llorar nunca. Con una pizca de esperanza, el camino terminó dando a parar a lo que parecía una cuidad en la que solo había mansiones, la situación era algo intimidante me hizo sentirme pequeña pero al menos la cuidad estaba llena de gente, la mayoría parecían de mi edad algo que me subió un poco el animo pero también había unos cuantos que aparentaban alrededor de 27 o 30 y llevaban unas camisetas amarillas muy llamativas supongo que para diferenciarse del resto.Comencé a acercarme, el hecho de que ya todos tuviesen rostro dejó de impresionarme en la playa, la playa con Rezick, de nuevo me sentía culpable y debió de reflejarse en mi rostro ya que una chica se acercó a mi y tocó mi hombro llamando mi atención.

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