Materia de sueños

¡Parque de atracciones! cap 9

– Quita esa estúpida cara sonriente de pervertido –dije apuntándole con mi dedo indice y manteniendo le lejos de mi.

– O ven aquí cariño –dijo atrapándome entre sus brazos mientras me daba besos en la coronilla y me arrastraba a la zona donde repartían las llaves.

– No, suelta idiota –le gritaba mientras se reía conmigo atrapada entre sus brazos todavía, no soy débil pero es que el eras demasiado.

Me soltó al llegar a la cola de los ganadores donde nos tocó delante una pareja muy cariñosa y no me extrañaba la chica era muy guapa y al parecer, a Rezick le dieron ganas de imitarlos por que me abrazó por la espalda y apoyó la cabeza en mi hombro mientras esperábamos.

– ¿Qué haces? –pregunté sin moverme.

– Ser tu novio.

– Que agradable eres –dije con sarcasmo.

– Mi novio es igual de empalagoso –río la chica de la pareja de delante volviéndose para hablar conmigo.

– Ah ¿no te gusta que sea así? –dijo su novio alejándose un poco.

– No es eso tonto –le respondió abrazándolo para volver a acercarlo a ella.

Prometo que en ese momento pensé que estorbábamos.

– Creo que estorbamos –susurro Rezick en mi oído.

– ¿Si, eso parece no? –le contesté riendo, giré la cara en su dirección lo que hizo que quedásemos muy cerca, volví a mirar hacia delante donde la pareja dejaba de hablar y la chica y volvía a enfocarse en mi.

– ¿Cómo os llamáis?

– Yo Mizu y mi novio Rezick.

– Oh yo soy...

La chica siguió hablando pero no la escuche bien por que Rezick me susurro –es la primera vez que soy "tu novio Rezick"– después me apretó mas contra el y lo ultimo que oí bien era que contestaba encantado, además de oír mi escandaloso pulso.

– Tengo una idea –saltó la chica separándose de su novio y acercándose a cogerme las manos sonriente– ¿Y si cogemos nuestras llaves y tu duermes conmigo en mi habitación y Rezick con mi chico en la vuestra?

– ¿QUÉ? –gritaron su novio del que seguía sin saber el nombre, "me siento un mala persona" pensé, y Rezick que incluso me soltó.

– Si por supuesto –le contesté sonriente.

– ¿Qué? –me preguntó Rezick.

– Cariño, te quiero pero no llevamos tanto tiempo saliendo, ¿lo entiendes no? –le conteste con una sonrisa que esta reteniendo las carcajadas que quería soltar.

– Pero que ...

– Ven Mizu –le interrumpió la chica tirando de mi brazo para llevarme donde los jueces.

– Vuestras placas –nos pidió la chica morena y tanto la chica como yo las enseñamos.

– Bien Mizu, toma –dijo tendiéndome mi llave después de mirar unas listas– y Lisa esta es la tuya.

Bueno ahora por lo menos sabia su nombre, falta el de su novio.

Cuando todas las llaves estaban repartidas a las parejas los jueces nos guiaron a todos al hotel, no estaba muy lejos de la playa, así que les dije a Lisa y a su novio que diésemos una vuelta por la cuidad, este estaba siendo uno de mis sueños mas largos así que por lo menos me lo pasaría bien, le pregunté a la chica morena del grupos de jueces si había algo divertido cerca del hotel para pasar la noche y me dio una dirección ¡de un parque de atracciones! Mi amor por ellos es incalculable así que se lo comenté a Rezick y los demás:

– Tengo la dirección de un parque de atracciones ¿Por qué no vamos hasta que se haga más tarde?

– Vale, pero no tenemos entradas ¿Quedarán a esta hora? –me preguntó Lisa.

– Espera –el sueño siempre me daba lo que necesitaba por lo que si buscaba en los bolsillos de mi pantalón... – tadan.

Dije contenta sacando cuatro entradas, le tendí dos a Lisa y le di otra a Rezick.

– Gracias, tienes todo preparado como siempre ¿no? –dijo pasando su brazo por mis hombros para acercarse.

– Calla idiota –dije apartándole mientras reía.

Nos fuimos el grupo entero a la dirección del papel que me dio la chica, el camino por supuesto fue tan estúpido como el supuesto "novio" que tenía, nos encontramos con un hombre disfrazado de orangután con el que nos hicimos una foto y que mas tarde, no se por qué y tampoco me interesa, pero empezó a perseguir a Rezick al que encontramos después escondido en un parque de niños.

Es que lo que no le ocurriese a el no le ocurría a nadie. Por fin llegamos al parque y como el buen ejemplo de niña chica que soy cogí a Rezick del brazo y tire de el para ir corriendo a la montaña rusa mas cercana, una muy alta de raíles dorados y sujeciones azules llamada "Invertigo" vi de reojo como Rezick palidecía mientras lo arrastraba a la cola para entrar.

– Esto, Mizu creo que yo voy a pasar de esta, voy a esa tienda a tomarme un helado ¿vale?

– Ni de broma, no seas miedica –refunfuñe apretándole más la mano para que no huyese, mientras tanto Lisa y su novio llegaron y se colocaron con nosotros, Lisa estaba bastante asustada abrazada a su novio, que graciosa.

– Pasen –dijo un chico con el uniforme de la atracción al principio de la cola.

– Por fin –dije feliz corriendo con Rezick todavía agarrado, lo coloqué a mi lado en la primera fila, pobre.

Después de esa impresionante atracción esperamos a que Rezick dejase de estar verde para irnos a comer algo, nos decidimos por un americano en el que Lisa y su novio, sigo sin saber su nombre y de verdad que me siento una mala persona por ello, empezaron a darse la comida como una pareja empalagosa, Lisa era muy agradable y buena persona pero me estaban entrando ganas de vomitar arco iris. Ese sentimiento duro poco por que fue sustituido por una patata que Rezick me tiró.

– ¿Que quieres pelea? –le pregunté levantando una ceja.

– Supongo por que sé que no me dejaras darte una patata ni tu me darás una –me contestó sonriente.

– Pues mucha razón tienes –le conteste mojando una pata en el ketchup y pegándola en su mejilla, miré hacia el frente mientras bebía de mi refresco tranquilamente y veía como Lisa empezaba a reírse.

Por supuesto Rezick no iba a quedarse quieto, cogió mostaza con el indice y me la puso en la nariz, y así comenzó una estúpida pelea de salsas y patatas en las que también entraron Lisa y su novio, evidentemente nos echaron y tuvimos que ir al baño mas cercano a intentar quitar algunas de las manchas mas visibles para volver al hotel medianamente presentables.

– Por favor que vergüenza –dije con mi camisa de manchas amarillas y rojas.

– Pues date prisa –Rezick cogió mi mano y yo la de Lisa a la vez, esta cogió la de su novio y corrimos como niños chicos en dirección al ascensor con la mayoría del personal del hotel mirándonos, algunos con mala cara otros sonriendo divertidos, llegamos riendo y por primera vez me vi en el espejo del ascensor, mi cara brillante por la marca que había dejado la salsa, la camiseta y el pantalón llenos de colores, incluso coca cola que también cayó, pero lo mejor es que ninguno de los demás estaba mejor que yo, sobretodo Rezick por que tenía el pelo rojo si no el ketchup se vería perfectamente.

– Damos pena –dije riendo y mirándonos a todos.

– Pero fue realmente divertido –contesto Lisa sonriente.

– ¿Visteis la cara de la camarera cuando nos oyó? –preguntó el novio de Lisa divertido.

– Parecía que habíamos matado a alguien –aseguró Rezick sujetando su estomago.

– Yo creo que lo mejor fue cuando llamo a ese camarero enorme para que nos sacase –opinó Lisa.

Llegamos a nuestra planta y bajamos del ascensor riendo, sin saber la locura de noche que nos esperaba por delante.