La humillación

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Esta mañana me levante con una estúpida sonrisa.

Me dirigí a darme un baño y luego escogí la mejor ropa de mi armario.

Al bajar salude a mama con un beso tome una manzana y me fui al colegio.

Al entrar al salón Jeffrey me sonrió, me fui hacía mi asiento a esperar a que la profesora de matemáticas llegara.

Inicie a sacar mis útiles y cuando menos lo espere ahí estaba Jeffrey sentado a mi lado.

Lo observe con una cara de asombro.

—Hola hermosa. —Dijo.

—Hola. —respondi fríamente.

—¿Porque tan seria? —pregunto.

—¿Que haces aquí? —respondí.

—Oye tranquila yo pregunte primero —dijo

Yo solamente sonreí.

—Así esta mejor —dijo el.

La maestra de matemáticas no tardo en llegar al salón
Nos dejo una lista de 25 ejercicios.

Yo los inicie a realizar mientras Jeffrey solo jugaba con su lapicero.

Minutos antes de que el timbre sonara Jeffrey paso a mi lado de el escritorio una nota:

¿Puedo pasar contigo el receso ?

A eso solo respondí un si.

Al sonar el timbre esperamos que todo mundo saliera y nos dirigimos a comprar el almuerzo, luego de eso nos fuimos a sentar abajo de un árbol.

Iniciamos a platicar, la verdad es que me inspiraba confianza. Pero no demasiada como para contarle mi amor por las navajas.

Tocaron el timbre y iniciamos a caminar directo al salón. El puso su brazo sobre mis hombros y caminamos. Al llegar al salón los ojos de todos los chicos estaban sobre nosotros especialmente los de Alisson.

Nos sentamos en nuestro escritorio y más tardamos en sentarnos, cuando el grupito de Alisson se nos acerco y empezó a decir muchas groserías.

—¿Es enserio Jeffrey por esta cosa me cambiaste? —pregunto con tono petulante.

—Solo verla da asco, sabia yo que no podrías conseguir otra que sea mejor que yo ¡Jajaja! ¡Ah! espera no lo hay. Si piensas que andando con este adefesio me harás sentir mal estas equivocado. Esta igualada no me llega ni a los talones solo vela es gorda y fea ¡Pff! —dijo la arpía.

No pude mas y corrí lo más rápido que pude, me salí del colegio me fui al parque que esta situado cerca de mi casa.

—¡Ya no puedo mas! —Grite.

Inicie a llorar y saque mis navajas, las pase por mis brazos y mis piernas muchas veces hasta saciar las ganas de lastimarme.

Pase toda la tarde en el parque tenía al menos 15 llamadas perdidas de Jeffrey y unos 20 mensajes que la verdad no pensaba responder.

Tome el camino hacia mi casa, al llegar encontré a mi mama borracha lamentándose porque había encontrado a mi papa con su amante en la oficina.

Al observar el estado de mi mama camine hacia mi cuarto me encerré y encendí mi laptop tenía otros 30 mensajes de Jeffrey.

Al ver sus mensajes ya las ganas de revisar mis redes sociales se habían perdido, así que apague mi laptop y me tire hacia la cama, observe el techo luego de eso cerré mis ojos cuando lo hize sólo me imagine la luna.

Así que decidí subirme al techo lleve mis auriculares y mi reproductor he hice sonar la canción «lo que siempre soñamos ser de sandoval» he inicie a cantar.

"aveces quisiera ser un fantasma entre luz y entonces desvanecer aire que vuela y es todo quiero que seas mi ilusión y ven toma mis manos trata de entender que vamos a poder convencer que somos lo que siempre soñamos ser"

Las lágrimas caían sobre mis mejillas, el dolor inundaba mi alma , las palabras de Alisson quebrantaban mi ser.

Porque al final yo sabia que todo lo que ella había dicho era cierto y eso me dolía, pero me dolía aún más saber que yo de ilusa pensaba que alguien como Jeffrey se fijaría en mi. ¿Tonto no?

Me idealice a la idea que Jeffrey se había acercado a mi por lastima o por curiosidad ya que en una ocasión me preguntó que porque sólo ocupaba camisas magas largas esa vez le respondí que me gustaban pero no me creyó mucho.

La verdad es que a estas alturas ya no me importa nada. Tomé la decisión de alejarme de el completamente aunque se que estoy enamorada de el.

Esa noche fue una de las mas largas de mi vida no paraba de llorar, mi corazón estaba destrozado, mi alma herida.

Decidí bajar hacia mi habitación para intentar dormir unas horas, me acosté en mi cama pero estaba con la lampara encendida observando todas las cicatrices de mis brazos.

—Extraño cuando mis brazos estaban limpios —me dije a mi misma.

Inicie a recordar mi feliz infancia cuando mis padres estaban enamorados, cuando junto a mis hermanos eramos una familia feliz.

Hasta el día que mi madre quedo embarazada y tuvo un aborto. Desde ese día todo cambio, mi mamá entró en una depresión, mi papá inicio a tomar, yo era la menor así que pocos meses después mis hermanos Eleazar , y Emperatriz se fueron a estudiar al extranjero mientras yo me quede con mis padres viviendo un infierno. Hasta que me volví una adolescente y no pude mas e inicie a cortarme.

Al recordar toda mi historia sentía más dolor aún. Ya eran las 3 am y yo no podía dormir y tampoco podía parar de llorar.

Hasta que logre quedarme dormida

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¿A cuántos les ha pasado que se van a dormir con el corazón roto?

A mí me pasa muy seguido por eso es que los puedo entender si alguno le ha pasado. Saben esa es la peor tortura.

el diario de una chica invisibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora