¡Nos vemos!

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Mis días se han vuelto un infierno al no tenerte en mi vida, ¿Como se le puede llamar a esto vida si tú no estás junto a mi?
¿Como salir adelante sin la persona que me alienta a vivir?

La depresión es parte importante de mi existencia, uno no cae en la depresión de un día a otro. Al contrario las personas caen en depresión poco a poco es como si cayeras en arena movediza, y tu cuerpo poco a poco se hunde en un agujero muy profundo.

No se si yo ya había llegado al fondo, aunque una vez escuche por ahí que para poder levantarte necesitas tocar fondo pero ¿Que sucede si no te quieres levantar? ¿Que pasa cuando ya no tienes ganas de vivir? ¿Que pasa cuando llegas al fondo pero prefieres quedarte a descansar para siempre en lo mas profundo de el agujero?

Los días pasan, el reloj va marcando sus horas, el tiempo transcurre como agua entre mis dedos, todo avanzaba pero en realidad nada mejoraba, al contrario todo empeoraba.

Este día tenía que ir al colegio a presentar un trabajo en grupo, eso era bastante fastidioso ya que siempre he odiado ese tipo de trabajo porque que siempre hay uno que no trabaja y tiene nota y otro que hace todo el trabajo y aunque tiene buena nota los demás se toman el crédito.

Tomé mis cosas y me fui directamente al colegio, desde el incidente por llegadas tardías, inicié a levantarme temprano y también para ahorrar mas tiempo no desayunaba.

Llegué al colegio a tiempo, incluso podía ir un rato al patio a leer un poco y eso hice.

Estando ya en el patio con leyendo mi libro "en sus ojos"
Sentí una presencia observarme levante la mirada y me di cuenta que era Enrique.

—¿Enrique? —dije con tono dudoso.

—¿Podemos hablar? —preguntó.

—Claro siéntate —respondí.

—Rachell... El tiempo ha pasado muy rápido, se que en nuestra relación yo cometí la mayor parte de los errores pero en el transcurso de estos días he pensado bastante en todo lo sucedido estoy arrepentido, quiero que me perdones —dijo.

—Enrique, que te puedo decir, en la que fue nuestra relación al igual que tu yo cometí muchos errores, tu mismo lo has dicho el tiempo ha pasado así que aceptó tus disculpas y pues yo también te pido perdón por todo el daño. —respondí.

—Nena, quiero que dejemos el pasado atrás, quiero que iniciemos desde 0, quiero un futuro contigo, todo este tiempo que ha pasado me ha hecho comprender que te amo, que eres lo mejor que me ha pasado regresa conmigo... Por favor —dijo con tono suplicante.

—Enrique, yo no puedo volver contigo, nosotros nos lastimamos mucho creo que tenemos el derecho de iniciar algo nuevo con alguien mas.

—Entonces esto no es borrón y cuenta nueva —dijo rascándose la nuca en señal de incomodidad.

—Que haya un borrón y cuenta nueva entre nosotros no significa que volveremos, ya paso nuestro tiempo juntos.

—Rachell... quiero una vida contigo, se que tienes miedo de que te vea la cara de tonta pero yo quiero demostrarte que no será así. —insistió.

—No, Enrique —dije decidida.

—¿Porqué eres tan egoísta? —preguntó

Ese tipo de pregunta me molestó, sobretodo viniendo de él.

—¿Yo egoísta? —dije irónicamente.

—Si tú sólo piensas en ti, aparte de egoísta eres orgullosa, no quieres ser feliz conmigo.

—No es orgullo, es dignidad nosotros ya no podemos estar juntos simplemente nuestra relación no avanzaría.

—Entonces me voy no tengo ya nada que hablar contigo —dijo molesto.

el diario de una chica invisibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora