el diario de una chica invisible

Viaje al pasado

Esa mañana fue una de las más difíciles de mi vida. Casi no pude pegar un ojo en toda la noche.

Amanecí con unas ojeras que parecían unos sacos de papas, me dirigí hacia el baño y me lavé la cara, luego volví a sala de espera pero antes de llegar me percaté que mis dos hermanos estaban pidiendo información en portería así que empecé a caminar hacia ellos y lo saludé.

—Hola beba —dijo mi hermana.

—¿Como estas pequeña? —preguntó mi hermano.

—La verdad no lo se, no tengo idea como asimilar esto ¿Han sabido algo de papa? —pregunte.

—No nada. Pero no te preocupes —dijo mi hermana Emperatriz.

—Ahora estamos nosotros aquí para ti  hemos decidido venirnos a vivir aquí una temporada para estar con ustedes —me informó mi hermano.

—Así podremos estar mas al pendiente de mama y de ti —dijo ella.

—¿Que te parece si te voy a dejar a casa? así podrás darte un baño y descansar un rato mientras nosotros dos nos quedamos en el hospital para cuidar a mama.

—Esta bien —acepte.

En ese momento tomamos camino a casa, la verdad es que llegamos bastante rápido. Mi hermano ni siquiera entró.

Cuando yo estaba ya adentro de la casa me quedé parada en medio de la sala pensando en todos los buenos y malos momentos vividos en mi hogar. Desde mi infancia hasta ahora que estoy en la adolescencia.

Lo que mas recuerdo es que mis padres cuando yo tenía un mes de nacida estuvieron presos y me tocó andar de penal en penal visitándolos durante 4 años...

Años que mi hermana se hizo cargo de mí. En los cuales ella tomó el rol de madre, desde ese momento hacia mi persona con sólo 15 años «una niña cuidando otra niña» Vivíamos en casa de mis abuelas ellas me cuidaron bastante bien, me protegían hasta que un día no pudieron hacerlo.

Recuerdo que ése día yo estaba jugando felizmente con mis muñecas y me dejaron sola con mi primo. Él era unos años mayor que yo pero ese día eso no le importó se acercó a mí inició a tocar mi pequeño cuerpo, el miedo ya empezaba a invadir mi ser y en ese momento recibí una amenaza de parte él.

Me dijo que si yo decía algo mataría a mi familia, era yo sólo una niña de 4 años llena de miedo recuerdo como sus manos se paseaban por mi piel, como él besaba mi cuerpo. Exacto ese día mi primo abusó de mí.

Era yo una niña sin maldad alguna pero eso a él no le importó y abusó de mí ¡Me violó!

Así fueron transcurriendo los años con mucho dolor ya que ese día había sido el peor. Ese día el maldito me lastimó.

Después de varios años, la verdad, es que sigo sin comprender como alguien fue capaz de robarle la inocencia a una niña.

Ese fue uno de los días que más me marcó, luego mis padres salieron de la cárcel dos años después mi madre quedó embarazada. Pensé que la felicidad había vuelto a la familia, así fueron pasando los meses y todos esperamos con ansias ese bebé hasta que en el quinto mes de gestación Mi mamá tuvo un aborto. Desde ese día todo volvió a cambiar, mi madre entró en una gran depresión, mi padre se refugiaban el alcohol mis hermanos se fueron al extranjero a buscar un futuro mejor y aquí junto a mis padres me quedé yo.

Fueron varios años de peleas, no soportaba la idea de ver a mi madre encerrada en su cuarto llorando por la pérdida de su bebé. Pero tampoco soportaba ver a mi padre ahogándose en el alcohol.

Ya tenía yo 11 años pero todavía estaba llena de dolor recuerdo que nuevamente mi primo abusó de mí.

Luego creí que conocía el amor pero el niño sólo me engañó. La verdad es que mi único refugio había sido mi mejor amigo se llamaba William, hasta que un día cuando tenía 12 se despidió y me dejó ya que lo asesinaron...

Nuevamente me había quedado sola en el mundo. Mi madre ya estaba cayendo en el vicio del alcohol, mi padre ahora no sólo tomaba sino que tenía muchas amantes las cuales le restregaba a mi madre en la cara. Todo cada día era más difícil no sabía cómo sobrellevar esta situación fue ahí en el momento en el que tome la decisión de iniciar a cortarme con el fin de suicidarme.

Después de eso me enamoré de un chico y él me engañó fue ahí cuando tuve mi primer intento de suicidio el cual falló, a los meses mi vis-abuela falleció

Fue un golpe demasiado duro y fue ahí cuando por segunda vez intenté suicidarme pero esta vez logré llegar al hospital, mi vida era un poco extraña mis padres al ver mis intentos de suicidio no reaccionaban de ninguna manera, luego del segundo suicidio me volví una persona solitaria. Una persona que simplemente se refugiaban los libros, una persona que pasaba todo el día con suéter para poder esconder esas heridas que demostraban lo débil que era.

Luego nuevamente perdí algo que amaba mi tío falleció. Sí ahora tengo 15 años puede que para algunos mi vida no sea nada dolorosa pero quizá para otras personas sí lo sea porque sumando todos estos problemas mi padre engañaba cada vez más a mi madre hasta que un día mi mamá los encontró y él nos abandonó. Fue bastante doloroso saber qué sólo quedamos mamá y yo.

Siempre había sabido que mis hermanos estaban en el extranjero. Pero todo sin ellos era más doloroso.

Muchas veces he intentado suicidarme porque sólo la tengo a ella podrán decir de qué es egoísta de mi parte querer morirme yo y dejar a mi madre sola pero sé que ella tiene otros hijos. Sé que para ella no será fácil asimilar la pérdida de otra hija Pero siempre he esperado o he creído que con la ayuda de mis hermanos puedo superarlo porque a veces siento que este maldito dolor no me deja en paz. Mi vida hasta hoy a sido una mierda.

Las lágrimas brotaban sobre mis mejillas, el dolor estaba a flor de piel así que decidí sacar mis navajas y nuevamente las inicie a pasar por mis piernas, sentí el ardor pasar una y otra vez y dejé de cortarme hasta que logré calmarme.

Me dirigí hacia mi habitación a darme un baño, luego de hacerlo me coloque una pijama y me acosté a escuchar música a los minutos recibí un mensaje de Enrique bastante preocupado porque no me había reportado.

Enrique: hola nena estoy preocupado hoy en todo el día no te has reportado escríbeme cuando puedas por favor.

Rachell: Hola Enrique Pues no te miento no estoy nada bien mi, mamá tuvo un accidente en casa y está en el hospital ingresada.

Enrique: mi niña cuánto lo siento pero ¿ella está bien? ¿ cómo sigue?

Rachell: No te preocupes, y pues sí ya está bastante bien.

Enrique: ¿Estas tu sola en el hospital mi niña?

Rachell: no, mis hermanos que están en el extranjero tomaron un vuelo hacia acá ahora ellos están en el hospital y yo estoy en casa intentando descansar porque no me siento nada bien.

Enrique: bueno princesa entonces te dejó descansar pero ten presente que te quiero y si necesitas algo aquí estoy para ti disponible no dudes en buscarme.

Rachell: está bien si necesito algo te aviso.

Enrique: te quiero demasiado mi princesa no dudes que estoy aquí para ti por qué lo que yo quiero contigo va en serio.

Rachell: Muchas gracias, en serio pero creo que es momento que me vaya a descansar.

Enrique: ok amor ve a descansar Te quiero mucho no lo olvides Bye bye.

En ese momento el sueño invadía mi ser ya que llevaba varios días sin poder dormir bien, creo que esta noche sería diferente y si podría dormir. Y así fue como en un abrir y cerrar de ojos me quedé dormida.