Esta mañana amanecí con una tierna sonrisa, a pesar de el dolor que me causaba estar enamorada de mi primer amigo.
Era bastante tonto porque yo lo amo y el me ve como su amiga o al menos eso decía el.
Besé a mi mama y por primera vez en mucho tiempo, y desayune algo junto a mamá.
Esta mañana fue distinta a muchas, incluso mi madre me llevo hacía el colegio.
Cuando llegamos me despedí de ella con un beso y un te amo.
A la entrada de el colegio ahí estaba el Jeffrey esperándome
—Hola nena ¿Como amenceciste? —pregunto.
—Mejor que tu supongo —respondí.
—La verdad si no he podido dormir bien —admitio.
—Jajaja te ves tan gracioso, pero vámonos feo que tenemos clase —dije entre risas.
Nos fuimos directo al salón y tomamos nuestros asientos.
En ese momento entró Alisson con sus antipáticas amigas, dirigió su mirada hacia nosotros pero simplemente la ignoramos.
La maestra entro al salón y nos dicto las preguntas, de un laboratorio sorpresa cuando ella termino de dictar yo inicie a responder las preguntas. Termine bastante rápido y decidí pasarle las respuestas a Jeffrey quien no había hecho nada.
Terminamos y iniciamos a platicar, el inicio a jugar con mi cabello reíamos hasta morir hasta que hubo un momento que la profesora salió de el salón. Nosotros seguíamos sonriendo pero luego se acercó Angel. El que había sido el mejor amigo de Jeffrey.
—Imbécil. ¿porque tan feliz? —pregunto Angel.
—Sigue tu camino animal —respondio.
—Jajaja ¡Uy! ya reacciono el estúpido —dijo.
—Escuchame bien imbécil largate, no tienes nada que hacer aquí vete con tus otros amigos ¡Maldito media neurona! —dijo Jeffrey molesto.
—Jajaja largate tu imbécil, vete con el adefesio este jajaja —dijo con tono burlón.
—Ya Jeffrey vámonos —suplique.
—¡Ya Rachell! Tu normalmente huyes, pero eso no va conmigo aprende a enfrentar a la gente —Me dijo exaltado.
En ese momento mis ojos se empezaban a llenar de lágrimas.
—Gracias —dije con voz entre cortada y sin esperar más salí corriendo hasta el parqué.
—¡Buenaleeeee! Lastimaste a la cosa fea jajaja —dijo Angel muerto de la risa.
—¡Ya cállate maldito! —le grito Jeffrey a Ángel.
—¿maldito yo? Tu fuiste quien le grito a la fea esa —dijo Ángel sarcásticamente.
—Pudrete pedazo de estiércol —respondio.
Ya estaba yo en el parqué, llorando y pasando las navajas por mis muñecas, sufriendo por fuera y por dentro, queriendo morir en ese instante, saque un cuaderno e inicie a escribir .
"Y son esas veces que todo se vuelve gris, son esos momentos que me derrumban. Son esos momentos que destruyen ni interior. ¡Oh! vida porque te empeñas en lastimarme, estoy cansada de llorar, de amar, de sufrir ... Estoy cansada de la vida"
En ese momento no pude mas y solté un grito, y pues en minutos Jeffrey me encontro.
—Oye hermosa hasta que te encontré estaba preocupado —me dijo.
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el diario de una chica invisible
RomanceEsta es la historia de 2 jóvenes muy distintos que por arte de el destino se vuelven amigos. Ella, alguien llena de cicatrices y con un pasado que la atormenta. El, alguien solitario y lleno de tristeza. El, por su parte quiere sanar las heridas de...