el diario de una chica invisible

Abuso.

Han pasado ya más de 3 meses.

Las cosas han cambiado para bien hasta cierto punto Alejandra dejó de hablarme por 2 semanas hasta que por fin me perdonó eso me hizo realmente feliz.

Todo este tiempo estuve yendo a el consultorio de Lorena por mis terapias las cuales me han ayudado mucho pero ya no voy porque Lorena se tuvo que ir del país por problemas familiares y nadie me inspira confianza como ella aunque todavía seguimos en contacto, la relación entre mi padre y yo ha mejorado desde que el emprendió un vuelo a Italia para una vida mejor, mis hermanos están viviendo en casa del todo eso llena de alegría a mi madre.

Yo por mi parte todo este tiempo he estado escribiendo en mi diario ya lo llevó bastante avanzado, muchas noches he extrañado a Jeffrey pero me he negado a buscarlo.

En este tiempo me lo he encontrado en mi camino muchísimas veces pero le apartó la mirada. Estoy intentando olvidarlo a toda costa y espero lograrlo.

También en este tiempo he hecho más amigos, los cuales son Luis, Ezra, Marcela y Cristián ellos me han ayudado en gran manera son un grupo de personas excepcionales.

Luis es un chico muy inteligente, buen amigo, gracioso y sobretodo sincero.

Ezra sabe ser muy buen amigo y siempre está para mi.

Marcela es una chica linda con una manera de ser muy tierna .

Y Cristián siempre está cuando lo necesito.

En fin son un grupo de amigos los cuales me han enseñado lo bonito de la vida aunque a Cristián y Marcela casi no los veo los quiero mucho y en el caso de Luis y Ezra son mis compañeros de clase y pues gracias a ellos estos meses han sido llevaderos.

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Esta mañana me desperté con una hermosa sonrisa en mi rostro.

No tenía motivo mayor para ser feliz pero después de mucho tiempo de dolor una sonrisa adornaba mi rostro.

Me levanté me di un baño luego elegí un pantalón blanco, una blusa azul y unos Converse luego en mi cabello no hice mayor cosa que peinarlo y dejarlo suelto.

Bajé a desayunar con mis hermanos, luego de eso subí a mi habitación a lavarme los dientes, recogí mi mochila, me despedí de mis hermanos y tome camino hacía el colegio con el objetivo de tener un buen futuro y decidida a que hoy sería un excelente día.

Al llegar al colegio me encontré con Ale así que pasamos todas las clases de la mañana juntas. No paso mayor cosa interesante.

El timbre sonó en señal de que era hora de volver a casa así que me despedí de Ale rápidamente porque tenía que ir a recoger unas cosas a casa de mí prima Melissa.

Tomé camino hacía la casa de mi prima y me tope con la sorpresa que mis sobrinas Camila y Celeste estaban solas. Así que mientras llegaba mi prima o su pareja decidí quedarme con ellas cuidándolas.

Vimos una película llamada la princesa y el sapo luego de eso fuimos a pasar la tarde al parque. Fue la mejor tarde que yo había tenido en mucho tiempo.

El día se nos escurrió como agua entre los dedos. Se nos hacía tarde así que las niñas y yo nos fuimos a su casa de nuevo.

Al llegar mis sobrinas querían ir a jugar donde la vecina y su padre les dio permiso entonces yo tuve que entrar sola a la casa ya que tenía que recoger unas cosas.

—¿Me podrías dar las cosas? —le dije a Sebastián la pareja de mi prima.

—Siéntate nena podemos pasar un rato muy lindo.