Capítulo 12. -Hay muerte a la vuelta de la esquina

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PRETTYFACE estaba frente a mis narices con su máscara, y vestido de negro.

Cuando reaccioné, salí corriendo a casa de Liam. No podía tocar, no me arriesgaría a que lo hiriera.

Di la vuelta y entré por la parte trasera, que daba con la cocina.

Me encontraba dando pasos lentos, tratando de no hacer ruido. Tomé el bate de béisbol de Liam que estaba en la sala y caminé hasta su habitación.

Abrí la puerta y nadie se encontraba dentro. Antes de darme cuenta sentí la mano de alguien en mi espalda.

Con el bate en manos, me giré rápidamente en modo de alerta.

—¡Dios!, ¿Planeabas volarme la cabeza?—Liam estaba bien, se encontraba en una toalla.

Bajé el bate al instante.

—¿Estás bien? Pensé haber visto a alguien aquí dentro.

—Sí, estoy bien. No he visto a nadie más en esta casa a parte de ti.

—Creo que estoy algo nerviosa.

—Te entiendo, te han sucedido muchas cosas.

—Está bien, todos deben parar de decir eso.

—Oye, está bien, todo está bien.

Liam tomó mi rostro entre sus manos, haciéndome sentir protegida. Por un largo tiempo no había tenido esa sensación.

—Me tengo que ir, he faltado toda la semana al instituto. Me graduaré el sábado, no puedo seguir así.

—Hey, ¿No es tu baile de graduación el viernes?

—Sí, ¿Por qué?—ya sabía por donde iba esto.

—Pensé que podía llevarte yo.

Realmente eso era lo que deseaba, pero Frank estaba por el otro lado. Ya me lo había pedido anteriormente.

—Quiero ir contigo, de verdad.

—Pero...

—Pero, ya fui invitada. Este chico es un gran amigo, y no quiero dejarlo solo.

—¿Prometes que son solo amigos?

—¿Qué somos nosotros?

—Eh, creo que somos algo así como novios—¿Novios? Mucho tiempo ha pasado desde que uno de esos entró a mi vida.

—¿Algo así? Creo que no quiero solo algo así.

—Bien, entonces somos novios.

Mis labios se quemaron por el beso que me dió seguidamente. Este chico sí que me encendía.

—Que pases un buen día.

—Igualmente.

Me fui de casa de Liam a la mía, y tomé las llaves del auto.

—¿Nikkie?, ¿Te quedaste aquí?

—Sí, no debí haberlo hecho.

—Espera, quiero hablarte sobre algo.

—Bien, hazlo rápido. Llegaré tarde.

—Nik, desde que eras una niña siempre he querido verte con tu vestido para el baile de graduación. Pero si seguimos así no podré hacerlo, no te estoy pidiendo que me perdones, solo quiero poder verte ese día. Por favor, es todo lo que quiero.

Aunque quisiera, no podía negarle eso a mi padre.

—Está bien, pero eso no significa que todo volverá a ser como era antes.

PRETTY FACE ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora