33.- Ya llego por quien llorabas.

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  ❤゜゜・* 33 *・゜゜*❤  

―¿Qué tal durmieron? ―pregunto la abuela de Adam con una sonrisa mientras todos desayunábamos en la misma mesa que el día anterior.

Mis mejillas las sentí arder y quería ocultarme debajo la mesa en ese preciso momento.

―Bastante bien ―respondió Adam mirándome con una sonrisa pícara, desvié la mirada hacia mi bol de cereal y tome una gran cuchara de este ―En realidad, casi ni dormimos ―y así hice un escupitajo al mismo señor de la anterior vez solo que esta vez lo llene de leche y unas hojuelas. Rápidamente un camarero se acercó para ayudarlo.

―Yo-yo- yo lo lamento tanto ―me disculpe rápidamente, el señor me miro con una ceja arqueada mientras Adam se reía y los chicos nos miraban extrañados.

Antes de que malinterpreten la situación y que en sus sucias cabecitas se les este formando una película, les digo que no dormimos porque toda la noche nos la pasamos jugando juegos de mesa...

¿A quién quiero engañar?

¡Al diablo todo! ¡Ya no soy virgen!

Pero ni crean que les contare lo que paso anoche. Prefiero que se lo imaginen o explotare si se los cuento.

Volviendo a la realidad...

Una vez que todos entendieron las palabras de Adam, muchos tenían una expresión de indignación otros estaban sorprendidos y otros se veían en una mezcla de risas y sorpresa como Emmet, Regina, Chloe y Lindy. A quien recién veo esta mañana, se la veía mucho mejor que antes.

Mire con temor hacia el rostro del abuelo de Adam y este le guiñaba el ojo a Adam, yo enserio pensaba en mudarme a Antártica.

―Bueno... dejando eso de lado ―interrumpió el abuelo de Adam ―llamamos a tus padres ayer Lilly ¡Vendrán para la boda! ―dijo emocionado, yo por otro lado estaba bebiendo mi jugo de manzana pero tal noticia hizo que hiciera otro escupitajo y ¿Adivinen a quien le llego?

―Enserio lo lamento tanto ―repetí al señor que se sentaba delante mío, este me miro enojado y se paró de la mesa.

―Me iré a sentar a otro lado ―hizo una reverencia hacia el abuelo de Adam y se fue a sentar como a veinte personas más lejos de mí.

Que exagerado.

―¿Dónde quieren que sea la fiesta? ―Pregunto el abuelo de Adam ―Podemos hacerlo en los jardines con el hermoso atardecer y ¿Quieren alguna banda para su primera canción?

―También hay que hablar del vestido ¿Lilly trajiste alguno? ―pregunto la abuela de Adam, yo no podía ir con tantas preguntas, cada vez me sentía más agobiada y me levante de mi silla.

―Me retirare un momento por favor ―pedí y mire a Adam para que este me acompañara.

Ambos caminamos lejos de ahí hasta estar solos en el jardín.

―Adam, me dijiste que vendría como tu prometida y ahora ¡¿Nos casaremos?! Si no te diste cuenta, soy muy joven, mis padres seguro les dio un paro cardiaco y ahora vendrán a terminar esto y me enviaran a un internado y estaré castigada de por vida y luego...―No pude continuar con mi queja porque Adam me besaba, perfecto. El conocía mi punto débil, sabía que me el que el haga eso, me calmaba como pero esta situación no podía entrar en calma por lo que lo empuje suavemente.

Adam entendió y paso un brazo por su cabello.

―Mira, yo tampoco me la esperaba―dijo Adam aun que era difícil de creerle por que se veía muy tranquilo. Arqueé una ceja y cruce mis brazos ―Bueno a decir verdad mi abuelo lo tenía planeado ya desde hace un tiempo y no sabía cómo decírtelo.

Stupid Love LetterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora