Sólo Sexo |Fanfic 1°| [Raura]

Cap 13: Dios Del Sexo.

Al decir aquello, mi corazón aleteo con fuerza, temiendo a que se escape de mi pecho; como una frágil mariposa.

En los ojos del rubio se nota a simple vista; el deseo, la lujuria. Sus pupilas cada vez mas dilatadas, lo hacen verse diferente, intimidante.

Se acerca a mi, descartando cada vez mas distancia entre los dos, y mezclando nuestras respiraciones que se encuentran al borde en este momento.

Toma mi mano, cortante e inseguro antes de obligarme a ponerme de pie.

Me mira con fijeza y se acerca, poco a poco hacia mi, sus ojos negros al borde de la excitación, su respiración agitada y aun con su traje puesto.

Cuando está frente a mi sus manos se dirigen a mi cintura, y sus labios se acercan al lateral de mi nuca. Sus manos comienzan a descender hacia mi trasero, provocándome un espasmo de puro placer.

Ladeo un poco mi cabeza cerrando mis ojos para darle mas acceso a sus labios sobre mi nuca, para luego besar mi cuello y succionar levemente mi garganta.

Segundos después se separa y su mano, posada en mi espalda me guía hacia la salida, supongo que en busca de una habitación.

Abre una de las puertas que se encuentran en los pasillos, y nos adentramos a esta en total silencio. Sin notarlo, soy pegada a la pared bruscamente, sin hacerme mucho estrago.

Rápidamente lo siento, a el, adherirse contra mi, y de inmediato, ahí esta... Su bombillo encendido, corrección; Su pene encendido, el cual siento contra mi feminidad, causandome una sensación de placer inocentemente excitante.

Gimo levemente y hago la pregunta que me ha estado atormentando desde que llegue;

-¿Perderé mi empleo?-mi voz sale ronca y a la vez columpiándose en un pequeño y delgado hilo.

Lynch quita sus labios de mi cuello y me mira, asombrado y desesperado a la vez.

-La verdad, no. Pero ¿Cómo se le ocurre preguntar eso a estas alturas?-su voz es ronca y desesperada.

Mis hombros se alzan en un gesto de; no lo se.

Cuando se va acercando para besar mi cuello lo detengo.

-Alto.-digo y mi respiración es agitada y mi voz irreconocible.-¿Está seguro de lo que me esta diciendo? ¿Sin importar que tan mala sea en la cama?
Ni siq...

-Oh, vamos. ¿Acaso no ve como me tiene?-replico con todo tedioso, tajante.

Agarra mi mano rápidamente y la coloca sobre el bulto de su entrepierna; tibia y alzada.

-Ahora, si no le molesta, sigamos, ya me empieza a doler.-se que se refiere a su pene, el cual no para de crecer.

Me sonrojo y agradezco la oscuridad.

Su tono de voz fue desesperado y doloroso, como si en verdad le doliera, sin embargo, estaba emocionada, aun seguía con mi mano en su miembro. ¡Mamma mía! Jack nunca me dejo hacer esto.

Quite mi mano con pesar, para luego, volver a sentir su lengua en mi cuello y su miembro presionando de nuevo, mi feminidad.

Desesperados, nos volteamos, quedando yo de espaldas hacia la cama. Caminando el, guiando
mis pasos hacia atrás, me deja caer en la suave textura del colchón.

Podia notar como mi cabello caía por las almohadas y mi vestido rosa regado hacia los lados. Me sentía frágil y vulnerable contra el, pero a la vez, mi estomago danzaba feliz, por la sensación de tenerlo cerca y con ganas de tocarme.

Me miro por unos segundos y luego procedió a descartar sus zapatos, para colocarse sobre mi. Sus rodillas se posaron a los lados de mis piernas y me hizo sentarme, lo obedecí.