Subo el cierre de mi cazadora hasta mi cuello. Exhalo aire hacia mis manos para brindarles algo de calor. Meto mis manos en los bolsillos de la gabardina.
Pequeñas gotas caen del cielo. Una fuerte lluvia había empapado a todo New York. Para no mojarme tuve que socorrer a una pastelería. Se puede decir que hacen unos panes dulces bien sabrosos.
Ya habían pasado como dos o tres horas, desde que salí de Lynch Corporations. Habíamos quedado en que me llamarían. Es una empresa muy grande, tal vez tarden unas semanas en llamarme. A quien engano? estoy asustada, esa respuesta de que te llamaran luego no significa nada nuevo.
El sonido del agua navegando por las alcantarillas retumbaba por los callejones, causandome un espeluznante escalofrío. Me estremeci.
Pase frente a un bar, donde el olor a cigarrillos y alcohol se hizo presente.
Arrugo mi nariz.
Las calles estan congestionadas de vehículos, puedo oír los neumáticos rechinar contra el asfalto.
Cruzo a la izquierda. Tengo en frente la puerta de cristal del lugar en donde me hospedo.
La puerta es abierta por el portero, quien me saluda.
-Buenos noches.-me saludo el portero.
-Buenos noches.-le devuelvo el saludo. Sonrio.
Camino hacia la recepción.
-Buenas noches.-pregunta la mujer que se encuentra detras del mostrador. Al parecer es nueva.
Su cabello es de un color rojizo, rodea la edad de unos 22 o 26 años. Sus ojos son marrones chocolates como los mios, aunque los de ella un tanto mas claro. Su nariz es algo ancha y sus labios muy finitos. Su rostro esta bien perfilado.
Viste con el uniforme del hotel, el cual es un vestido entubado hasta las rodillas. Es vinotinto y a un lado del pecho derecho se encuentra la insignia del hotel bordada en un color amarillo chillón.
-Buenas noches.-sonrio y hablo con amabilidad.
-¿Usted es?-me pregunta inclinándose un poco hacia mi.
-Marano Laura.-respondo.
Una sonrisa involuntaria se escapa de mis labios, recordando aquel día en el evento con el Señor Lynch.
La recepcionista con sus labios sellados imita una clase de sumbido.
-Bien, aqui esta.-extiende su mano para yo tomar la llave. La tomo.
-Gracias.
-Que tenga buenas noches.-articula la recepcionista.
-Igualmente...-miro su placa que se encuentra en el lado izquierdo de su pecho.-Nicky.
Ella sonríe.
Camino hacia el ascensor. Hundo mi dedo en el botón que se encuentra a un lado del marco. Pasados unos segundos el ascensor ya esta en recepción con sus puertas abiertas. El poco aire que hay adentro de la caja metálica me envuelve. Me adentro al ascensor y observo los botones que se encuentran al costado derecho del metal. Encuentro el botón que tiene marcado 35 en el centro y lo presiono. Empiezo a contar los pisos hasta llegar.
1,2,3...7,8,9...14,15,16...21,22,23...27,28,29...32,33,34. El ascensor se abre dejando ver la puerta de mi habitaciones que se encuentra a unos metros de mi. Camino los metros que me faltan, para sacar las llaves e incrustarlas en las rejillas de la cerradura. Doy dos pases a la derechera, a continuación esta se abre.
Al entrar la habitación siento un perfecto aire cálido, lo que me hace suspirar de encanto, ya que afuera hacia un frío infernal.
Tiro mi bolso sobre la cama, para luego, yo, imitar su accionar.
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Sólo Sexo |Fanfic 1°| [Raura]
Любовные романы-¿Solo sexo?-pregunte, inocente. No sabia lo que me esperaba. -Solo Sexo.-afirmo el, seguro de si mismo. Aun sus manos sujetaban mi mentón. ********************************** ADVERTENCIA: No me hago cargo de traumas o problemas personales. Leen esto...