ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 38

5.1K 396 29
                                    

-ᴀʀɴᴀᴜ-

DANTE

Se me había hecho una costumbre verdaderamente terrible quedarme gran parte de la noche mirando tras mi ventana sin poder dormir.

Siempre me preguntaba si Loreley estaría pensando en mí de la manera en la que lo hacía yo, si ella tampoco dormía o si estaba con Samael.

Amelia y yo nos mantuvimos en contacto por si Loreley daba señales de vida y nadie tenía idea de alguna dirección ni de un teléfono al cual comunicarse.

Cada día sentía que perdía un cachito de mi corazón y de mi alma, pasaban días sin probar bocado, estaba un poco descuidado y mi casa era un asco.

Tal vez hubiera caído en depresión si no hubiera hecho mis salidas constantes para visitar a Trudy y a las gemelas que, a pesar de ser tan pequeñitas, parecían saber quién era yo.

Ese día no sería la excepción.

Faltaba un día para noche buena y se irían a casa de mis padres para festejar, estaba a punto de irme a verlas cuando constantes golpes se escucharon chocar contra mi puerta, seguido de la voz de Amelia.

―¡Dante! ―insistía ella―. ¡Esto es importante!

Corrí a abrir la puerta vislumbrando mis ultimas esperanzas si no recibía noticias de Loreley.

Amelia entro corriendo con el pijama puesto y en su mano traían una carta.

―¿Es..., es de ella? ―la voz, mis manos, mi corazón, todo mi cuerpo temblaba.

―Casi ―Amelia extendió la mano con el sobre, leí la parte del remitente.

―¿Arnau? ―Amelia me miraba con ojos esperanzadores.

―Es su hermano.

―¿Tiene un hermano? ―estos eran los momentos en los que me sorprendía de amarla tanto cuando en realidad sabía muy poco sobre su vida y aun así, me había atrevido a juzgarla.

―Sí, es menor que ella..., pero eso no importa ahora. ¿A caso no lo ves? Tal vez ella está ahí, donde dice la dirección, esta con su hermano y sus padres.

Saqué un suspiro de tranquilidad y noté que la guapa morena no había podido resistir y ya estaba llorando.

La chica limpió su llanto y me miró.

―¿Y...? Apresúrate, abre la carta tal vez traiga información importante.

Amelia me arrebató la carta y sin pena ni gloria abrió el sobre y comenzó a leerla:

Loreley:

Primero que nada, espero que estés bien, que la carta no haya tardado en llegar y esas cosas.

Sobre tu pregunta, claro que me gustaría ir a pasar las fiestas contigo y en la ciudad ¡Es genial!

Espero que al fin pueda conocer a Amelia y por cierto mándale saludos, dile que la vi modelando en la revista de moda que compra mamá.

Por otra parte, también espero conocer en persona a Dante, por lo que me cuentas creo que es un chico genial. Por cierto ¿Ya cerraron el trato? Quiero un sobrino pronto, sería una buena excusa para estar en la ciudad más seguido.

Ja,ja,ja, estoy bromeando.

Pasando a otros asuntos ¿Está segura de decirle lo del idiota de tu ex? A mí me daría un poco de miedo, pero estoy seguro que Dante lo comprenderá ¡Adelante!

Dante entre pacto y éxtasisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora