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-Hola... -Louis dejo su bicicleta en el césped, sus mejillas se pusieron rojas de los nervios y tapo sus pequeñas manos con lo largo de la manga de su suéter. -Soy Louis.

Harry lo miro de pies a cabeza. -Tú... tú eres el tipo que me encontré ese día en la escuela, eras tú.

-Sí... -rasco su nuca nervioso. -¿Puedo sentarme?

-Claro.

Harry se hizo a un lado y Louis tomó asiento. -Ya estamos aquí y no quiero que rompas mi cara.

-No lo haré. -Harry negó mirándolo aun. -Bueno... ¿Me ayudaras?

-Comienza, que la gente esta saliendo de este lugar y nos quedaremos solos y me da miedo este lugar. -volteo por todo el lugar y ya quedaba poca gente. -¿Porqué me citaste tan noche?

-En la tarde estoy ocupado, hago tarea y estudio un poco.

-Chico inteligente ¿Ah? -le guiño el ojo.

-Todos somos inteligentes pero hay gente que no desarrolla esa parte y la deja dormida ¿Eres inteligente?

-Sí, dijiste que todos somos inteligentes, de igual forma me gusta estudiar, hacer tarea y poner bastante atención en clase.

-¿Seguro? Yo recuerdo que una vez me hablaste en plenas clases y no creo que salgas tan temprano al receso.

-Oh... esa vez. -mordió su labio nervioso. -No era yo.

-¿Qué? Como que no eras tu?

-Era Niall, quería hablar contigo.

-Y yo pensé que tú... que pena, no. -tapo su cara y Louis empezó a reír. -¡Que vergüenza!

-No te preocupes no me molesto, fue Niall y pues yo tuve que dar la cara obviamente.

-Te quiero preguntar algo. -comento Harry.

-Bien, dime.

-¿Te gusta Niall? -Louis estaba muy indignado con esa pregunta y Harry vio su cara y lo intento arreglar. -Bueno es que tú y él... no sé, tu lo proteges tanto y haces tantas cosas por él que tal vez sientes amor pero te resignas y pues la única cosa que te queda es ayudarlo para que sea feliz, es lo que pienso.

-No. -negó indignado. -No me gusta, es mi amigo y lo quiero bastante como un hermano, por el momento no he encontrado a nadie y ni me interesa buscar a alguien.

-La primera respuesta que me hubiera dicho alguien hubiera sido. -hizo la voz aguda. -No soy gay, no homo. -Louis rió.

-No soy una persona que se avergüence de su orientación sexual, sí, siento un noventa por ciento atracción por hombres pero es algo difícil encontrar alguien que me guste, no sé, siento que todos son ¿Iguales? hablo en forma de ser y que sólo piensan en tener sexo y quiero a alguien que me tenga en sus brazos todo el tiempo y sea un relación linda y obvio con sus desacuerdos porque toda relación lo tiene pero aun no encuentro a alguien así y de mujeres pues... tiene que ser exactamente la que pienso y ninguna chica es como la que imagino y casi no me llaman la atención.

-Eres un chico imposible ¿Eh?

-No, pero soy muy estricto en una relación todos los que he tenido los trato mal y los dejo a la semana por eso te digo que no encuentro a nadie. -se encogió de hombros. -Pero prefiero estar soltero.

-De echo, pero yo siento cosas por Niall así que no estaré soltero.

-Genial, y ya para empezar dime que quieres hacer para regresar con Niall.

-Necesito que me digas como ha estado, si le gusta otro hombre. -se quedo callado pensando en lo que le había dicho su madre. -Mi mamá me dijo que hablara con él que le diera una oportunidad, me sorprendí porque ella no es de esos pensamientos pero al final me dijo que no todos son como mi padre y tal vez Niall sea diferente.

-Mira te diré, él te ama demasiado, te extraña bastante y cuando te recuerda llora por ti siempre, a veces no come y ya no ha visto a ningún chico, estoy todos los días con él en el receso y obvio se lo que hace porque todo me lo cuenta.

-¿Me sigue amando? -Harry sonrío cabizbajo.

-Sí. -Louis puso su mano en el hombro de Harry. -Deberías de darle una oportunidad, como dijo tu mamá no todos son como tu padre y no quiero que te enfrasques en una mentalidad de que todos los hombres son así, no todos somos así.

-Tienes razón, le daré una oportunidad, sólo una.

-Eso es estupendo. -Louis estaba feliz, por fin iba a estar tranquilo sin responsabilidad alguna.

-Gracias, amigo. -se dieron la mano y la agitaron mientras se sonreían después de que se separaron, Harry miro su reloj. -Es tarde, me tengo que ir.

-Son las nueve... ¿En que te vas a ir?

-En taxi.

-¿No quieres que te lleve en mi bicicleta?

-¿Quieres que muera? -rió. -Gracias por tu invitación, pero le tengo un poco de temor a las bicicletas, la ultima vez que me subí me caí en plena carretera, gracias a dios no venia ningún coche.

-Esta bien. -le sonrío. -Adiós, Harry. -se despidieron con un saludo y Louis se fue a su casa con su bicicleta y Harry tomó un taxi y se fueron a sus casas.


Inesperado Amor ➵ Larry Stylinson. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora