Dos días después
-Ya está dormida. -Le informó, saliendo de la habitación de su amiga. Kate asintió y lo acompañó hasta la sala.
-Toma -le ofreció un sobre igual que el de hacía dos noches. -Es el dinero que faltaba. Si es más, dímelo y te lo devolveré.
Castle aceptó el sobre enfadado. Miró, por encima, cuánto dinero había. -Con esto está todo.
-Bien.
-Si piensas que con esto te voy a perdonar, estás muy equivocada. -Espetó.
-No lo hago por eso. Solo no quiero deberte nada.
-Ya... -ironizó. -Seguro. ¿De dónde has sacado el dinero? ¿Se lo has pedido a otro?
-¿Qué? ¡Claro que no!
-Seguro...
-¡Yo nunca estuve contigo por dinero! -Rick rio. -No sé cómo puedes pensar eso de mí.
-¿Y qué quieres que piense? Pero si tú piensas que porque me hayas devuelto el dinero y utilices a Sophie para que me diga que lloras y todo eso... ¡No me vas a dar pena!
-¿Qué? ¡Yo no utilizó a mi hija ni quiero darte pena!
-Ya...
-Si vas a seguir por ahí, ¡vete! -lo empujó. -¡Qué te vayas! -El escritor se dio la vuelta y se fue, mordiéndose la lengua.
XXX
Miércoles 10 de diciembre
-No te preocupes, mamá. Tú tan solo preocúpate de seguir pasándolo bien con papá. Sí, estoy bien. Claro. Adiós. Te quiero. -Kate colgó el teléfono y lo dejó encima de mueble del baño, antes de meterse en la ducha.
Estaba a punto de entrar a bañarse cuando el sonido del teléfono, la había interrumpido.
Se sentía mareada. El cansancio que había ido acumulando, hacía que se sintiera pesada. Le dolía la cabeza por no dormir lo suficiente. El calor del agua junto al vapor concentrado en el baño, estaba provocando que cada vez se sintiese peor. Como pudo, salió de la placa de ducha y se secó sin demasiado esmero, colocándose la ropa interior luego.
El pantalón de pijama se le cayó de las manos al cogerlo y al agacharse, sintió que todo le daba vueltas y un dolor agudo en su sien. Se llevó la mano a la frente, justo donde el dolor era más intenso. Se ayudó de los azulejos para ponerse en pie, pero al estar mojados por el vapor, resbaló. Con tan mala suerte, que su cabeza se golpeó contra el bidet fuertemente.
Sophie, caminada por el pasillo de su casa, hablando por el walkie, que Rick le había regalado, con éste. Castle, que acababa de salir de una reunión con el grupo de teatro de su madre, iba de camino hasta su coche mientras bromeaba con su amiga para intentar olvidar todas las emociones que había sentido minutos atrás.
La niña, que iba en busca de su mamá para que la llevase al parque, entraba por la puerta del cuarto de su madre, cuando escuchó el golpe.
Sus pies se movieron más deprisa hasta el baño y lo que vio al abrir la puerta, hizo que gritara, asustando así a su amigo.
-¿Qué ha pasado, Sophie? ¿Sophie? -la llamaba Castle al no tener respuesta.
Con el aparato en la mano, la pequeña, salió corriendo hacia el cuerpo tirado en el suelo de Kate.
-Mami, mami -Sophie empujaba el hombro de su madre para hacer más intenso su llamada. Pero Beckett no contestaba. -¡Ah! -gritó asustada cuando sus dedos se mancharon con el líquido rojo que brotaba de la frente de su madre.
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Que bonita la vida
FanfictionAyer estuve leyendo Un libro y se me ocurrió esto, no sé si os gustara, hay Pequeñas partes del libro Integradas en la Historia. Lo siento, continuo el médico- pero ya no hay nada que hacer. Seré sincero, no le queda mucho tiempo de vida. / - Y dón...