Me despierto antes de que mi hermanito lo haga, salgo de la habitación y camino al baño una ves dentro me lavo la cara, cepillo mis dientes al verme al espejo mi largo cabello teñido de rojo estaba desordenado por lo que procedí a "peinarlo" con los dedos. Salgo del baño y bajo al primer piso y logro escuchar a Joy platicando con su madre así que me me dirijo a la cocina que es de donde aparentemente proviene el sonido de la voz de Joy y su mamá. Antes de entrar me detuve a escuchar junto al arco para saber si interrumpía algo importante.
—Joy, ¿puedo hablar contigo?— dije entrando a la cocina, después de haber oído que platicaban de maquillaje.
—De acuerdo.
—Pero a solas— su madre me culminaba con la mirada, seguramente se debió a que me encontraba en bóxer y camiseta de manga corta.
—Vuelvo en un momento— se dirigió hacia su madre, al mismo tiempo que se ponía de pie.
Joy y yo nos dirigimos al patio trasero de la casa y una ves que nos encontramos completamente solos ella muy enojada me pregunta.
—Me puedes decir de una vez ¿que es lo que quieres ahora?
—Te quiero explicar la razón del beso.
—¡Aaaaah!, se trata de eso.
—Si, solo quiero que sepas que lo hice por celos.
—Jaja ¿enserio?, no te creo nada de nada chamaco.
—Joy, entonces tu me puedes explicar porque tu y mi hermano se estaban besando.
—Eso a ti no te interesa.
—Si no me interesara, no te estaría preguntando ¿no lo crees Joy?— logre callarle y que se sonroje con eso.
—Cierto— ladeo la cabeza levemente—, pero de igualmente no te diré nada.
—Bueno, no quería hablar de eso.
—¿Entonces Mateo?— pregunto cansada.
—Tadeo quiere que seas su novia.
—Jaja, no es cierto.
—Pero, ¿por qué dices eso?
—Tu mismo me dijiste que el no me amaba, ¿se te olvido? o fue que nunca lo dijo— se cruza de brazos y me ve fijamente.
Evito el contacto visual y comienzo a reír por nervios—Sobre eso— Calle y agache la cabeza —jamas lo dijo, fue una mentira mía para que el no fuera feliz— tuve admitirlo con mucha pena.
—Pero ¿que hay de mi?, ¿no quieres que sea feliz?
—No al contrario— dije con mis manos cubriendo mi cara —, solo te pido un un gran y ultimo favor— dije tomando nuevamente una postura correcta.
—¿Qué quieres?— dijo un poco interesada.
—Prométeme que platicaras con Tadeo.
—No te lo prometo, te lo juro.
—Gracias, ya puedes regresar con tu mamá.
Estaba por regresar al interior de la casa, cuando Joy me detiene, al darme vuelta ella me abraza fuertemente, lo le habría regresado el gesto de no haber sido porque mis brazos estaban aprisionados por ella, solamente pose me barbilla en su cabeza cuando me suelta susurra un gracias y camina hasta una banca que tenia mi tía cerca de los arboles. Dentro de la casa regrese a la cocina, la cual para ese entonces se encontraba sola, en la mesa se encontraba el plato con cereales de Joy. Procedí a servirme cereal, cuando escucho a Joy despedirse de Monstruo-rita y su madre.
Uno minutos después ella entra en la cocina y desayuna conmigo , nadie menciona ninguna palabra y mucho menos hubo contacto visual directamente, pero cuando voltea a mirarla se veía en su cara una gran sonrisa.
Después del desayuno me dirijo al baño para cambiarme de ropa cuando termine tome camino hacia el cuarto para ver si mi gemelo ya se había despertado, para que fuera y platicara con mi amiga y que por fin puedan ser novios, aunque eso me saque de quicio algunas veces pero tener a Joy como familia no seria tan malo, cuando entro en la habitación que comparto con Tadeo me doy cuenta de que el ya no estaba en la cama, entonces salgo y vuelvo a bajar para sorpresa mía me entero que el y Joy ya son novios, los encuentro besándose como en la telenovelas, por un momento pensé que vomitaría si los seguía observando así que salgo de la casa para ir a un parque que se encontraba cerca del área.
Caminando par las calles me encuentro con una chica de mas o menos mi edad, que estaba tirada en suelo llorando y no dudo en ir a ver si la puedo ayudarle.
—¿Disculpa, te puedo ayudar de alguna manera?
—¿Quien eres?— me pregunto la chica mientras se limpiaba las lagrimas que caían por su rostro.
—Perdón, mi nombre es Ángel Mateo Caliente Sampere, tengo 15 años y estoy pasando las vacaciones con mi tía.
—Mucho gusto, yo soy Isabela Uriarte Sanz, tengo 16 años y acabo de escapar de mi casa— dijo con una sonrisa forzada.
—¡Enserio!— exclame—¿pero ¿porque?
—Lo que pasa es que mi padre nos quiso matar a mi madre y a mi con un incendio.
—¿Pero por qué?— no podía terminar de creer lo que ella me decía.
—El pensaba que mi madre lo engañaba.
—¿Qué quieres decir con pensaba?
—Mi padre medio mato a mi madre a golpes frente a mi, por esa razón he escapado de mi casa— comenzó a llorar de nuevo—, pero antes le prendió fuego a la casa... supongo que lo hizo para disimular su crimen, afortunadamente yo pude salir, pero mi madre no corrió con la misma suerte y ahora ando a mi suerte en las calles.
—No te puedo dejar aquí, acompáñame a la casa de mi tía.
—Pero si mi padre te ve conmigo, tratara de matarte.
—Nada nos ocurrirá, ven conmigo.
—De acuerdo.
Al llegar a la casa, les cuento la historia resumida de Isabela a mi hermano y nueva cuñada (se siente genial decir eso), ellos comprendieron y me ayudaron a tranquilizarla, todavía no se como es que se lo voy a explicar a mi tía, pero de seguro ella tampoco a de querer exponer al peligro a esta pobre muchacha, estuvimos tratando de convencerla para que denunciara a su padre pero ella se negaba y nos decía que es la única familia que le queda, de repente nos damos cuenta de que son las 05:30 p.m, Joy nos había comentado que su madre y nuestra tía regresarían en media hora, no sabíamos que es lo que íbamos hacer con Isabela, entonces se escuchan unas voces en la puerta de la casa.
—¡No puede ser llegaron antes!— dijo Joy.
—¿Que hacemos?— pregunto Tadeo.
—Tengo un plan, Mateo llévala y escóndela en su cuarto mientras pienso en una forma de explicárselo a su tía— comento la novia de mi gemelo.
—Esta bien, sígueme Isabela— la tome del brazo y la guié por la casa hasta el cuarto.
Le pido que se quede en ese lugar y si quería que se recostara en mi cama, que yo volvería con ella mas tarde, ella estuvo de acuerdo y me retire del lugar tratando de aparentar que solo fui a buscar algo, pero al parecer algo salio mal en nuestro plan.
—¿Qué esconden?— pregunto la madre de Joy.
—Si es extraño que todo este tan tranquilo— insinuó Monstruo-rita.
Hubo un silencio enorme por nuestra parte, ninguno de los tres sabia que decir.
—Nada— menciono Tadeo intentando disimular naturalidad.
—¿Entonces por qué actúan de esa manera?— pregunta Margarita.
—Lo que pasa es que Joy y Tadeo ya son novios— dije antes de que nos descubrieran.
—¡¿Enserio?!— preguntaron la dos al mismo tiempo.
Ellos lo confirman con un beso y las dos amigas estallan en un grito de aficionadas, por esta ocasión nos salvamos por poco, pero puede que no tengamos mas oportunidades como esta.
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Vida En La Preparatoria.
Ficção AdolescenteVida En La Preparatoria. Esta historia cuenta la vida de un joven adolescente de tan solo 16 años que recién está comenzando sus estudios a nivel bachillerato, justo en el momento en el que todo adolescente se siente sólo e ignorado por sus padres...