¿Por qué él? «Robert Downey Jr. Fanfic» «Editando»

La propuesta.

*Narra Anna*

Recogí los últimos papeles de la oficina y tomé el elevador.

Bajé al lobby y ahí estaba él, entrando por la puerta principal.

-Hola amor.- dijo cuando me vio.
-Hola cielo, ¿qué haces aquí?
-Sólo quería venir por ti. Aveces me dan miedo los taxis de New York.
-Bien, te creeré.

Los dos reímos y después nos besamos.

-Señorita Cooper tenemos que irnos.- dijo Robert entre besos.
-Señor Downey lo tenía que arruinar.- dije avanzando hacia la entrada.

Robert cerró la puerta cuando me disponía a abrirla.
-Permítame compensarlo.- dijo acercándose a mi.
-¿Cómo?
-La invito a cenar esta noche.
-Tengo planes. -dije tomando la puerta de nuevo, él puso su mano sobre la mía.
-Yo también y henos aquí.
Sonreí y después Robert me besó.
-Está bien, acepto su invitación.
-Buena elección.

Llegamos a casa y tomé una ducha.

Me puse un vestido color rojo.
Zapatillas y maquillaje.

Bajé y Robert estaba volteado hacia una ventana.
-¿Estás listo?- le pregunté y vi cómo metió una pequeña cosa negra en su bolsillo.
-Si, ¡vaya señorita Cooper! Está hermosa.
-Gracias señor Downey.

Subimos a su auto y llegamos al restaurante, el mismo donde me pidió que fuera su novia.

Ordenamos la especialidad del chef y estuvimos platicando un rato

-¿Me disculpas? Tengo que ir al tocador.- le dije a Robert.
-Claro, te espero.

Entré y me retoque del maquillaje. Al salir me llevé una sorpresa al ver a Robert en el escenario, de nuevo.

-Hola a todos. -dijo Robert y yo sonreí aún de pie fuera del sanitario.
-Bien, estoy aquí hoy para desearle un feliz cumpleaños a mi hermosa novia.- dijo señalándome y yo de nuevo sentí cómo mis mejillas ardían. -Hoy festejamos aparte nuestro aniversario, pero hoy es un día más especial. ¿Anna puedes venir, por favor?

Avancé torpemente hacia él. Me tomó la mano y me miró a los ojos.

-Anna, hoy te vengo a decir que estoy muy agradecido con Dios por haberte puesto en mi vida.

Tú eres la mujer a la que yo amo, te amo con toda mi alma, con todo mi corazón. Eres la mujer más maravillosa de todas. Eres mi vida, eres mi todo, todo lo que tengo y todo lo que soy, es tuyo para siempre.

Ahora...- dijo ésto poniéndose de rodillas y sacando la pequeña cosa que vi antes, la cual resultó ser una pequeña caja con una sortija de compromiso.-... Anna Cooper yo te amo y quiero compartir toda mi vida contigo. ¿Aceptarías ser mi esposa?

Sonreí al escuchar todas esas palabras, mi vida se alumbró, mi corazón latía fuertemente, todas y cada una de sus palabras me hicieron ver cuánto amo a ese hombre.

-Acepto. - dije llorando.
Robert se levantó y me besó levantando me.

Todos en el restaurante comenzaron a aplaudir, justo como hace un año.

Cuatro años me tomó ver y darme cuenta de que amo a ese hombre, que lo amo con mi alma.

Cuatro años me llevó encontrar el amor, lo encontré de una manera muy extraña, pero la más hermosa.

Me colocó el anillo en el dedo anular de la mano derecha.
-¿Sabes por qué se pone el anillo aquí?- me preguntó Robert.
-No, no lo sé.
-Porque éste es el único dedo que lleva una vena directo al corazón, con ésto Anna te entrego mi corazón.
-OH... Robert.- dije para después besarlo, rodeándolo con mis brazos y él tomando mi cintura.

Ahora estaríamos juntos, nada ni nadie nos podía separar.
Bueno eso fue, al menos, lo que yo pensé.