29. Separación y Boda

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Tris

-Pero, ¿Cómo es eso posible?

-Ni siquiera yo lo sé, pero es claro que de alguna forma introdujeron en veneno en tu sistema, el suficiente para matarte-mi corazón se estrujó con aquellas palabras, no podía tolerar la idea de ver morir a Tobias.- , y la verdad es que no es lo único que tienes.

-¿Hay más?-dije yo casi en un grito.

-Si, hay más, encontramos un cambio o mutación importante en tu estructura genética desde la ultima vez que estuviste aquí y eso sin duda me preocupa, sin embargo eso te mantienen con vida.

-¿Y qué podemos hacer?

-No podemos hacer nada. Temo que si te damos algún medicamento reanimemos o reforcemos al veneno en ti. Por ahora solo debes venir cada tercer día para ver cuanto disminuyo el veneno. Y te pido que tengas extremo cuidado con lo que comes y donde comes.

-Bien, lo tendré. ¿Cómo esta Tris?-dice Tobías despreocupadamente. Me pregunto si finge para no preocuparme o de verdad esta tranquilo.

-Por ahora debe usar silla de ruedas para evitar un sobre esfuerzo y que se habrán las heridas, conociendo a Tris creo que va a necesitar que la cuides mucho o mejor dicho que, andes detrás de ella para que no este levantada. Y traerla para ver como han cerrado los puntos. Fuera de las heridas que aun no sanan está de maravilla, pero quiero que se quede por lo menos hasta mañana por si acaso.

-Entonces vamos señorita, ustedes debe descansar.-Tobías soltó mi mano y se sentó, entonces arranco la aguja en su brazo que le administraba el suero. La doctora Roth dio un grito y se acerco a él.

-No puedes hacer eso, ¿Estás loco? Tienes suerte de no haberte lastimado.

-Doctora, llevó ya un largo tiempo inyectando agujas para saber como sacar una.-se levanta de la cama y de pronto me toma en brazos.- Ahora, si me disculpa doctora voy a llevar a Tris a su habitación.

-Aún no es seguro que andes por hay luego de tu desmayo. Dejame a mi llevarla en la silla, Tris debe acostumbrarse a ella.

-No. Soy capaz de llevarla, además no es nada pesada.- yo siento ganas de regañarlo, sin embargo veo su ceño fruncido y me da un ataque de risa, su ceño se frunce aun más y entonces le doy un beso en los labios. Luego pongo mis brazos alrededor de su cuello y lo dejo llevarme a mi habitación.

-Eres lindo cuando te pones necio.-digo poniendo mi cabeza entre su hombro y su cuello. Afuera esta Alice con Zeke en brazos, Uriah sentado en el suelo y Caleb con cara alarmada.-Estoy bien y Tobías igual. -bueno CASI bien.- Por cierto, hola Uri.

-Hola Tris.-dice con una sonrisa.

-Todos se ven cansados, vayan a dormir. ¿Y Lina?

-Se quiso ir con Alex.-sin duda eso era de extrañarse, pero fingí total desinterés para evitar pensar en mas de la cuenta.

-Vayan todos a dormir, tienen un aspecto cansado, les prometo que si algo malo pasa yo les aviso.

-Esta bien Tris. Nos iremos, pero solo porque tu también necesitas descansar. Ahora caminen chicos.-dijo Alice.-¿Quieres quedarte con Zeke o prefieres que me lo llevé?

-Creo que mejor se queda, tu debes descansar y yo me ocupo de él.-dijo Tobías.

-¿Me permite a Zeke?-dijo la Doctora Roth, Alice la vio como si estuviera loca.-necesito hacer una evaluación solo por si acaso y luego lo traigo y se lo voy a dejar personalmente a Tris.

-¿Le pasa algo malo?-dije asustadas.No, asustada no es la palabra...estaba aterrorizada porque algo malo le pasara a Zeke.

-No, Tris o al menos no lo estaba ayer, pero me gustaría hacerle una prueba por lo que paso con Tobías, pero ayer por la noche le hice un chequeo y estaba de maravilla. Tu solo descansa, te juro que él esta bien.

Divergente, Resurrección 1/2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora