Capítulo 17

30 2 0
                                    

CAPITULO 17

Vacío.

Lo único que puedo sentir es un gran vacío que no deja de consumir y arrastrar mi cuerpo hasta llegar a parar nuevamente en un pozo sin fondo.

Un pozo donde lo único que puedo escuchar son los latidos de mi corazón, que cada vez son más fuertes que antes. Simplemente, estoy sola en la oscuridad, sin esperanza ni fuerzas para salir adelante.

Por desgracia, justo ahora prefería seguir en ese pozo que estar aquí ahora, tratando de procesar lo que me acaban de decir.

Sus palabras han golpeado mi cabeza como si hubiese lanzado un balón de basket, dejándome completamente noqueada y sin sentido de la orientación. El cubierto de metal se resbala lentamente entre mis delgados dedos, golpeando así ligeramente la isla de la cocina e hiciera un sonido desagradable y terminará por atragantarme.

De un momento a otro, pase de estar comiendo helado a que mis pulmones estuviesen buscando aire  y mi cabeza no deja de dar vueltas y vueltas como si fuera una rueda de la fortuna.

Esto debe de ser una broma.

Una broma gigantesca que me haría reír hasta que mi estómago doliera.

Pero, su mirada sería me da entender que no es así.

El pelirubio al frente de mí, no duda en sacar otra lata de cerveza del plástico y jalar del material hasta crear su respectivo agujero y tomar de nuevo de ella, sin dejar de mirarme.

-¿Que ... que ... - balbuceo en medio la oscuridad. A penas asimiló que ahora escucho las voces de mis primos en la cabeza y este planea en decir que un mafioso es su padre y del su hermano pequeño.

No me jodas.

En serio, no me jodas.

Por inercia, arrastró parte de mi cuerpo hacia atrás, separandome un poco de el y pegando la espalda del respaldar, sin dejar de toser.

-No me mires asi - pide, apartándose las lágrimas que habían salido antes - Me enteré hace tres años y todavía sigue siendo un sufrimiento para mí - suspira - Pero por favor no me mires asi.

Niego con la cabeza varias veces, pasándome las manos por la cara, sientiendo un calor de repente con mi pobre corazón apunto de salir por mi garganta.

Esto no es nada bueno.

-¿Qué paso después de naciera Wyatt? - susurro carraspeando un poco.

-Tu padre enloqueció - contesta, tomando un nuevo sorbo de la lata- Y tenía razón de hacerlo - ríe - Tu madre había quedado embarazada poco después y el no podía aceptar quién era nuestro padre. El simplemente quería cuidar de su familia.

Desgraciamente, la mayor parte del tiempo no fue así.

Suspiro dejando escapar un pequeño sonido de queja, recordando que desde que tengo uso de razón, mi hermano mayor solía discutir mucho con mis padres, tanto que hasta incluso lograba desaparecer por días del apartamento. Hasta ahora, se que se escapaba para ayudar a Brian y sus hermanos. Pero aún así, nunca me llegó a mencionarme ninguna palabra acerca de esto.

-¿Cómo conociste a Sthefannie? - pregunto rompiendo el silencio y continuando con mi merienda nocturna. Arrugando la nariz de vez en cuando al oler el líquido desagradable del suelo.

- En la estación de policía - concluye - Alguien robo su cartera - sonríe - Todavía sigo sin entender por qué razón lloraba ese día - murmura - Si era por su cartera robada o por qué el chico que estaba a su lado.

THE SANDFORD || TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora