CAPITULO 3 (3° temporada)

198 7 2
                                    

  Los Angeles
____
Unos pequeños bracitos envolvieron mi cintura acunándose contra mi pecho. Sonreí aún con los ojos cerrados y con mis brazos estreché ese pequeño cuerpecito más contra mí. Le di un beso en la cabeza y abrí los ojos para encontrarme con los suyos. Ese hermoso color miel, esos hermosos ojos tan idénticos a los de su padre.

A los de... Nick.

- ¡Feliz cumpleaños, mi amor! – el me sonrió y me dió un beso en la mejilla – ¿Qué quieres de regalo? – Jerry no había querido que le comprara nada aún, decía que el día de su cumpleaños me diría que quería. El se mordió el labio inferior y bajo su mirada a sus manitos. Se despegó de mi y se arrodilló encima de la cama, me incorporé y me apoyé en el cabecero de esta esperando su respuesta, que ya sabía de antemano que no me gustaría.

Su mirada paso de la mía a sus manos y de sus manos a la mia dejándola allí.

- Papá... – y aunque fue un susurró pude escucharlo perfectamente.

El cuerpo se me tensó. Había estado esperando que llegara este día desde hace 5 años, me había preparado con miles de excusas posibles, y siempre que el me hacia referencia a las familias de sus amiguitos, sobre todo a sus papas, le cambiaba de tema o lo sacaba a pasear. Pero justo ahora no se me ocurría absolutamente nada. Mi mente estaba vacia, no había ninguna excusa ni un método de distraerlo. Le había prometido que le regalaría lo que quería en su cumpleaños numero 5. Bien, el quería a su papá, y yo no sabía si podría dárselo.

- Eh... - balcuceé sin poder encontrar una excusa y preocupada por la mirada de confusión de mi hijo - ¿Por qué quieres a tu papa? – no era la mejor pregunta, pero no se me ocurría otra.

Jerry se frotó un ojo con el dorso de su mano y hundió su labio inferior en su boca. Estaba nervioso. Lo conocía perfectamente para estar segura de eso.

- No sé – levantó y dejo caer los hombros -, tengo curiosidad...

¿Y qué se supone que deba decirle? ¿Qué su padre no sabe siquiera de su existencia? ¿Qué quizás el ya tenga otra familia o alguna novia? Dios mío, esta es la pregunta más difícil que me han hecho en mis veintidós años de vida.

- ¿Puedo verlo? – me miró con esos ojitos suplicantes.

¿Cómo resistirme a esa mirada de perrito abandonado? Cuando esos pequeños rulos cobrizos le caen en la frente y sus ojos brillan con el reflejo de la luz del sol que entra por la ventana. Pero aún asi, que conociera a su padre significaría que yo también tuviera que verlo. Y aunque me muero de ganas por hacerlo, por saber como esta, cuanto a crecido, como le ha ido, no soportaría la idea de que estuviera con alguien más. Simplemente, sería el fin para mi corazón.

- Eh... Cielo... - empecé a tartamudear buscando nuevamente una excusa.

Toc –Toc

- ¿____ Jerry está contigo? – preguntó Aiden desde afuera, ¿He mencionado que amo mucho a mi mejor amigo?
- ¡Si, Aiden! Pasa – le grité y segundos después el ya había entrado junto con Debby y mi papá con un pastel de chocolate en la mano cantándole el Happy Birthday a mi chiquito.

Esto lo distraería en lo que quedaba de la mañana. Y en la tarde era su fiesta de cumpleaños y estaría ocupado con todos sus amiguitos, luego en la noche estaría muy cansado... En general hoy me salvaría de esa pregunta.

Pero después del hoy... Siempre existe el mañana. Y ya no sé si pueda seguir distrayéndolo de esa manera, es pequeño pero cada día se hace más grande y sé que llegará el día en el que no servirán las distracciones y tendré que enfrentarme a la realidad. Y a Nick.


llegaste en el preciso momento - Nick Jonas & Tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora