llegaste en el preciso momento - Nick Jonas & Tú.

CAPITULO 14 (3° temporada)

  Negó varias veces con la cabeza y luego se paso una mano por el pelo. Levantó la mirada y había tanta furia en ella que me hizo retroceder del miedo.

Se acercó a mi y me tomó por los brazos sacudiéndome bruscamente.

- ¡¿Porqué nunca me lo dijiste?! – gritó aterrándome.
- ¡¿Para qué?! – me solté de sus brazos.
- ¡Debía saberlo!
- ¡¿Hablas encerio?! ¡¿Dices que debías saberlo?! ¡No me hubieras creido!
- ¡Por supuesto que si!
- ¡¿Cómo iba a saberlo yo?! ¡Si a la primera oportunidad que tuviste desconfiaste de mi! ¡Si yo te hubiera dicho que esperaba un hijo tuyo te hubieras reido y me hubieras dicho que era de Adamm o alguna otra persona!

El retrocedió. Habia dado en el punto y era hora de sacar todo lo que tenía guardado desde hace años.

- Se supone que enterarse de que vas a tener un hijo de la persona que amas tiene que ser hermoso, mágico, te tiene que alegrar. ¿Tienes idea de como me sentí cuando me entere que estaba embarazada? ¡Tuve miedo! Tuve mucho miedo y en lo único que pensaba era en alejarme de ti. Yo te entregue todo, absolutamente todo y en la primera oportunidad que tuviste desconfiaste de mi y tiraste a la borda todo ese amor que nos tuvimos. No confiaste en mi, nunca lo hiciste y me lo demostraste ese día. ¡¿De qué manera iba yo a decirte que estaba esperando un hijo tuyo para que me creyeras?!

No me había dado cuenta hasta entonces que estaba llorando. Miles de lágrimas rodaban por mis ojos mojando mis mejillas y cuando Nick dio un paso adelante con una mano alzada yo di uno tras y negué con la cabeza.

- No necesito que sientas lastima por mi, ni tampoco necesito que representes un padre para Jerry. Él a vivido muy bien estos cinco años sin una figura paterna más que Adamm o mi padre y no necesita otra cosa, no te necesita a ti.

Me sequé las lágrimas con el dorso de mi mano y caminé hasta la puerta, puse una mano en el picaporte y me giré hacia él que seguía como estancado en el suelo.

- Largate, por favor. Vete.

Nick dio la vuelta lentamente, tenía la cabeza gacha pero en cuanto la levantó y me miró a los ojos sentí un impulso increíble de abrazarlo.
Sus mejillas estaban completamente cubiertas por lágrimas y de sus ojos parecía que resbalarían más.

- Estaba furioso... – dijo – estaba furioso y dolido que no vi mas allá de mis ojos y cuando me di cuenta del error que había cometido no supe que hacer. Tenía miedo de que me rechazaras y prefería vivir con una imagen idealizada de los dos, de que me amarías siempre a vivir con el corazón roto porque ya no me quisieras.
Después ocurrió lo del secuestro y tu llamada telefonica... Fue como si no hubiera pasado nada, como revivir esos días en los que nos quedábamos hablando hasta muy noche por celular, pero cuando me dijiste que estabas secuestrada sentí que mi vida se cayó, sentí mi corazón romperse y luego en esa fábrica, cuando Philiph te disparó en el brazo e ibas a caer al suelo yo corrí hasta tu lado y te tomé en brazos. Sentí los mismo que sentí cuando te atropellaron y te llevaba en la ambulancia, ese amor tan grande que sentía y aun lo siento pero estaba asustado y cada que veía a Adamm me enfadaba y empezaba a pensar en cosas que no debía. Y cuando arme valor fui a tu casa pero no había nadie. Luego en el baile de la escuela Debby me dijo que tu habías venido a San Diego. Sé que debí buscarte antes, pero no podía dejar solas a mi mamá y a Jazmyn y tampoco sabía donde buscarte. Ni Debby ni Aiden me decían nada sobre ti y yo tenia miedo de que estuvieras con alguien más. Sé que tuve la culpa de todo y puedes estar completa y absolutamente segura de que te amo. Te amo y siempre te amaré y quiero tener la oportunidad de amar a mi hijo, no importa si tu ya no me quieres o si estas confundida, me basta con estar cerca de los dos. Ya me perdí cinco años de la vida de Jerry, por favor no me quites el resto de ella.

No pude aguantarlo mas y lo abrace. Lo abracé con todas mis fuerzas y recosté mi cabeza en la curva de su cuello.

El me amaba, me amaba y yo lo amaba. Quería conocer a Jerry y yo no era quien para impedirle eso. No importaba que Phil se haya escapado, no importaba todo el dolor que habiamos vivido, no importaba nada. Solo nosotros tres.
Poco a poco nos fuimos separando y me quedé viendo sus ojos mientras el aun tenia sus brazos enredados en mi cintura.

- ¿Me amas? – le pregunté en un impulso por escuchar esas dulces palabras de su boca de nuevo.
- ¿Y tú a mi? – le sonreí y lo besé de nuevo. Me apretó contra su cuerpo un poco más y me elevó los cm de diferencia que nos llevábamos.

Me separé de él y acaricié su rostro con una mano sonriendo de lado.

- ¿Entonces que dices? – preguntó. Sonreí y le di un corto beso en los labios.
- Te amo – susurré y pude ver como sus ojos empezaban a ponerse cristalinos -. Pero no quiero que llores, no es un momento triste ¿O si?
- No... - enterró su cabeza en mi cuello y me deposito en el suelo – Es uno de los momentos mas felices en mi vida.

Me separé de el y le agarré una mano tirando de el hacia las escaleras.

- ¿Qué pasa? – preguntó mientras subíamos.
- Creo que es hora de que alguien te conozca como lo que de verdad eres – le sonreí y el me devolvió la sonrisa.

Llegamos a la planta del segundo piso que estaba dividida en 6 habitaciones, el de mi padre, el mio, el de Jerry, dos cuartos de invitados y una biblioteca, además del baño.
Abrí la primera puerta al costado de la escalera que era de Jerry. Él estaba acostado en el piso con la cabeza entre sus manos al frente de la tv viendo Bob Esponja. Al oir el ruido de la puerta se volvió a mirarme.

- ¡Mami! – se paró y yo me hice a un lado para que también viera a Nick - ¡Hola Nick! Que bueno que no te haz ido aún, mi tío Adamm ya se quedó dormido de nuevo – hizo un puchero con la boca y miró a Adamm que estaba dormido encima de su cama.

Me acerqué a él aún con la mano entrelazada con la de Nick y me puse cuclillas.

- Mi amor, ¿Recuerdas el regalo de cumpleaños que me pediste? – Jerry sonrió.
- ¡Si! – respondió con un saltito. Jalé a Nick del brazo para que se pusiera de cuclillas también.
- Pues... Nick es tu papá.
- ¿No era tu amigo de la secundaria?
- Si, nos conocimos y nos enamoramos y te tuvimos a ti.
- ¿Y donde a estado?
- De viaje – le sonreí tratando de calmar mis nervios y apreté la mano de Nick que prácticamente y estaba temblando.

Jerry puso un mano en la mejilla de Nick y paso a lo largo de su cara. Luego sonrió.

- ¡Papá! – y se tiró sobre los brazos de Nick mientras el lo estrechaba contra si y yo, no pude evitar llorar.


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