Cap 19.- "Entre familia"

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[As]

Llego a casa de Aisa, bajo del auto a prisa y antes de llegar a la puerta ésta se abre y la pequeña idiota aparece ante mí, tiene los ojos un poco rojos, como si estuviera a punto de llorar, la preocupación por mi hermana es visible.

— ¡Nunca había desaparecido de esta manera! —dice acorrucándose en mi pecho, pasa sus delgados brazos por mi espalda apretándome con fuerza, tengo la intención de regresarle el abrazo, pero no lo hago.

— ¿Tienes una idea de dónde o con quien puede estar? —pregunto, pero de alguna manera ya me imagino la respuesta.

— N-no, bueno... tal vez con Andrew, no sé si esté o no con él, pero es con la única persona con quien pasa tiempo. —confirmar mis sospechas hace que la sangre me hierva, alejo a Aisa de mí con algo de brusquedad debido a la furia que me ha invadido, ella me mira atenta, pongo mi mano sobre su cabeza y sonrío a medias al ver una lagrima deslizarse por su mejilla, él ver cuánto se preocupa por mi hermana me hace sentir bien de alguna manera.

— Ella está bien —digo aunque no estoy seguro—. Espera aquí por si vuelve —. Digo dándome la vuelta yendo hacia el auto.

— ¿A dónde vas?

— A por Gretel —digo, me introduzco en el auto y sin mirar a Aisa salgo a alta velocidad.

Aferro mis manos al volante con fuerza, pienso en la vez que me enfrenté a aquel niño, el simple recuerdo me es humillante, él me ganó con facilidad, yo se lo puse fácil al sentirme abrumado ante todo lo que me decía, una repentina inseguridad me inundó y mi mente se bloqueó dejándome a merced de ese imbécil, aunque claro no fueron solo sus palabras, debo admitir que sabe pelear, su estilo me recuerda a alguien que conocí en mi estadía en el país del sol.

Gracias a que una vez le seguí ahora sé dónde vive el chico, aparco a unos metros de distancia de su casa, pero como era de esperar ésta tiene todas las luces apagadas, después de todo ya es madrugada. Me siento tentado a entrar a esa casa e ir en busca del bastardo, pero me contengo con todas mis fuerzas. Aún tengo presente el asesinato de esos dos chicos, tuve que ir a tomar un largo baño para desprenderme de la sangre que quedó en mi cuerpo, aun así las ansias de matar no disminuye, con cada segundo aumentan.

El tiempo pasa y solo me dedico a observar atento la casa, antes de darme cuenta ya ha amanecido, espero a que el chico salga para poder así dar con él, pero eso no sucede, veo salir a los que creo sus padres, pero de él no hay rastro, pienso que tal vez salió por otra parte o que lo hizo en alguna distracción, me voy ahora a el colegio, pero de igual manera este no hace presencia en el lugar y me pregunto si ahora está con Gretel, la idea de que mi hermana pase tiempo con ésta persona es algo que me cuesta aceptar.

Mi teléfono comienza a sonar de manera insistente, una tras otra se pierden las llamadas de Aisa, debe de estar preocupada ahora no solo por Gretel sino por mí, pero no estoy de ánimos para hablar.

Sintiéndome estúpido aparcado frente al colegio, pongo el auto en marcha y regreso a casa, al llegar le envió un mensaje a Aisa preguntándole si sabe algo de Gretel, de inmediato contesta que no y hace muchas preguntas que decido ignorar.

Enciendo la TV mientras pienso en las posibles razones por las que Gretel haya desaparecido, pero mis pensamientos se ven interrumpidos antes una noticia que llama por completo mi atención; hablan sobre una explosión en la mansión Lawrence, cuyo dueño es una persona algo importante en la cuidad. Escucho con atención, aunque no tiene nada que ver conmigo no me afecta en nada tengo un extraño presentimiento ante lo ocurrido y la desaparición de Gretel.

Beso Letal (18+)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora