YOU (Terminada - EDITANDO)

Tres. (c.e.)

Sus ojos celeste me miraban de arriba hacia abajo y eso me hacía incomodar, era como si me estuviera analizando.

-Lindo cabello -Me dijo con una media sonrisa en sus labios y yo por inercia toqué mi cabello. Lo tinture de un color celeste o verde, ya ni me acordaba.

-Si... gracias -Aclaré mi voz y lo miré a los ojos. Sus ojos me ponían nerviosa, pero un nervio raro, no lo sé- me tengo que ir -Pase por su lado pero éste agarró mi brazo haciendo que voltee hacia él.

-¿Nos volveremos a ver? -Su pregunta me dejo algo torpe. Claro que no lo volvería ver, no después de conocernos en un baño.

Qué vergüenza.

-Adiós Stephen -Me solté de su agarre y salí rápido del baño antes que alguien me vea.

Volví con los chicos y me senté en el mismo asiento que antes. Habían pedido otra ronda de cervezas y una nueva botella me estaba esperando, la tomé con gusto después de aquel encuentro con ese chico, juro que no volvería a escabullirme al baño de hombres, por más que me estuviera haciendo encima.

-Tardaste mucho -Taylor me miró con una expresión preocupada. Yo me encogí de hombros e hice una mueca restándole importancia.

-Estaba lleno el baño -Revolotee los ojos y bebí un trago de mi cerveza, tenía la garganta seca.

Ésta asintió antes de que su mirada pasara de mi y se quedara en algún punto del fondo de local en el que estábamos, yo arrugue mi entrecejo y me la quedé mirando preguntándome qué tanto veía detrás de mi. Voltee en la dirección en dónde los ojos de mi amiga apuntaban y ahí estaba él, el chico del baño.

-No te quita los ojos de encima. -Mi amiga habló con voz emocionada y chillona. Solté un pequeño suspiro y terminé mi cerveza en el siguiente trago.

-Claro que no, debe ser a otra chica. -dije intentando restarle importancia, mientras ella me miró arrugando sus ojos.

-¿De que tanto hablan ustedes dos? -Rob nos distrajo y yo le sonreí casi agradecida de que me salvara del interrogatorio de Taylor.

-De nada -Le dí una inocente sonrisa y miré mi celular. Ya marcaban las 2:36 ㏂.- Me tengo que ir chicos, dejé a Adam con Candice y ya se hace tarde -Me levanté y me despedí de cada uno con una mueca de disculpas.

-Te voy a dejar -Tay se levantó y yo negué con la cabeza rápidamente.

-No, tranquila. Llamo a un taxi, no te preocupes. -Le dí un beso en su mejilla como despedida y ésta me miró insegura.- te mando un mensaje cuando llegue, ¿si?.

-Está bien -revoloteo los ojos y me dió un abrazo apretado antes de marcharme

Caminé a la salida revisando mi celular para ver si tenía algún mensaje de Candice, pero no aparecía nada así que supuse que todo estaba bien.

Salí del bar y había bastante movimiento afuera, la verdad es que en Miami siempre hay movimiento a éstas horas, es día viernes y vuelvo a decir, es Miami.

Llegué a mi departamento en unos minutos y Adam y Can se encontraban dormidos en el sillón. Dejé mi chaqueta colgando en el perchero y mi bolso también, solté un suspiro y me acerque a Can con cuidado de no asustarla, la moví un poco y ésta me miró con sus ojos verdes y grandes producto del susto.

-Me asustaste -dijo soltando una risa y estirando sus músculos- ¿Que tal la salida? -Me preguntó mientras soltaba un largo bostezo.

-Genial. -Le dije con una sonrisa y saqué un par de billetes de mi billetera- Ten. -le pasé su paga, pero ésta negó y me dió un abrazo.