Capitulo Extra (Único)

17K 968 64
                                    

-Stephen -lo moví unos centímetros mientras me sentaba como podía en cama- Stephen.

Toqué mi vientre demasiado abultado mientras soltaba una queja por mis labios. Estaba teniendo contracciónes desde hace una hora y ya no aguantaba más.

-Genial -me senté en la cama mientras tomaba aire y agarré una almohada. Me giré un poco y golpee la cabeza de Stephen con ésta haciendo que diera un salto- ¡Stephen!.

Se giró y me miró tallando sus ojos.

-¿Que sucede?, ¿Estas bien?.

-Al hospital... Ahora -alcancé a decir cuando otra contracción me vino haciendo que apretara las sábanas.

-Tenía que ser a la cuatro de la mañana -se levantó y fue al clóset por el bolso que teníamos listo para este caso- muchas gracias señorita Emily, usted siempre tan prudente.

Me largué a reír por lo que decía Stephen pero no pude hacerlo por mucho ya que otra contracción me vino, pero ésta vez mucho más fuerte.

Cuando ya se detuvo me levanté con ayuda de mi novio y salimos de la habitación. Respiraba algo agitada pero trataba de mantener la calma o pondría histérico a Stephen y eso no sería bueno.

-¿Te haz fijado que siempre hace eso? -bajamos las escaleras despacio agarrándome bien de su mano.

-Ella no sabe, amor -rei de él y bajamos el último escalón.

Me puse una sudadera y me apoye en la pared tocando mi vientre y mirándolo. La verdad es que Stephen tenía razón, siempre que queríamos estar juntos, en ese sentido, Emily se ponía a moverse y dar patadas, y al final no podíamos tener algo de sexo tranquilos, o cuando Stephen se daba vuelta en la cama para dormir, mi vientre tocaba su espalda y Emily comenzaba a dar patadas hasta que Stephen se diera vuelta y le hablara un poco antes de dormir. No sé cómo lo sentía, pero era demasiado divertido. Se volvía loca cuando Stephen hablaba o yo le cantaba, creo que lo que a Adam le faltaba de hiperactivo, Emily lo tendría.

Nos subimos a la camioneta y me subí en la parte de atrás junto con Adam, este iba tan despierto que lo único que sabía hacer eran preguntas. Preguntas como ¿Y va a nacer ahora?, ¿Y por qué ahora y no más rato?, ¿Puedo cargarla primero cuando nazca?, ¿Estás segura que nacerá ahora?, Y así un millón de preguntas que trataba de responder de la forma más linda posible para no agarrarla con él.

Me pusieron en la camilla y me hicieron sentarme para ponerme la epidural, definitivamente no lo tendría con parto natural, si me dolían de esa forma las contracciones, no quería saber cómo me dolería el sentir su cabeza y luego sus hombros pasar ahí abajo.

Con Adam tampoco fui valiente, así que no lo sería ahora.

Finalmente nació a las cinco y cuarto de la mañana, y era una niña hermosa y pequeña según Stephen y las enfermeras. Adam estaba con mis padres en la sala de espera y por la mañana llegarían los chicos a verme. Stephen no soltó mi mano en todo el proceso, me daba las palabras de aliento necesarias para seguir pujando y fue el novio más perfecto en ese momento.

Limpió mi frente del sudor y cerré mis ojos para descansar unos segundos antes de que me pasarán a mi hija y poder verla por primera vez. Stephen seguía a mi lado haciendo cariño en el cabello y besando de vez en cuando mi mejilla.

-Lo hiciste de maravillas, nena -sus labios estaban pegados a mi frente mientras hablaba- te amo, te amo tanto.

Me escondí en su cuello mientras me abrazaba como mejor podía, el llanto de nuestra hija mientras la limpiaban y vestían me hacía sentir demasiado feliz. Para una madre, el momento más hermoso de su vida, es cuando ve por primera vez a su hijo, cuando toca sus pequeñas manitos y lo ponen en su regazo, ver la cara de embobado del padre y esa sonrisa quebrada tras la emoción de lo que significa ser papá.

YOU (Terminada - EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora