Epílogo

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3 años después...

Kiara

—Aquí está —Taylor llegó al local y me pasó la bolsa, ambas estábamos nerviosas.

—Quédate aquí, vuelvo enseguida —tomé firme la bolsa pero antes de dar un paso, Taylor me frenó.

—¿Segura que lo quieres hacer aquí? —la miré nerviosa pero segurs.

—No quiero esperar más, ya estoy que vomito de los nervios y no puedo esperar hasta llegar a casa. Y menos lo haré en casa.

—Sales inmediatamente, ¿Bien?.

Asentí segura y caminé hasta dentro, pasé por la cocina saludando a Brenda y me fui directo al baño que había en mi oficina, saqué la caja alargada y miré el test en mis manos. Hace poco más de un año con Stephen decidimos tener un hijo, pero no era un tema bien hablado entre nosotros por lo tanto no nos dejamos de cuidar, pero hace unos tres meses lo hablamos más seriamente y nos sentimos listos para tener un bebé, pero no había pasado nada... hasta ahora.

Entre al baño y miré el test, ya sabía cómo hacerlo así que lo abrí, saqué la tapa que tenía y lo hice tal cual sabía. Me moría de los nervios y necesitaba salir de la duda lo antes posible. Dejé el test encima del mueble, lavé mis manos y salí del baño encontrándome con Taylor apoyada en mi escritorio, cuando me vio salir se levantó y se paró frente a mi esperando la respuesta.

—No lo sé, ve tú —le pasé el test con las manos temblorosas.

Era la segunda vez que pasábamos por lo mismo, cuando me enteré que estaba embarazada de Adam, ella también estuvo ahí para ser la primera en ver la prueba.

—¿Y?

Los nervios me comían viva.

—Si —la miré con la boca abierta.

—¿Si?.

—Si.

—Oh por Dios, ¿En serio? —tome su brazo con la emoción apunto de estallar.

—Si, mira —me pasó el test y ambas rayas rojas estaban claras en la "pantalla" de la prueba de embarazo.

—Taylor... Estoy embarazada —ambas reímos chillonas y nos unimos en un abrazo.

Lo habíamos estado intentando al rededor de tres meses y al fin había sucedido, Stephen armaría una fiesta cuando se enterara.

—Nadie se debe enterar, así que Taylor... Por favor cierra la boca —me separé de ella  mirando sus ojos.

—Cerré mi boca cuando ahí estaba Adam —apunto mi vientre— no diré nada, lo prometo —viro los ojos— en serio me ofendes.

Reí y mordí mi labio ansiosa, para descartar cualquier duda tenía que ir a hacerme una examen de sangre, y obviamente mi amiga me acompañaría. Una vez tenga el papel que dice "positivo" impreso en él, le diré a Stephen, a mis padres y al resto del mundo.

Los días continuaron iguales a cualquier otro, ya me había echo el examen y ya tenía las pruebas en mi mano, claramente salió positivo y tenía cuatro semanas de gestación, dentro del próximo mes tendría control y aclararía cualquier tipo de dudas, aún qué bueno, las dudas serían más por Stephen que por mi.

Cerré la pastelería y guarde las llaves dentro de mi bolso, me subí a la camioneta y dejé el pequeño regalo que le había armado a Stephen. No quería llegar y decirle "estoy embarazada", que aburrido, quería sorprenderlo y que recordara ese momento para siempre.

Compré una caja de regalo y metí dentro unos pequeñas zapatillas blancas, con el test de embarazo y el resultado del examen de sangre, era algo bastante simple, pero se que que se emocionaría al enterarse por, casi, su propia cuenta.

YOU (Terminada - EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora