Once (c.e.)

22.7K 1.4K 43
                                    

Despues de haber soñado y sentido a Connor la otra noche, decidi agarrar un bolso con ropa e ir a visitar a sus padres junto a mi pequeño Adam. Maneje durante largas horas hasta llegar a la colorida casa de Ann y Markus.

Me recibieron con los brazos abiertos y un montón de comida, Adam reía y apretada el cuello de su abuelo mientras él le hacía cosquillas.

Amaba a ésta familia, siempre tan unidos y con esas incomparables ganas de querer ayudar al otro.

—Mi niña —Ann me abrazo fuertemente y yo sonreí. Siempre me vio como a una hija.— ¿Cómo estás?, Tu cabello sigue igual de loco —Ambas reímos y nos fuimos a sentar al sillón.

—Estoy bien, ya entre a la universidad, al último año —Sonreí contenta.

—Que bueno, mi niña &Agarró mi mano y le dió un apreton— y el amor... ¿Cómo anda?

—Sabes que en nada —Negué con mi cabeza— no puedo...

—Si puedes cariño. —Tomó mi mano y la acarcio— Aabes que a Connor no le gustaría que sufrieras por él, y menos que te quedes sola.

—Lo se, pero aún me siento totalmente comprometida con él, Ann... no quiero olvidarlo —Susurre y una rebelde lágrima salió sin aviso previo.

—Sabes que jamás lo olvidarás, estoy segura que él quiere verte feliz, cielo —Besó mi frente y me abrazo fuerte.

—Y éste chico está igual de hermoso que el abuelo —Ambas reimos viendo a Markus y Adam llegar a nuestro lado.

—Claro que si, Mark —Reí,  y a los segundos entró kevin junto a su novia, Mia.

—No lo puedo creer. —Mia corrió hasta abrazarme mientras kevin reía—  Viniste por fin. —La abracé fuerte también y sonreí.

—Me quedaré por un par de días. —dije y luego mire a los dueños de casa— Si no les molesta, claro.

—Me molesta mucho que estes aquí. —Ann agarró mis maletas y bromeó con dejarlas en la puerta, haciéndonos reír a todos.

—Que bueno que estes aquí, arcoiris —Kevin me atrajo a su pecho y beso mi cabello, lo abracé también.

Kevin es el hermano mayor de Connor, se llevan tan solo por un año, son iguales en todo aspecto, menos en el cabello, pero tienen la misma risa y la misma forma de hacer las cosas, siempre lo quise como a un hermano y el a mí también. Y luego esta la loca de Mía, su novia y una gran amiga, siempre me hacía reír con cada cosa que hacía.

Almorzamos todos juntos, Adam se veía feliz la verdad, y yo también lo estaba, me sentía tranquila. En la tarde fuimos a dar un paseo con Kevin y Mía, fuimos a nuestro pequeño parque escondido, como nosotros le decíamos, estaba en medio de un bosque y casi nadie llegaba ahí. Con el pasar de los minutos llegó Ashton, el mejor amigo de Connor y Kevin, me tiré a abrazarlo ya que hace mucho no lo veía, seguía igual que antes, sólo que con su cabello algo mas largo.

Ésto era lo que necesitaba sentir. La tranquilidad de estar con las personas que quiero y que me traen buenos recuerdos, me sentía como en casa.

Al otro día con la familia de Connor salimos almorzar afuera, en nuestro restaurante de siempre. Aquí conocía a medio mundo, Connor siempre me llevaba a conocer lugares nuevos y este siempre terminaba haciéndose amigos nuevos. Mientras comíamos, Ann y Mark nos contaban las anécdotas que han pasado en el último año, como que tuvieron que ir a buscar a Kevin al zoológico porque estaba fermentando en alcohol, hasta cuando John tuvo que estar en el hospital por fracturarse el pie jugando a las luchas con Kevin. Mark siempre fué así, tan jovial y carismático, todo un chiste.

Después de la comida le dije a todos que iría a visitar una amiga cerca de aquí, que volvía dentro de poco. Acomode a Adam en la camioneta y partí rumbo a verlo a él.

Decidí tomar la calle mas corta, sin ponerme a pensar que en esa misma calle tuve el accidente junto a Connor. Los miles de recuerdos pasaron por mi cabeza en un milisegundo provocando que varias lágrimas cayeran por mis mejillas, limpie mi cara y traté de olvidar eso y concentrarme en llegar al cementerio.

Estacione la camioneta y tomé a mi bebe entre mis brazos, decidí comprar un ramo de flores para adornar su tumba y después de eso crucé las puertas del gran lugar y caminé hasta dónde se encontraba el amor de mi vida. Al parecer habían venido hace poco a visitarlo, ya que las flores que había estaban en muy buen estado, habían fotos de él y sus amigos y... Dios... ¿Era una hoja de marihuana?... señor, ese fué Ashton, sin duda.

Acomode las flores junto a las que ya habían y me senté en el pasto, puse a Adam en mis piernas mientras el jugaba con sus juguetes.

—Hola, amor. —Sonreí, sentía que él me podía escuchar— ¿Puedes ver lo grande que está nuestro hijo?, será tan hermoso como tú —Adam se removió en mis piernas y se bajo hasta poder andar por si solo— Es igual a ti, tienen el mismo carácter, ¿Sabes? —Reí— Si no le dan lo que quiere se enoja y se va caminando a su cuarto, es muy divertido verlo. —Me puse un poco más seria de un momento a otro— No sabes cuánto te extraño, Connor, me siento tan sola si no estás... —Limpie mi mejilla de las nuevas lágrimas que caían— ¿Por qué te fuiste?, No debiste irte —Tomé un cuadro con una fotografía de él— te sigo amando cómo el primer día, cómo aquél día en que te dije "Te amo" por primera vez... ¿Lo recuerdas? Fuiste tan idiota esa vez —Negué con mi cabeza soltando una sonrisa- Me quedaste mirando con cara de nada cuando solté la bomba... y para más, me dejaste esperando por tu respuesta como cinco minutos y eso fué esperar demasiado —Dije bufando recordando ese día— Pero cuándo me iba a ir y dijiste que tú también me amabas, y todo se me olvidó —Dejé el cuadro en el mismo lugar y reí— Eras un tonto.

Me quedé por mucho tiempo mas ahí sentada, hablando con él y recordando todo, poniéndolo al día sobre lo que ocurría en mi vida y en la de Adam. Me sentía mucho mejor ahora, estar aquí junto a él y su familia me hacía estar bién.

Lo amaba como el primer día, y lo seguiría haciendo hasta que vuelva a estar con él, en otra vida, dónde podamos ser felices y jamás separarnos.

O eso quería creer.

***

YOU (Terminada - EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora