Tierna e inocente Dulce Desastre I

Capitulo 19

No sabía qué pensar.

El cielo estaba oscuro, a mi habitación ya llegaba el dulce olor del café.

—Valla Rose ya está de pie! tome una ducha fría para que se fuera todo el sueño, vestí con jean y blazer debía estar cómoda pero de una manera casual y elegante.

— ¿Estas lista para la acción?

 —Meg estoy muy nerviosa pero si estoy lista.

—Esa es la actitud así que andando!

Echando el auto a andar veíamos como el sol iba saliendo de entre las nubes, parecía que el día iba a ser perfecto, ya que el evento seria en un lugar abierto, en el Fort Greene Park, así que necesitábamos hasta la colaboración del clima para que todo saliese súper bien.

Al llegar a la fundación cada grupo se conformó para dedicarse a sus funciones.

—Te veo más tarde Rose... suerte —ella sonrió guiñándome el ojo.

—Buenos días Escarleth.

—Buenos días Meg, te felicito por tu atuendo es el más adecuado para el trabajo de hoy.

—Gracias me alegra haber acertado —me senté frente a su escritorio para tomar instrucciones.

—Y bien ¿leíste la agenda de contactos que te di?

 —He si, aquí tengo los números de contactos en caso de atención inmediata y demás contactos para víctimas de maltratos

—Muy bien, este es el formato que debes llenar en caso de recibir una denuncia. ¿Ya sabes a donde dirigirles en caso de que necesiten protección?

—Sí tengo los contactos de la casa de abrigo.

— ¿El de la policía para apresar a estaba ctimarios?

—Todo listo— Escarleth sonrió

—Muy bien, veo que si pasaste la primera prueba, ahora andando que Fort Greene Park nos espera.

Al llegar al parque, note que el departamento de publicidad había hecho un gran trabajo, estaba hermosamente organizados por stand, flores y avisos con imágenes de la fundación, frases que decían "No te calles, busca ayuda, denuncia la violencia" La tarima estaba lista para los grupos que iban a presentarse, imagine que Rose se encontraba en el toldo cerca de la unidad móvil de primeros auxilios.

—Woo esto es asombroso, siempre soñé ser parte de esto y hoy esta haciéndose realidad.

Nos dirigimos a nuestro toldo, había dos escritorios uno para Escarleth y uno para mí, encendí la laptop, comprobé que la línea del teléfono funcionara.

–Buenos días señoritas aquí tienen un café para comenzar la jornada.

Escarleth se froto las manos en señal de alegría. —Gracias nada mejor que un café en este preciso momento ¿prefieres otra cosa Megan?

—No. Asi está perfecto, gracias.

En un momento comenzaron a llegar mujeres de todas las edades y de otras partes de New York, algunas se acercaban para pedir información, otras venían a formular una denuncia, otras después de la entrevista eran referidas a las abogadas o la psicóloga dependiendo el caso. Al final de la tarde me di cuenta cuantas mujeres habían en la misma situación de mi madre.

—Vaya... 174 mujeres registradas— terminaba el evento y escuche como el vocalista de una banda cerraba el acto musical , pidiendo la recolección de fondos para la fundación de cobijo y protección a la mujer.

—Buenas tardes Manhattan, felicitamos a todas las mujeres por su gran valor y fuerza, felicitamos a la fundación por tan increíble trabajo.

—No puede ser conozco esa voz! —al asomarme vi como Josh sorprendido recorría con la vista todo alrededor.