Capítulo 19: El tercer Sannin.

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¡Bushido - sama aparece! ¡El dije de los Uchiha!

Narrador omnisciente.

En multimedia: Bushido - sama.










- ¡Haga algo Kakashi - sensei! -gritó la azabache al sentir dolor en el agarre del peliblanco.

Ambos estaban quejándose por el increíble dolor que sentían y pronto, la impotencia se apoderó de sus cuerpos al ser soltados de la nuca pero, al intentar levantarse el sujeto cambió de posición colocando su rodilla en la espalda de Sasuke y el codo en la de Kanade.

Estaba sometiéndolos como unos niños insignificantes y débiles.

-Kakashi, es mi discípulo de la técnica de sellados y jamas se atreverá a desafiarme. Ahora, escuchenme con atención, ayudaré a controlar ese sello pero, uno de ustedes me pertenecerá -sentenció, provocando que ambos abrieran los ojos sorprendidos.

Sus cuerpos comenzaron temblar en cuanto fueron liberados del agarre tan poderoso del sujeto y se levantaron para comenzar a darle caricias a sus zonas apretadas. Era claro que no se podía tratar con aquel sujeto y les parecía incomodo que incluso su Jounin a cargo permitiese que los controlaran como simples marionetas.

-Tú -señaló a la azabache con el dedo índice y esta frunció el ceño-. Comenzaré a entrenarte, si te niegas te colocaré una maldición mucho peor -amenazó.

-No tiene porque amenazarlos, ellos harán caso a sus ordenes sin objeción alguna -dijo con una mirada de confianza.

-No confío en ellos, son jóvenes e ingenuos, tomaran las riendas más fáciles para conseguir poder. Aún por encima de mezclarse con personas como Orochimaru -se cruzó de brazos y negó con la cabeza-. Lo anularé con un sello, pero al ser una maldición no puedo asegurar que sea estable así que escuchen bien -el sujeto se inclinó para quedar a la altura de los azabaches-. Tendrán que aprender a controlar su carácter y deberán de entrenar para utilizar con balance su chakra, ¿quedó claro?

Los dos Uchiha asintieron a las palabras que el extraño peliblanco estaba utilizando, ¿cómo era posible que alguien como él pudiera comportarse tan fríamente? ¿Qué clase de privilegios tenía? ¿Quien era ese tal Bushido?

Dio una pequeña vuelta alrededor del cuerpo de los chicos para analizar más detalladamente la maldición que tenían colocadas y con suavidad, removió el cabello de Kanade para verlo en un mejor ángulo. A contrario de Sasuke quien con solo estirar levemente el cuello dejaba que la marca se mostrase.

- ¿De que nos servirá aquel sello? Usted ha dicho que no puede desaparecer la maldición entonces, ¿para qué ayudarnos? -el sujeto se cruzó de brazos y miró incrédulo a nos chicos.

-Ya lo has dicho, los ayudaré a vivir plenamente por un tiempo y podrán participar en el examen de selección chuunin. Si llegan a desestabilizarse mientras compiten lo más seguro es que los ninjas del Hokage se encarguen de encerrarlos hasta controlar su maldición y no quieren eso, ¿o me equivoco? -Kanade, enarcó una ceja al terminar de escuchar dicha sentencia.

-Pueden confiar en él, Bushido es muy conocido en la aldea por ser alguien con muchas capacidades tanto en combate como en sellado. De él aprendí todo lo que sé, incluyendo mis técnica definitiva -miró a la banda ninja que yacía en su frente con el loco de Konohagakure-. Sé que detestan ser conocidos como los sobrevivientes de la masacre Uchiha, pero eso les toco y por ello daremos un buen espectáculo en la etapa final -anunció provocando que los chicos fruncieron el ceño confundidos.

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