Me incorporo y tomo mi cabeza entre las manos. Fue un golpe fuerte, pero no tengo ganas de llorar. Volteo para ver quién me sostuvo, pero desde el fondo de mi mente se quien es. Elijo mis palabras, pero antes de poder decirlas, el me gana.
-Espero que si tienes algo de respeto por ti misma, no volverás a tocarla. De otra manera, no acabaría bien. -dice, impasible.
Es un sentimiento nuevo, sentirte defendida. No había sentido eso desde un buen tiempo. Pero la primer persona que debe defenderse soy yo.
-No te regresaré el golpe, porque no soy así. Pero si vuelves a molestar a Marian, o a otra persona, prometo que el resultado no va a ser el mismo. -le digo, con voz fría.
Unos amigos tomaron a Marian y la llevaron afuera a tomar aire. Lo que necesito, ya que no se si es debido al golpe, pero de repente el aire de la cafetería no es suficiente. Le echo una última mirada fría a Andrea y salgo al jardín. El aire es bueno, pero me siento mareada. Decido que iré a la enfermería para tomar algo, pero de repente el piso no es muy estable debajo de mis pies. Comienzo a caer, pero después ya no estoy cayendo.
-Te tengo. -Aiden me voltea, entonces quedamos frente a frente. Toma mi mejilla y la examina firmemente. Su toque se siente tan bien, que por un momento el dolor se alivia. Luego la retira, y siento todo.
-Gracias, estoy mejor. -digo, mintiendo un poco. Todas las emociones me llegan, desde el enojo hasta la confusión y la sorpresa. Fue todo un espectáculo ahí.
-Si, claro. Digo, tu trasero casi vuela fuera de la cafetería. Pero supongo que no es nada. -Me espeta.
No sé porque, pero me río. Mucho. Y es incluso mejor porque está sonriendo, y de repente todo esto es genial.
-Bueno, mi trasero casi volaba. Pero al parecer no quieres que vuele. ¿Por que no solo me dejaste morir allí? -le digo, mirandolo divertida.
-Lo siento, pero mis principios no me permiten traficar traseros. Disculpa.
-dice, siguiendome el juego. No he dejado de sonreír.Sigue sonriendo, pero me mira seriamente.
-Enserio. ¿Te sientes bien? Podría llevarte a tu casa o algo. -me dice, realmente preocupado.No lo había notado, pero estamos en la luz de sol y aquí puedo verlo. Verlo bien.
Su cabello es oscuro, pero brilla en el sol. Es muy sedoso y se ve suave. Sus pómulos son altos y su nariz se ve firme. Obviamente hay que mencionar sus ojos. ¿Cómo pueden ser así de oscuros? Mide talvez unos 1.78, pero la verdad no podría decirlo con certeza. Se ve muy bien. No sé si bien le haga justicia, pero debido a su cercanía a mi cerebro no trabaja muy bien.-Oye, estoy bien. Enserio. Sé que no debí haberla confrontado, ella tiene problemas, digo, ¿quién no los tiene? Pero nadie debe tratar a nadie así.
Me mira con respeto, casi como si me admirara. Y es extraño, porque soy una chica de 1.66, con pelo castaño lacio, simple, normal, común. Pero no me siento así cuando me mira, y es genial.
Veo como se aproxima Leah desde el otro extremo del jardín, llega y tira sus brazos hacia mi, lo que me hace desestabilizarme. Finalmente me suelta y me mira preocupada.
-Oh dios, supe lo que pasó ahí. ¿Cómo rayos se atreve? Pero oye, estuviste genial. ¡Soy totalmente tu fan! Además se dice que no saliste sola... -se calla al notar la presencia de Aiden. Se pretrifica totalmente, y solo lo mira. Finalmente hablo.
-El es mi amigo Aiden, Leah. Aiden, ella es mi amiga. -les digo. Ella lo mira embobada. ¿quién no lo hace?
-Mucho gusto, Leah. -dice, estrechando su mano. Ella se la estrecha, vacilante.
-Alex, tenemos que irnos. La clase empieza en 20 minutos. -me dice ella, y se que lo que quiere son respuestas.
No tengo tiempo de despedirme propiamente de Aiden por sus atenciones. Solo soy capaz de despedirme con la mano, dándole una mirada de disculpa.
Capto una última mirada del el antes de doblar la esquina.Leah me lleva hacia una banca y nos sentamos.
-Alex, ¿porqué no me habías contado de el? ¿Porque rayos harías eso? -me dice, haciendo un puchero.
-Lo acabo de conocer, lo juro.
Y le cuento. No es que sea mucho, dado a que todo ha pasado muy rápido.
Pero al mismo tiempo, es lo más lento que he disfrutado. Tal vez, lo mejor.
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Hold Me Down.
Teen FictionSi me quieres preguntar de qué va esto, no lo hagas. Porque eso es algo que nosotros no sabemos. Somos títeres, personajes, y solo nos movemos y actuamos conforme ella quiere. ¿Quién es ella? Tal vez deberías mirar arriba. -- copyright --