All Over Again |RAURA||Fanfic||SIN EDITAR|

Capitulo 9

Toco el timbre y se acomodo esperando a que la puerta fuera abierta y en ese momento deseo que la magia existiera para poder desaparecer a la persona frente a ella.

-¿Que haces aquí Marano?

-Obviamente no vine a verte Eaton.

-¿Quien es Courtney?.. Laura estas aquí- justo en ese instante se presentaba ante ella Stormie.

-Tenía que estarlo Stormie, pero realmente necesito hablar con Mark, necesito de su ayuda para algo importante.

-Claro, pero no te quedes ahí parada y entra de una vez. La castaña se acerco hasta la rubia y la abrazo para después dejarse guiar hasta el estudio.

-Gracias Stormie, por favor podrías dejarnos a solas.

-No hay problema- cerro la puerta y dejo que ambos pudieran encontrarse.

-No puedo creer que hayas dejado de buscar a tu hijo Mark, ahora te rindes así de fácil- dijo ella no dejando de lado su decepción.

-Laura, la policía no dio esperanzas de que él sobreviviera.

-Pero aun no encuentran su cuerpo, eso no te da una idea de que puede estar vivo pero a punto de morir.

-No quiero que me reproches mas por mis decisiones, solo di que haces aquí y porque quieres hablar conmigo.

-Necesito que me ayudes a conseguir algo para mañana.

-Tiene que ser muy importante para que estés aquí a esta hora.

La castaña soltó un largo y sonoro suspiro, mantuvo fija durante unos segundos su vista en Mark y luego de un rato le explico todo lo que había hablado con el hombre que la había llamado solo horas atrás, el parecía no creerse ni una sola palabra y no era de menos, porque ni siquiera ella terminaba de creérselo.

-No bromees conmigo Laura.

-Sabes que nunca haría una broma de tan mal gusto. No puedo darte muchos mas detalles, solo puedo decirte que si es él esta muy mal y necesita de mi ayuda, pero no puedo hacer nada sin la tuya, esta demasiado lejos. Lo miro de manera suplicante como la vez que eran niños y tuvo que rogarle para que la llevara al hospital a ver a Ross, solo que ahora eran mas grandes y esto no se trataba de una simple quebradura de rodilla, era algo demasiado importante como para tomarlo en charla, ahora todo dependía de la decisión de querer ayudar o no a Laura.
...............

-Ese lugar queda muy lejos de donde se estrello la avioneta.

-Lose Mark, pero algo dentro de mi me dice que Ross esta ahí y me necesita.

-Esperemos que tengas razón.

-Se que sera así.

-Estaré aquí esperándote para cuando vuelvas.

-Gracias- dijo ella con una sonrisa sincera- recuerda que no debes decirle a nadie de esto. Te llamare cuando este con él.

Eran 4 horas de vuelo en el helicóptero y después tendería que conducir por casi una hora para llegar al lugar donde se suponía estaba Ross, pero si estaba vivo todo eso lo valía.

El lugar eran tan alejado de la civilización por así decirlo que ella aun se cuestionaba como había hecho el rubio para llegar hasta ahí, eso no era coherente. toco un par de veces en la puerta de madera, los pies le temblaban al igual que las manos y el resto del cuerpo, no sabia con quien o que se encontraría hasta que abrieran la puerta.

-Buenos días, soy Laura Marano, creo que fue usted quien me llamo ayer para avisarme que aquí había un chico- dijo cuando se encontro con el hombre frente a ella.

-Ahora la recuerdo, no pensé que vendria ta pronto- pronuncio con incredulidad.

-¿En donde esta? como esta? sigue vivo?, por favor respondame- hablo con desesperación apenas y dándose tiempo para respirar.

-Esta en la habitación, debería estar muerto hace días pero hay algo que lo hace aferrarse a la vida.

-¿Puedo ir a verlo?

-Es su decisión- dijo el hombre con desinterés. Camino con paso apresurado, la casa no era muy grande pero con solo entrar se sentía acogedora y cómoda. Cubrió su boca con ambas manos cuando estuvo en la habitación.

-¡Maldición Ross!- fue lo único que pudo pronunciar mientras sentía comos sus ojos eran inundados por lagrimas.

-Tiene quemaduras en muchas partes de su cuerpo, aunque creo que lo que realmente le afecto fueron los golpes que sufrió en la cabeza- el hombre hablaba como si fuera un experto.

-¿Como llego hasta aquí?

-Lo encontré en un lago a solo unos metros de aquí.

-Su avioneta se desplomo muy lejos de aquí, no entiendo como es esto posible.

-No tengo ni la mas mínima idea- se encogió de hombros.

-¿Sabe usted conducir?- pregunto ella luego de un rato en el que solo estuvo mirando a Ross y la forma irregular en la que respiraba.

-Por supuesto que si- afirma rotundamente.

-Puede por favor, por favor ayudarme, no estoy apta en este momento para conducir- era cierto, las piernas le flaqueaban y apenas podía sostenerse, añadiéndole la forma en que sus manos temblaban- Necesito que me ayude a llevarlo a un Hospital.

-Lo siento pero...

-Por favor señor, se lo suplico- dijo haciendo una especie de reverencia- si lo dejo mucho mas tiempo aquí sin atención medica estoy segura que se va a morir y puedo asegurarle que no es eso lo que quiero.

-Lo siento pero yo no puedo irme de aquí.

-Esta bien, lo entiendo, pero por lo menos ayúdeme a subirlo al auto, es lo único que le pido. El hombre asiente y tal vez al sentir pena por la castaña y la forma en la que estaba, se compadece de ella y decide llevarla al hospital.

-Por favor Ross no te mueras, te lo pido. Te amo lo sabes, perdóname por haber sido tan tonta y alejarme de ti, se que fue el peor error de mi vida pero ahora estoy aquí contigo y te necesito bien- sostenía su cabeza en sus piernas y acariciaba su cabello mientras con la otra mano lo aferraba a su cuerpo Las esperanzas cada vez eran menos y el camino se veía mas largo, pero si había sobrevivido casi dos semanas podría soportar unas horas mas hasta el hospital, porque el era fuerte y la tenia a ella a su lado.

***

Me emocione tanto escribiendo este capitulo, nose porque pero me gusta mucho..