Nunca ni por mas que lo intentemos logramos huir de nuestros sentimiento, sin importar que tan lejos estés de la persona dueña de ellos; si son demasiado fuertes no logras dejarlos atrás. Pero crees que después de que las cosas se vuelvan un caos se...
No estaba segura de estar haciendo lo correcto, pero era lo que sentía debía hacer, lo miro una ultima vez antes de desviar la mirada hacia el lado contrario.
-Courtney- susurro queriendo que el no lo escuchara, estaba demasiado nerviosa.
-Sabes que eso no me dice mucho- dijo mientras le giraba el rostro para que lo mirara. Ella trago saliva y lo miro directo a los ojos, esos perfectos ojos mieles que la hacían perderse.
-Ella era tu novia- recordar eso le molesto pero dejo ese pensamiento atrás-, cuando volví me entere que te engañaba con Riker.
-¿Que?, yo saliendo con Courtney, no lo creo, ella no parecer ser mi tipo.
-Entonces no estoy segura de que recuerdes cual es tu tipo- carcajeo ella.
-Espera- se detuvo el un momento a pensar- dijiste que me engañaba con Riker- ella asintió- es por eso, por eso estaba molesto con el.
-Ross- ella suspiro y volvió a mirarlo- no se, creo que el día de tu accidente fue todo dolor, tal vez nada fue un accidente.
-¿Por que no seria un accidente?
-La amas, y te enteraste que te engañaba con tu hermano, quizá en ese momento querías dejar solo de sufrir.
-No puede ser, a ella no la amo.
-Lo dices porque ahora no lo recuerdas.
-Se supone que cuando amas a una persona ese amor no se te olvida nunca, o al menos eso creo.
Las palabras del rubio le habían hecho pensar que si no la recordaba era porque no la amaba ni como a una amiga.
-Tal vez tengas razón, aunque cuando el amor no es correspondido te gustaría poder olvidarlo.
-Estas en lo correcto, aunque no creería que hubieran personas con tan mala suerte.
-Realmente tienes tantas cosas que recordar rubio.
-Dime, ¿como que?- ella dejo que su cabeza cayera en su hombro mientras dejaba que los parpados se le cerraran demostrando lo totalmente agotada que estaba.
-Quiero que vuelvas a ser mi Ross, ese que me llevaba a la playa cuando estaba triste, ese que me decía Te amo siempre que sonreía, el mismo que me ponía nerviosa y hacia que me sonrojara cuando jugaba con mi cabello, quiero que vuelvas a ser mi mejor amigo, a quien siempre le digo Te amo.
**
-¡Por favor Ross, no sigas!- el no respondía nada, la ignoro y solo continuo dándole golpes a todo; a la mesa, los muebles e incluso el televisor.
La castaña se sentó dejando su cabeza escondida en sus piernas mientras continuaba llorando, luego de un rato sintió sus brazos al rededor de ella, eso le reconfortaba pero no la hacia sentirse menos mal.
-Perdóname Laura, no quería hacerte llorar- le acaricio el cabello con delicadeza como queriendo aliviar casi toda su tristeza.
-Siento haberte dicho eso, ni siquiera se porque lo hice.
-No lo sientas, realmente también me gustaría ser ese Ross, recordar toda mi vida, todo lo que he vivido, recordarte y saber si puedo igual decirte que te a...
-No lo digas por favor, no tienes que recordar eso, no creo que las cosas sean así.
-Entonces ¿como son?
-Te conozco y se que prefieres no saberlo, ademas de que es lo mejor.
-Debe ser quizá lo mejor para ti.
-Lo es para ambos.
El rubio se alejo un poco solo para sentarse frente a ella, la miro solo un momento antes de empezar a jugar con un trozo de su cabello.
-No se como es que no te conozco, no me dices nada y aun así quiero protegerte de todo lo malo que te pueda pasar.
-No es de eso de lo que estamos hablando Ross- dijo ella con una sonrisa por el comentario anterior.
-¿Prefieres que volvamos al tema anterior?
Nego mientras lo dejaba acercarse mas a ella.
-¿Estas mejor?- pregunto el.
-Supongo que si- se encogió de hombros y vio como su mano paso de su cabello a su mejilla, solo para acariciarla un poco mientras dejaba sus rostros a escasos centímetros.
-¿Crees que sucedería algo malo si te besara?
-No se porque preguntas eso- su respiración empezaba a agitarse y la voz apenas y le salia, como el había dicho ni ella misma entendía porque después de tanto tiempo se seguía poniendo nerviosa.
-Porque por alguna razón quiero hacerlo- y estuvo a punto si no hubieran sido interrumpidos en ese momento.
La castaña se levanto de inmediato a el igual que el rubio que no se alejo.
-Es mejor que vuelva a casa, mis padres deben estar preocupados.
-Nada va a pasar si te quedas un poco mas.
-Creo que deberías abrir la puerta o la van a tumbar a golpes.
-No entiendo porque tenían que interrumpir ahora.
-Eso no es lo único que no entiendes rubio- pronuncio ella con una sonrisa en el rostro.
-Quiero entenderte a ti Laura.
-Eso va a volverse muy complicado.
-Tendré mucho tiempo para averiguarlo y entenderlo, nada es demasiado complicado.
-Ross, tengo que volver a mi casa y es hora de que empiece a organizar mi viaje de vuelta a Londres.
-Pense que ibas a quedarte mas tiempo.
Ella suspiro y lo miro a los ojos.
-Mi objetivo era buscarte y volver, es algo que ya hice.
-Me encontraste pero este no soy yo, sabes que no es así.
-Cierto, pero no hay nada que yo pueda hacer, ya todo el resto depende de ti y tu fuerza de voluntad.
-Quiero tener a alguien apoyándome.
-Tienes a tu familia.
-Quiero que seas tu.
-¿Por que Ross?
-Ayer pude recordar algo, un beso, tu y yo, como si no hubiera nada mas, se que puedo recordar, cuando te tengo cerca.
-Creo que se cansaron de tocar.
-No cambies el tema Laura- exigió el.
-Tu lo hiciste antes- Le recrimino ella.
-Entonces volvamos a ese.
-Prefiero que no.
El decía algo, ella estaba segura pero no lograba concentrarse en nada diferente a los labios, esos suaves y rosados labios que la habían besado casi tres meses atrás cuando ella estaba apunto de irse.
Lo pensó durante dos segundos para luego lanzarse sobre el, tomarlo por el cuello y besarlo; sentir sus labios sobre los suyos y confirmar que nada había sido un sueño y que lo tenia de nuevo. Al separarse no dijo nada y solo salio de el lugar dejándolo a el ahí, solo con sus pensamientos.
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